Omegle ➳ j.b

Capítulo 14

¿Alguien por favor, podría darme un disparo?, con las clases, el verano a un mes, con los exámenes, con los deberes, con Amanda hablando de aquí y para allá de Jack, con Vanessa diciéndonos putas a las dos. Porque sí, ella había cambiado, desde que Amanda la ''dejó'', Vanessa ya no es la misma. Era otra. Y sin Justin durante dos meses.

Hace un mes exactamente paré de hablar con él, hace un mes que fue nuestra última conversación. He tratado de superarlo, pero mientras más trataba de superarlo, más me obligaba a buscarlo por ahí, a saber de él.

Era la primera vez que me enamoraba, tenían que entenderlo. No estaba exagerando las cosas. Él me había hecho sentir única, especial, durante meses, muchos meses.

Hace muy poco había cumplido por fin mis dieciocho años, había recibido un mensaje de él, yo no le respondí, pero fue tan hermoso lo que me escribió que lloré durante días leyéndolo y volviendo a leerlo.

''_______, espero que pases un lindo cumpleaños, realmente lo espero, con todos tus seres cercanos y familiares. Amaría estar ahí contigo, pero sé que no sería lo apropiado, porque sé que no quieres saber nada de mí. Lo he captado, lo he entendido, sé que no quieres hablarme y aunque a mí... bueno, no importa. Espero algún día poder saber de ti, espero algún día podramos hablar de nuevo. Me interesas, te quiero, aún te quiero, y te quiero junto a mí. No sé qué me hiciste. No sé qué fue lo que hiciste con mi corazón. Lo tomaste y te lo llevaste... sin ti estos meses han sido horribles. Y ni siquiera te he conocido en persona. Quiero que entiendas que yo nunca quise hacerte daño, nunca, y es por eso que nunca te lo dije. 

Todo partió cuando una chica me rompió mi corazón, yo era un pobre iluso... un pobre tonto que habían utilizado para atrapar a otro hombre, con la chica estuvimos más de un año. ¿Puedes entender por qué soy así?, una chica totalmente tierna, amorosa, menudita, pequeña, de mi misma edad, tímida, sonriente, esa chica, destuyó mi corazón. Yo estaba enamorado.

Nunca quise decírtelo porque era parte de mi vida pasada, algo que quería olvidar para siempre. Pero sé qué aún no he podido hacerlo. Por eso le hago esto a esas chicas. Pero yo nunca tuve en mi mente hacertelo a ti. Que eso quede claro. ______ me gustas, te quiero, y eres especial. Nunca lo olvides. Esto será lo único que sabrás de mí. No quiero incomodarte, o molestarte más. No volveré a buscarte. Por primera vez estoy pensando en alguien que no sea yo y mis sentimientos. Tú me quieres fuera de tu vida, lo haré. Saldré de ahí. 

Con toda mi alma, te deseo feliz cumpleaños. Eres increíble. Nunca lo olvides darlin.''

Él había sido tan hermoso al escribirme eso. Nunca lo respondí, había llorado días, y sabía que si lo hacía, ya era demasiado tarde. Él se había ido de mi vida, como llegó.

— ¡Ya he llegado! —dijo Amanada apareciendo por mi dormitorio. Suspiré mientras me quitaba mis lágrimas.

— ¡O.M.G!, nena, deberías de salir, ¡mira este chiquero!, ¿qué ha pasado con mi mejor amiga? —dijo ella acercándose y sacando la ropa esparcida por el suelo. Reí.

— No seas exagerada, estaba buscando algo para ponerme —dije mientras me miraba al espejo.

Tenía unos shorts jeans que llegaban a mis muslos, tan sólo un poquito más abajo del trasero, mis piernas blancas y largas tenían unas medias de color negro, que se transpasaba mi color de piel, tan sólo un poco. Una remera blanca holgada, suelta, con un escrito de ''I still believe in us'' en negro, y mis converse.

Tomé mi bolso y miré a Amanda.

— Ya, estoy lista, ¿qué película veremos? —le pregunté. Ella se encogió de hombros.