Capitulo 20

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20

Narrado Por Harry

Cuando abro mis ojos, mi corazón da un tirón y mi cuerpo se sacudió con fuerza en un rápido movimiento, mi cuerpo se oprime y ya estoy en el suelo. Me golpee la cabeza contra la mesa de luz. Me incorporo tomándome la cabeza y maldigo. Un par de zapatos lustrados, negros y brillosos estaban frente  a mí y, cuando levanto la vista, ahí está Brandon. Él me tiro de la cama.

-¡¿Qué demonios te sucede estúpido?!- le grité poniéndome de pie-

Me incorporaba apoyado de la cama y me levanto, apretando mis puños conteniéndome.

Brandon siempre lograba desbordarme.

-¿Qué haces en la cama con Britanny?-él apretaba sus amarillentos dientes-

¿Era eso?

¿Desde cuándo se preocupa por ella?

-Dormía con ella. ¿Qué tiene de malo eso?-le respondo intentando no sonar lo muy enojado que estaba-

-Ya has jugado con ella y no lo niegues, sé que te has divertido.  ¡¿Puedes de una maldita vez llevarla a la puta mansión?! –Pregunta su voz amenazante entre dientes-

-No, de hecho, renuncié a hacer esto  -tomo aire- Amo a Britanny y esto ya no me interesa.

-¡¿En que estabas pensando mocoso?!-me riñe-

Veo a Britanny con los ojos bien abiertos por el rabillo del ojo pero ni eso podría detenerme

-¡Creo que será lo mejor!-grité-

Odiaba que me griten. Odiaban que me den órdenes y aun así, todo este tiempo el puesto se me ha puesto demasiado fácil.

-Hemos hablado tanto, tantas veces te dije que, no juegues, solo trabaja. Hazlo con otras chicas ¡Por algo te decía esas cosas! ¿No crees? –grito más fuerza, su redondo rostro estaba rojo como un tomate. Siempre se ponía así a cada enfrentamiento- ¡Te lo dije porque sabía que algún día te podría pasar esto!- la señala a Britanny-

El gesto me saca de las casillas. El rostro de Britanny: confusión y dolor reflejado fuertemente en sus ojos mieles.

-¡No la metas más en esto!

Me contenía. Enserio me contenía.

-¡Maldita sea Harry! -se acerca con la mirada oscura. ¿Cuándo entenderá que a mí no me intimida?- Tienes un trabajo impecable, eres difícil de remplazar a igual que a ella-apretaba sus dientes- Ella me da ventajas que otras pendejas no me podrían dar.

Aprieto mis dientes y puños. Tengo que contenerme por ella. Por ella me contengo.

-No la trates como si fuese una de esas

-Vamos Harry –esa maldita mierda,  emboza una sonrisa asquerosa- Lo será y ambos lo sabemos

Eso fue todo.

Lo golpeo con fuerza, en su mandíbula con mi derecha.

Aunque amaba la sensación de golpearlo, sabía que no debí hacerlo cuando la oí a Britanny chillar con temor aunque él se lo merecía. El no debió haber abierto su boca.

Brandon se tambalea y se sostiene la mandíbula con una mano y luego, sin sorpresa alguna, me apunta.

Miro el centro del arma, donde saldría la bala en mi rostro y frunzo el ceño irritado. Brandon siempre soluciona todo con un balazo.

Cuando muevo a la vista, con mis pies firmes y decididos, veo a Britanny pálida, aún más de lo normal. Blanca como la nieve. Aún cercanos a primavera.

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