Pantalones (JICHEOL)

11

Jihoon llegó a su casa muy cansado, tener entrenamiento con el capitán estricto y tener relaciones después no era una buena idea

Dejó caer su cuerpo al sofá con la intensión de poder dormir, sin embargo había alguien mirando todo sin ser vista por el pequeño

—¿Por qué vienes llegando a esta hora? —Preguntó su madre Jihoon dio un salto levantándose de golpe

—El entrenamiento con SeungCheol me dejó agotado para ir a clases

—Mmmh... Esta bien, puedes quedarte —Su madre se sentó a su lado con una expresión curiosa —¿Cómo van las cosas con él?

—Van bien, muy bien —No pudo ocultar su sonrisa —SeungCheol me gusta mucho

—Me alegro, tu carita me lo confirma

Hubo un silencio incómodo al menos para Jihoon, no habían secretos entre ellos y era lo bonito de su relación madre e hijo

—Mamá con SeungCheol ya hemos estado juntos —Jihoon estaba algo cohibido, jamás le había dicho directamente a su madre cuando se acostaba con alguien, ella siempre lo terminaba deduciendo, el poder era una madre era aterrador

—¿Estar juntos de compañía o de amistad? Defineme estar juntos

—Ya tuvimos sexo —Sabía que lo hacía para exaltarlo

—Vaya, te debe gustar mucho para que me lo estés diciendo por tu cuenta ¿Fue como lo eperabas o te trató mal?

—No me había sentido así nunca, es como si me sintiera protegido —Recordó unos segundos —Ni siquiera con el estúpido ese

—Ese niñito se veía tan bueno, que bueno que ya no volviste a verlo y ya sabes que nunca más entrará a esta casa

—Se fue de la escuela mamá, ya no lo veré más

Jihoon había tenido una única relacion seria en donde se enamoró perdidamente pero las cosas se jugaron mal y más rápido se pilla a un mentiroso que a un ladrón y aun abusador, el chico en realidad sólo jugó con él, le hizo daño y perder la fe en el amor aunque le sirvió para refugiarse en su amada fotografía. No quería pasar lo mismo con SeungCheol quería confiar en él

Pasó toda su tarde pensando en los agradables sentimientos que estaba sintiendo, hacer el amor le había hecho cambiar toda perspectiva que le veía a su relación con SeungCheol, ya no eran jugueteos del momento, ni calenturas pasajeras, era algo más comprometedor y eso le causaba miedo, miedo que no jugaran con él, miedo a amar únicamente de su parte y miedo a sufrir otra vez

Una parte de sí le decía que el pelinegro no era de esa clase de persona, lo había demostrado con los detalles y el trato hacía él, pero ¿Cómo confiar completamente en alguien que llevas conociendo muy poco?

Cuando Jihoon llevaba aproximadamente 3 horas dormido despertó con la sorpresa de que unos ojos con enormes pestañas lo miraban con dulzura

—¿Que haces aquí? —Preguntó somnoliento

—Tu mamá me dejó entrar aunque me quitó algunas naranjas

Jihoon rió tomando las que el pelinegro le estaba ofreciendo

—¿Cómo te fue?

—Bien, nos estamos preparando para el partido de la semana siguiente —SeungCheol no alcanzó a comer el gajo de sus manos cuando sintió los brazos del pequeño rodeándolo en un fuerte abrazo —¿Quieres quitarme la ropa?

—No, solo quiero abrazarte —Jihoon no se despegó pero si reaccionó al abrazo correspondido que el mayor le estaba dando —Abrazame mas fuerte por favor —Le decía casi en susurro

Se quedaron asi por unos 10 minutos, cuando se separaron SeungCheol comenzó a besarlo tiernamente por todo su rostro, beso tras beso, segundo a segundo

—¿Quieres contarme algo? —Preguntó el pelinegro en voz baja

—Quiero que sepas que tengo un corazón roto y no quiero que me vuelva a suceder —Bajó su mirada avergonzado

—No lo haré te lo prometo —Besó sus labios con ternura

—Solo quiero que rompas otra cosa —Jihoon sonreía con picardía

—Basta Jihoon —Reía también —Hay momentos y momentos, seriedad por favor

Solo faltaba un día para el fin de semana, su primera cita, se lo había contado a su madre y ella le ayudó a escoger su ropa, debía verse genial pero a la vez cómodo, por si algo pasaba

Jihoon llegó 20 minutos antes ya que pasaría a comprar algunos artículos que su madre le obligó a hacer, le avergonzaba que SeungCheol lo viera comprando ese tipo de cosas

Una vez terminó su compra, se sentó en un lugar más apartado de gente, habían demasiadas personas y un calor insoportable

Sin embargo diez minutos después divisó entre la multitud a la persona que esperaba, lo vio sentarse en una banca pero mas que eso, casi se queda sin aliento al ver que SeungCheol llevaba puestos unos pantalones bastante apretados haciendo remarcar mejor su buen formado trasero

Se quedó sin aliento imaginando todo lo que le quería hacer, pese a ello a los segundos después pensó en que no podía ser él único pervertido que miraba su retaguardia, sintió celos al fin y al cabo SeungCheol era suyo de alguna manera

—Te llevaré al baño a mitad de la película Choi SeungCheol —Pensaba con su mirada fija en el chico

Quiso esperar a la hora justa pues pensaba que debía ser puntual o quizás hacerlo esperar un poco. Sonreía cada vez que miraba cada detalle de su chico, sus pestañas, su nariz, su mentón, sus labios, sus expresiones, su lengua y sus hoyuelos

Le encantaba SeungCheol

Y era algo mas que sólo atracción fisica, quería saber más sobre él y estar en su vida