Capítulo 4.

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Monstruo.

El sol que se filtraba por la ventana iluminaba la opaca mirada muerta de William.
La noche había sido larga y agotadora, tan silenciosa que el tormento de sus pensamientos no dejaron que descansara más de un par de horas.

-Cuándo vuelvas limpia el sótano, no quiero ni una gota de culpabilidad. -Escuchó la voz de Esteban al otro lado de la puerta.
-Está bien -murmuró en respuesta.
Los pasos de Esteban resonaron mientras se marchó a su trabajo.

La mirada de William se encontraba perdida en el blanco techo, como si éste pudiera hablarle y contar todas las atrocidades que ha presenciado.
Si tan solo pudiera ser libre de si mismo por un momento... Si tan solo hubiera dicho la verdad aquella noche hace 11 años.
Sus pensamientos se vieron interrumpidos ante el poco agradable sonido de la alarma avisando que era momento de prepararse para un día más de desgracia.
Con gran pereza salió de la cama dispuesto a darse una ducha, para luego colocarse algo limpió y sin olor a culpa. Un minutos más tarde finalmente salió de casa para encaminarse al instituto, pero una pequeña silueta lo detuvo
-¡Buenos días! -saludo la pequeña con una amigable voz. Era aquella niña del otro día.
-Buenos días -respondió con tranquilidad tratando de no verse tan aterrador como siempre.
-¿Irás a clases? -preguntó mientras cortaba unas cuantas rosas del jardín de su padre.
-Sí, ¿qué haces afuera a estas horas?
-Mamá acaba de marcharse a trabajar. No me gusta estar sola con papá...
-¿Por qué? -William observó con atención a la menor, quien llevaba el cabello desordenado y una pijama arrugada y vieja. La pequeña estaba por hablar pero una voz varonil la interrumpió.
-Anne entra a casa, no quiero volver a verte hablando con esa cosa -ordenó su padre, mientras dirigía su mirada de desprecio hacia Will. Pero estaba tan acostumbrado a pasar por situaciones similares así que se limitó a retomar su rumbo al instituto.

El frío viento de la mañana soplaba sobre el rostro del joven, el melodioso cantar de las aves arruinaba el cómodo silencio que tanto amaba, así como los susurros de las pocas personas que pasaban por el lugar y le miraban como si de un monstruo se tratase.

Si las miradas mataran Will estaría mil metros bajo tierra.

Su paz y tranquilidad se fue por la borda al escuchar la peculiar voz de aquella chica, cuyo nombre había olvidado.
-¡Ey, Will! -canturreó con melodiosa voz, caminando a su lado.
-Pudrete -murmuró, seguido de un suspiro de frustración.
-No seas tan malo, solo quiero caminé a tu lado -sonrió -prometo guardar silencio.
-Mentira, se que hablarás todo el camino. -Con solo pensar en aquella suave, y asquerosa, voz dulce... Le daban inmensas ganas de quebrar su mandíbula.
-¡Claro que no!, lo prometo.
-Las promesas se crean para romperse.
-Eso es estúpido, no puedes romper una promesa.
-¿Quién dice que no?, los humanos solo dicen lo que el resto quiere escuchar, así es más fácil manipularlo
-¿Por qué eres tan negativo?
-¿Por qué estás hablando?, ¿acaso no prometiste cerrar la boca?
El silencio se adueñó del ambiente, la incomodidad y frustración no tardaron en hacer compañía.
-Eres demasiado ingenua, crees que todo es perfecto y el mundo es color rosa.
-Y tú demasiado desconfiado, ver el mundo color rosa de vez en cuando no es malo.
-Prefiero ser realista y estar un paso por delante del resto.
-La vida no tiene sentido si sabes lo que sucederá después -suspiró con frustración. Su vista se centró en el Instituto, el cual se encontraba a unas cuantas calles, pero era inevitable ver los grandes edificios de éste.
-Largo. -Eva recibió un pequeño empujón por parte de su acompañante.
-¡Ey! Vamos al mismo lugar -frunció el ceño y continuó caminando a su lado.
-¿Acaso no recuerdas quién soy?, las personas me ven como si fuera una aberración de la naturaleza.
-¿Acaso me importa?, agradezco tu preocupación, pero soy lo suficiente mayor para decidir con quien hablo y con quién no.
-No trato de protegerte, trato de proteger mi preciado silencio.
-Aún así, ¿quién necesita amigos que solo inventan rumores?
-¿Quién ha dicho que solo son rumores? -musitó apenas audible.

Obsessed With BloodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora