05

3K 371 81
                                    

Ambos estaban cegados por la excitación ¿Qué importaba si se conocían desde hace unos pocos dias? ¿Qué importaba si era muy temprano o que a penas hace dos días se hayan dicho que se gustaban? No importaba nada más que el deseo que se tenían y las ganas de pasarla bien

SeungCheol sentía una inexplicable confianza en Jihoon al punto de querer estar con él y de mandar a freír lo incómodo que se sentía tener que mostrar su trasero

—Vamos a mi habitación —Dijo el pequeño, agarrando al mayor de su polera para luego besarlo

Seungcheol tomó las piernas del pequeño y lo subió hasta su torso para que pudiera afirmarse de él, el pelinegro demostraba su gran deseo de seguir con el evidente bulto que había bajo sus pantalones. Jihoon lo notó, lo masajeo escuchando gruñidos y suspiros como premio

Comenzó a desabrochar el pantalones lentamente, la mirada de SeungCheol era de completa lujuria esperando paciente que el menor se los quitara. Jihoon había imaginado tanto como sería este momento pero imaginarlo no se comparaba como verlo con sus propios ojos

SeungCheol besó su nariz, sus mejillas, su frente y su cuello, milímetro por milímetro mientras que al mismo tiempo el castaño le quitaba lo que quedaba de ropa

La piel blanquecina de Jihoon lo volvió loco, era suave y delicada. Intentó con más desesperación deshacerse de lo que les restaba de ropa pero algo le llamó la atención

—Jihoon, huele a quemado —Interrumpió el beso. Jihoon abrió sus ojos sorprendido y corrió a apagar la cocina o lo que fuese que se estuviera quemando. Se había olvidado que antes de salir dejó pan tostándose

El pequeño dio gracias porque sólo fuera pan, su hogar era pequeño pero era lo único que tenían su madre y él, no había nadie más para ayudarlos en caso de que algo les pasara

–¡Jihooon algo se está quemando! —Oyó gritar a su madre quien venía llegando de su trabajo, ahora si se había arruinado toda esperanza de seguir con el juego

En eso vio que SeungCheol bajó en silencio para observar la situación, cosa que su madre si notó. Lo escaneó con la mirada sin gesticular nada, Jihoon parecía nervioso, él sabía que ella era de aquellas personas sin rodeos

—Tu eres el deportista —Caminó hacia él con una ceja levantada. SeungCheol comprendió de donde Jihoon aprendía sus gestos

—¿El entrenamiento se practica en la casa también o estaban haciendo otro tipo de calentamiento? —Ambos chicos no pudieron ocultar su sonrojo, la mujer si era una persona sin filtros. Jihoon le lanzó una mirada de enfado  y ella captó. Sin más que decir, subió las escaleras y  desapareció

Jihoon pasó sus brazos por la espalda de SeungCheol inclinándose hacia arriba robándole un casto beso, subió su polera en busca de más hasta que fue detenido por sus grandes manos

—No creo que esté bien hacerlo con tu madre aquí —Realmente se sentía incómodo

—Eres muy acomplejado, así nunca llegará la ocacion

—Jihoonnie, mis ganas por ti no desaparecerán —Guiñó coquetamente para luego besarlo con sus labios ya mojados

—Esto me volverá loco —Dijo Jihoon arrastrando nuevamente a SeungCheol a la habitación —Tengo otra idea donde igual disfrutaremos

SeungCheol observó como Jihoon se quitó rápidamente los pantalones quedando en ropa interior, se sentó sobre sus piernas y comenzó a hacer fricción con sus caderas

—Esto es lo que yo llamo calentamiento —Le susurró en su oído. SeungCheol lo besó con locura, ambos soltaban gemidos ahogados, la excitación los estaba consumiendo

—Cheol ¿A qué hora vas a empezar?

—Me gustas, Jihoon —Fue lo único que respondió, hundiéndose en su piel

—Cheol —Repitió pero éste lo ignoraba con besos —SeungCheol ¿Eres virgen?

—¿Ya te dije que me gustas? —Intentó retomar los besos pero Jihoon lo impidió

Suspiró derrotado

—Cheol, respóndeme

—MmmH... No virgen, digamos que esta sería la primera vez que yo doy —Escondió su cabeza en el pecho de Jihoon, avergonzado por lo que acababa de decir

—¿Me estas diciendo que fuiste el que recibe?, ¿El pasivo? —Escuchar eso era algo loco para Jihoon, nunca se lo llegó a imaginar

—No fue nada duradero

—SeungCheol perdón pero ¿Quieres que seamos una pareja de versátiles?—Jihoon lo miraba extrañado, a él nunca le había tocado ser el activo pero de imaginarse estando entre las nalgas del mayor se encendía un calor en su cuerpo

—No, quiero se el que manda, el que te de, Jihoon —Había vuelto esa mirada llena de lujuria de hace un instante

SeungCheol coló una mano en el calzoncillo de Jihoon, masajeando su trasero, el pequeño gimió agudo cuando sintió un frío dedo tratando de buscar su entrada, recordó que su madre estaba en la habitación de al lado y camufló sus gemidos besando el cuello del mayor

Al momento de introducir un dedo sintió además la otra mano traviesa tocando su miembro necesitado, era la gloria para Jihoon quién hacía movimientos contra la pelvis de SeungCheol haciendo que su erección bajo su ropa interior rozara con el bulto del pelinegro

Jihoon quiso desabrocharlos pero sintió dos dedos más haciendo perder la poca cordura que le quedaba, SeungCheol había sido brusco pero no le importaba, la sensación que estaba sintiendo le encantaba. Su miembro aún seguía envuelto por la mano de SeungCheol, por lo que era su turno de masturbarlo pero en ese momento se desplomó con el movimiento de arriba a abajo que  estaba recibiendo

Sintió el cosquilleo y terminó con un jadeo en el oído del mayor, con su ropa interior manchada de su escensia, cayó a la cama para recuperar el aliento, estaba tan cansado pero satisfecho y es que tener un orgasmo en aquella situación sin gemir muy alto por el temor a ser pillados

Era un verdadero desafío

—Ahora te toca a ti —Habló Jihoon ya recuperado

—Lo siento Jihonnie, se me hace difícil con tu mamá al lado —SeungCheol se excusó levantándose de la cama

—Con razón eras el pasivo

El mayoe tomó su bolso y se dirigió a la puerta con una sonrisa, el castaño posó sus ojos en sus pantalones cortos apretados marcando lo que hasta el momento era su atributo que más le encantaba y que ansiaba tener

Miró a Jihoon aún asimilando lo que acababa de pasar, se acercó al cuerpo del pequeño tendido en la cama, besó su frente y volvió a sonreír

—Me gustas, Jihoon —SeungCheol se despidió saliendo de la habitación

—Me gustas, SeungCheol —Dijo para sí mismo

Pantalones (JICHEOL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora