"Tú nunca serás el pago cariño, tú eres mía."
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07:58 pm. Parque Nacional Yoho, a 5 minutos de Emerald Lake.
-Vámonos.
Pisadas se escucharon cerca, y Shawn presionó entre los dedos el arma que cargaba. Pequeña y semiautomática, casi en un toque podría desprender una ráfaga de plomo.
-Vámonos, por favor, vámonos, sólo dales lo que quieren y vámonos.
Shawn se giró a mirarme, y en la oscuridad me apartó el cabello con los dedos de su mano izquierda. Me acaricio una pequeña herida en la frente, que sangraba.
07:58 pm. Parque Nacional Yoho, a 9 minutos de Emerald Lake.
La luna brillaba justo sobre mis ojos. El sonido de las pisadas se había extinguido en la oscuridad, y el frío me helaba la nariz. Me senté sobre la hierba húmeda, aún sintiendo el costado donde Nat me había pateado con pequeños espasmos adoloridos.
Me sujete el tabique de la nariz, y asegurándome de mantener el arma dentro del bolsillo de la sudadera que me habían dado, comencé a caminar hacia el árbol que Nat me había señalado.
Me puse el anillo en el dedo anular de la mano derecha, en donde parecía ajustarse mejor. Mis pasos cansados y adoloridos eran cortos, pero los árboles me ocultaban. Tenía sed.
Una sombra se hizo presente detrás de unos árboles cercanos. Metí mi mano derecha a la bolsa de la sudadera, mientras seguía avanzando.
-Danna –un murmuro se escucho de entre los árboles.
Un silencio volvió a hacerse, antes de que el murmullo se repitiera.
Pasos, y justo cuando estaba por echarme a correr, una mano se enrosco en mi muñeca izquierda.
-Danna, no corras.
Jack Johnson me miraba, con sus ojos azules resaltando de entre un moretón sobre su mejilla izquierda. Ninguno de los dos dijo nada durante un par de segundos. Entonces él me llevo tras un arbusto, quedándose en silencio durante un largo lapso, esperando por pisadas cercanas.
-Dame el anillo –murmuró-. No hay manera de que ninguno de ustedes pueda salir con vida. Danna, créeme, puede ser que Shawn y todos ustedes tengan la esperanza de regresar a casa, pero no tienen idea de a quienes se enfrentan. Si logran vencer a Baldassare, todos los que lo cuidan irán tras de ustedes
-No sé de qué me hablas –murmure.
-Es un círculo sin fin, Danna. Escojas lo que escojas, no te voy a delatar, pero te estoy dando la oportunidad de darme el anillo, y todos ustedes podrán retirarse sin ser más heridos de lo que ya están. Pero si eliges quedarte con él, ninguno de nosotros sabremos qué puede llegar a pasar...
-No estabas con Shawn...
Me levante lentamente. Si él apareció, únicamente buscando el anillo, había abandonado a Shawn en algún momento, y podía ser el traidor del que todo el mundo hablaba. Di dos pasos hacia atrás.
