El camino del mall hacia mi casa no era tan largo, sólo eran algunos pocos minutos. Suspiré y me dediqué a mirar por la ventana mientras Justin conducía... Sentía constantemente sus miradas en mí y cada vez que lo hacía, algo en mí, en mí interior se retorcía, queriendo gritar vamos, está ahí, bésalo. Pero obviamente no le tomaría la palabra.
No hablamos en todo el camino, y ya cuando estuvimos al frente de mi casa —dirección que él se sabía perfectamente, joder, ¿en qué estaba pensando en cuándo se la di?—. Se estacionó afuera de mi casa, apagó el motor y nos quedamos ahí, en silencio, los dos mirando hacia el frente. Suspiré y agarré mi bolso, dispuesta a irme y despedirme por el lado de su ventana, pero él agarró mi mano impediéndomelo.
— ¿Me dejarás verte otra vez? —susurró. Lo miré con una ceja alzada y seria, luego miré hacia otro lado. Quería volver a verlo, pero tenía miedo. Negué con la cabeza.
— No lo sé —me encogí de hombros. Él asintió con la cabeza.
— Bien, te paso a buscar mañana a las cuatro de la tarde, estate lista —dijo rápidamente antes que yo pudiera detenerlo, lo miré molesta.
— Te dije que no sabía —dije con una voz firme pero calmada. Justin se encogió de hombros.
— Dijiste que no lo sabías, no era ni un sí ni un no, así que decidí por ti —dijo mirándome y sonriendo.
No me sonrías así. Quería gritarle, pero nada salía, me quedé ahí, pasmada viéndolo.
— Idiota —susurré. — De todas maneras no estaré lista. —Él se rió.
— Créeme lo estarás. —dijo entredientes.
— ¡Já!, ahora sólo porque tienes una gran experiencias con chicas, y que ellas no se resisten a ti, ¿vendrás aquí y me dirás todo bonito para luego llevarme a la cama no, verdad break pussies? —le dije totalmente enfadada. Odiaba que tomaran decisiones por mí.
Justin me soltó la mano y miró bruscamente para otro lado, apretó la mano en el volante del auto, y tensó su mandíbula. Me asusté, lo había puesto furioso. Volvió a mirarme, pero me sorprendí con la mirada en su rostro.
No estaba enojado como esperaba que lo vería, tenía una mirada triste.
— Ve adentro, tus padres deben de estar preocupados —dijo sin mirarme y hablando exageradamente suave. Tragué saliva lentamente, sintiendo como todos mis nervios eran remplazados por la culpa.
— Justin...
— Entendí tu punto _______, ve adentro, tus padres pueden salir en cualquier momento al ver un auto afuera de su casa —me dijo mirando por su ventana. Luego se volteó y arrugó el ceño. Encendió el motor del auto.
Agarré mi bolso y salí, luego caminé hacia su ventana lo miré.
— Gracias por traerme —le dije, él aún tenía su ceño arrugado. Asintió lentamente.
— Vale, anda adentro y cuídate —él quiso sonreír, pero le salió una mueca.
Me hice a un lado y el auto partió bruscamente. Suspiré, yo y mi gran boca.
Caminé con paso lento a mi casa y entré, y justamente mis padres estaban ahí mirando hacia la ventana. Se voltearon y sonrieron cómplices.
— Okay... —susurré extrañada. Mi mamá sonrió y papá me miró frunciendo el ceño.
— ¿De quién era el auto? —dijo mi papá en un tono duro, mi mamá lo miró y le frunció el ceño y luego me miró sonriendo.
— Deja tu hija en paz —dijo graciosa mi mamá, mi papá la miró y le sonrió cálidamente.
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Omegle ➳ j.b
FanficOmegle es una página para hablar con el mundo de lo desconocido, donde todos a veces desean tener un juego sexual, o donde realmente quieres conocer a personas que sienten o piensan igual que tú. Sólo fue entre por diversión, y... al final terminé m...