Capitulo 18

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18

Unos gritos me despiertan abruptamente. Los gritos eran de mi padre.

-¡¿En que estabas pensando mocoso?!-le riño mi padre a Harry-

Me encuentro parada en el instante algo mareada. No importa que esté en piyama o que él este aún en bóxer, yo me paro entre medio de ambos sin saber qué es lo que sucede.

-¡Creo que será lo mejor!-le grita Harry en respuesta

¿Qué será mejor?

No digo nada, mi cabeza de mueve de un lado a otro sin más que hacer, intentado comprender lo que está sucediendo.

-Hemos hablado tanto, tantas veces te dije que, no  juegues, solo trabaja. Hazlo con otras chicas ¡Por algo te decía esas cosas! ¿No crees? –Le grito más fuerza, las venas hinchadas en su rostro al rojo vivo-

¿Qué tiene que ver el trabajo?

Eh visto a mi padre así cuando tenía cinco años, y estaba peleando con mi madre frente a mí. Jamás me había sentido tan asustada.

Me recuerdo adentro de mi ropero, tapándome los oídos por mucho tiempo, tanto, que para mí se me hacía un día completo.

Mi madre me había encontrado con lágrimas y un ojo morado.

- ¡Te lo dije porque sabía que algún día te podría pasar esto!- me señala a mí, con su dedo índice en gesto de desprecio –

Me sorprendo y abruptamente y atónita me pregunto, ¿Qué hice yo?

-¡No la metas más en esto! –Harry apretó su mandíbula. A él jamás lo eh visto tan… fuera de su casilla-Ella no tiene nada que ver, Yo cambie acéptalo ¡Búscate a otro! ¡Búscate a  otra chica! Con quien sea pero no con ella, ¡No con Britanny, tu hija!

¿Esto se debe a que me encontró durmiendo con él?

¿Y qué hacía Brandon en mi pieza?

-¡Maldita sea Harry! -se le acerca con oscuros ojos  espantándome por completo. Estaba aterrada- Tienes un trabajo impecable, eres difícil de remplazar a igual que a ella-apretaba sus dientes- Ella me da ventajas que otras pendejas no me podrían dar. –los ojos se me cristalizan-

Harry debería estar como yo, pero él tenía sus pies firmes y la cabeza derecha encarando a mi padre. Los ojos se Harry se profundizan pero mi padre, el hombre alto y corpulento, no se intimida.

-No la trates como si fuese una de esas –noto sus puños, blanco y firmes a los costados de Harry-

-Vamos Harry –mi padre, emboza una sonrisa. Una sonrisa tan asquerosa, burlona y despreciable y torcida- Lo será y ambos lo sabemos

En un abrir de ojos, veo el puño estrechando contra la mandíbula padre recibe un puñetazo. Veo correr sus labios y su mejilla en dirección donde el puño impacta. Mi padre se tambalea y se sostiene la mandíbula con una mano.

Sus ojos. Los recuerdos reviven y mi respiración se acelera. Yo me paralizo.

Mi padre mete su mano en la cadera. Nunca fui consciente que su costado, algo sobresalía.

Mi padre lo apunta.

Harry, un arma. Mi padre apuntando a Harry, su hijastro  con un arma

¿Qué hacía él con un arma?

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