Solo Tuya

Capitulo 16

16
La semana se me hacía interminable. 
Llega el viernes y yo sigo padeciendo de fiebre y por lo tanto, animo decaído.
La gripe llego a mí la semana pasada cuando la lluvia seso en mí. Me sentía mal y ni me preocupe por cambiarme ni bañarme sin mencionar secarme del tal mal estado de ánimo en el que me encontraba. Mal hecho, ahora sufro las consecuencias.
Me encuentro acostada en el sillón tapada con una frazada junto a una caja de pañuelitos descartables. La verdad era que, yo no sabía si tenía fiebre o estaba deprimida.
-Hija iré a trabajar ¿Estarás bien? -me pregunta al colocarse su cartera-
-Si -respondo sin mirarla mientras cambiaba sin más y con mi brazo decaído, los canales de la tele-
- ¿Porque no llamas a Luci e Liza? Tal vez, te sientas mejor
-Tal vez lo haga –le respondo con tono ronco y me recuesto cerrando levemente mis ojos enardecidos -
-Tal vez te sientas de mejor ánimo con ellas, tal vez te saquen de la cabeza a ese chico -dice burlona y yo entre abro los ojos- Sigo enojada contigo. 
-¿Porque es mi hermanastro?-pregunto, y ella suspira-
-Eso es lo de menos de hecho, de eso debería preocuparse tu estúpido padre o la madre de ese Tal Harry –una pausa- Solo intenta aléjate de él ¿Si? Inténtalo 
Coloco una mano en mi frente que ardía por tanta fiebre y resoplo, cansada de sus palabras
-No he hablado con él en toda la semana... Aún sigo sin entenderlo, ¿Porque me dijo o mejor dicho aconsejó que me aleje de él si él mismo se acercó a mí?
-Solo quiso jugar con tus sentimientos de mi niña -responde a mis preguntas-
Mi mano cayó vencida de mi cabeza al suelo y ella se acerca a mí.
-El también lloró cuando se despedía -ella beso mi frente-
En realidad no lloró pero, pude ver sus ojos. Pude ver sus emociones.
O tal vez era solo mis ilusiones.
-Le dio pena cariño –acaricia mi pelo con suavidad, corriendo los mechones de mi cara- Cuídate ¿Si? 
-Si-digo mirando hacia un costado-
-Te dejo el número de la oficina en mesa por si acaso
-Okey, hasta luego mamá
-Hasta luego hija 
De ese modo desaparece de casa rumbo a esa fría y aislada oficina en la cual trabaja.
Me volteo, mirando hacia el respaldo del sillón y cierro mis ojos levemente.
Un ruido fastidioso me despierta de dolorosos recuerdos rodeados de franjas rojas en los recuerdos de mis resientes sueños. Mi frente transpira aún más de lo que ya estaba transpirando antes al padecer de fiebre y mis manos temblaban. Ese sensación de gritar, de explicar las sensaciones y tus sueños pero, no tienes a nadie y de pronto, las imágenes se van evaporando hasta que solo puedes retener solo dos y ya luego, nada quedándote con las horribles sensaciones inexplicables.
Palmeo llena de estrés y temor a mi costado hasta encontrar mi celular.
Veo la pantalla
<<Hazza>>
Decía la pantalla con la imagen nuestra besándonos en mi cama. Hago una mueca de dolor y asco. Mi estómago se revuelve. El jamás fue consciente que estaba con mi celular y toque de memoria para sacarnos una foto. El jamás lo haría, él jamás se percató de ello y yo, me doy lastima y repugnancia. 
Rechazo la llamada.
Toda esta semana se ha intentado contactarme estúpidamente, creyendo que yo le contestaría o devolvería sus malditas llamadas. Esa es una de las cosas que no comprendía ni encajaba en mi cabeza. Se supone que yo debería alejarme de él, pero yo no era la que lo llamaba. Yo no lo estaba buscando más.
La cabeza me dolía un poco menos, la siesta me hizo sentir mejor de alguna manera y de eso me doy cuenta cuando salgo de mi ducha. 
Busco el número de Luci agendado en mi celular y la llamo para invitarla a casa.
El pitido de espera sonaba y sonaba... Cierro mis ojos en su espera, acostada en mi cama.
De pronto el pitido para y su risa dulce inunda la línea. Ella reía animadamente.
-¿Hola? -pero su risas aún se escuchaba-
-Hola Lucita-le digo, y siento otra vez el sueño mientras froto mi rostro contra las sabanas-
-¿Britanny? -pregunta, y siento su sonrisa desde el otro lado del teléfono-
-¡Britanny!-gritó Liam desde el fondo-
-Con Liam ¿Eh? –Reí levemente, con pereza-
-Sí, así es -responde su voz tímida entonces, me sorprendo al saber que se puso en vergüenza-
¿Ella enserio está saliendo con Liam? 
-¡Ponla en alta voz!-pide Liam desde el fondo-
-¿Puedo? -me pregunta ella-
-Si- respondo quebrada ante el propio cansancio de fiebre-
…
-Listo -dice ella-
-¡Britanny! ¿Cómo estas pequeñita? -preguntó Liam-
-Mejor, ¡Pero deja de gritar Li! -pido en un quejido con una mano sobre la cabeza- Aún me duele la cabeza
-Perdona –lo oigo apenado-
-¿Que ocurre Britanny? -pregunta Luci-
-En realidad nada, solo quería llamar para invitarte a ti e Liza a casa pero no contaba con visitas –reí con mis labios cerrados- 
-¡Ve Luci! -anima Liam- Podemos acomodar nuestros días y vernos de nuevo
-¿Seguro? 
-Claro, ve -dice con toda tranquilidad-
-Le avisaré a Liza e iremos ambas juntas ¿Quieres que vayamos ahora? 
-Si pueden… 
-Estoy en camino, cuídate por solo 45 minutos ¿Si? -me pide su cálida voz como el de una madre-
-Claro 
-Tú recuéstate y duerme mientras tanto -me aconsejo Liam al igual que Luci, con cariño-
-Claro Li, muchos besos chicos los amo 
-Y yo a ti - dicen al unísono-
Y con eso, finalizo la llamada
Me pongo de costado nuevamente, esta vez mirando hacia el piso y levemente, mis parpados pesan, hasta que se cierran finalmente.
Veo mis pies atados en las puntas de la cama. Mis piernas estaban abiertas. La imagen se me hace conocida.
Entonces, oscuridad. Oscuridad y líquido en mi garganta. Cuando vuelve la luz, veo sangre cayendo de mis labios como si estuviera vomitando la misma. Niall estaba encima de mí y reía en mi oído y yo grito
Salto del sillón, la risa traspasa del sueño a la vida real. Sacudía mis manos, con gritos exasperas, mis piernas y luego pasaba mis manos por mi pelo con nerviosismo reflejado. Cubro mi rostro con mis manos y lloro en ellas sin saber que más hacer.
Los recuerdos jamás me han dejado de atormentar.
El timbre suena y doy por hecho, son las chicas.
Me levanto del sillón poniéndome de pie. Siento un gran tirón en la cien impactando, mareándome por completo, al hacerlo y mi visita se nubla entonces, me sostengo del sillón
Siempre fui de presión baja.
Hago pasar a ambas. Ellas entran sonrientes hasta que llegan al sillón donde estuve todos estos días y se sientan. Ambas arrugan la nariz.
-¿Qué ocurre? 
-Hay mucha...uhm humedad aquí –dice Luci-
-¿No te has ido a bañar? -pregunta Liza-
Me encojo de hombros
-Estuve enferma por si no lo recordabas y no me preguntes cosas tan estúpidas como esas en este momento -me defendí aunque ellas tenían razón-
Soy una sucia pero a la misma vez, estaba tan deprimida que apenas podía levantarme para ir al baño.
Mi celular suena, del cual se encontraba justo a él lado de Luci logrando sobresaltarla cuando suena abruptamente en el silencio de la sala.
-Pásamelo Luci, por favor-le extiendo mi mano-
Ella me lo entrega y veo en la pantalla el nombre de Zayn entonces, contesto
-Hola Zayn –sueno cálida, por suerte, no reflejo ningún rastro de dolor u enfermedad
-Hola muñeca, quería saber a qué hora tendría que pasar por ti.
¡Maldita sea! ¡Me había olvidado!
Hoy prometí que saldría con él desde hace cuatro días me lo había preguntado. Mierda.
No podía cancelarle. No ahora, no justo en el mismo día.
Miro a las chicas con cara de pánico y ellas se miran entre sí sin comprenderlo. Ellas me hacen señas dando a entender que no logran entender lo que sucede.
-Te seré sincera –trago saliva- me olvide por completo que hoy pasarías por mí con todo esto que me anda pasando -admití y escuche proveer un 
“Ujum” del otro lado de la línea- ¿A las 23:00 está bien?
-Perfecto –responde- ¿Algún lugar en particular?
-Mmm... -pienso- creo que si -embocé una leve sonrisa-
-Bien, estaré allí a esa hora, hasta entonces -me saludo-
-Nos vemos, Zayn
Y ambos dimos por finalizar su llamada.
-¿Quién es ese tipo? -pregunta Liza-
-Solo es un amigo
-Es lo que les conviene a ambos -se cruza de brazos con sus ojos entre abiertos-
Me río levemente ante sus celos estúpidos
-Si es tan lindo como dice su nombre, perdóname bebe pero tendrás que compartir -me dice Liza-
Abro mi boca en una “O” y ella se encoje de hombros
-¿A qué hora venía por ti?
-A las 23:00 hs.
-Britanny, ¡Son las 22:30! –Luci entra en pánico antes que yo lo haga-
-Sí, mierda, lo sé ¿Me ayudan? –suena a suplica-
-¿En qué? -pregunta Liza-
-Necesito que alguien le diga a mi mamá que hoy me quedo a dormir en alguna de la casa de ustedes mientras yo busco que ponerme ¿Pueden? 
No hacía falta que me bañe de nuevo. Estaba limpia y no transpiré.
-¡Yo le miento a tu madre! Luci no podría -se ofrece Liza con un brillo en sus ojos-
-Entonces yo te ayudo con lo demás
Luci y yo subimos las escaleras y ella me ayudó a buscar algo en que ponerme. Al final, ambas nos decidimos por un pantalón negro y una musculosa roja con unas topper negras de flanjas rojas
Ella, me ayudó a maquillarme: delineador negro, rimen, labial y mi mascara de pestañas
Bajaba de la escalera ya con mi celular en bolsillo como también dinero en los bolsillos delanteros y documento en el otro bolsillo de adelante. Ahí estaba Zayn junto a Liza. Esa chica sin duda, lo habrá incomodado al ver su rostro rojo e incomodidad en sus ojos como también alivio al verme. 
-¡Zayn! -el me abrasó-
-Ey, ¿Cómo te va? 
-Perfecto -digo con una mueca, era evidente que estaba mintiendo- ¿Vamos? 
Subimos a su coche y apoyé mi cartera en mis piernas respirando hondo para absorber el aire que el viento me daba por la ventanilla. La ducha me hizo sentir mejor... mucho mejor sin duda alguna.
-¿A dónde vamos? -me volteo viéndolo fijo a sus ojos, le sonrió y le doy la tarjeta donde indicaba la dirección de la cual, quito de mi bolsillo también- ¿Aquí? ¿Está segura?
-Si
El auto se detuvo. Zayn bajó primero para rodear el auto y abrirme la puerta tratando de ser educado conmigo. Me extendió la mano sonriente de lo cual yo le correspondí con calidez tomando de ella. Me jalo levemente de ella mientras me incorporaba fuera del auto y cerró la puerta. 
Por sorpresa, me rodea por la cintura con su brazo derecho y presionó el botón del seguro con misma mano pero yo, no soy capaz de decir nada al respecto.
Compramos y dimos nuestros pases a los hombres de seguridad en la entrada.
-Lindo-susurré y lo miré con una amplia sonrisa-
-Muy bueno-me devolvió la sonrisa-
Ingresamos al lugar, la luz de intensidad baja; todo el lugar estaba repleto reflectores con diferentes y variados efectos de luces de todo tipo de color. El piso oscuro como las paredes solo que estas variaban el color entre el negro y el blanco. Todo era humo, luces de variados colores, música, cristal y sobre todo, bebidas.
-¿Alguna vez viniste a este lugar?-
-No -frunció el ceño- Nunca salgo a bailar
-Yo... Pocas veces, quería conocer este lugar -me encojo de hombros- En realidad, quería probar algo sumamente diferente a todo lo que fue en estos días –sonrió-
Zayn reí entre sus labios y me niega con la cabeza.
-De vez en cuando hay que cambiar de clima ¿Eh? –Asiento- ¿Bailas? 
-Claro -me ruborizo-
Toma mis manos, divertidos y me lleva a la pista.
Nos reímos, nos divertimos con nuestros pasos tan comunes y corrientes. Moviendo las caderas de un lado y luego de otro al ritmo en el que movía mis pies. Tomando mi mano para girarme, con los pies de un lado a otro y luego de adelante hacía atrás encajando en el paso con prolijidad.
-¿Zayn? -espeta una voz masculina y yo me separo-
El hombre estaba a nuestro lado.
-¡Bob! -él lo reconoce al rubio que sin duda, podría tratarse de un amigo de Zayn-
-¿Que hacías por aquí? -pregunta el rubio elevando su voz ante la música-
-Salí a bailar con mi amiga, Britanny -le responde del mismo modo-
-Yo estoy trabajando -señaló a una chica con su pulgar detrás de él sentada en el bar con una copa de wiski, ella era rubia y de pelo corto aparentando ser aún más joven que yo-
-¿Sales a bailar y trabajas a la misma vez? -levantó una ceja Zayn a su amigo-
-En realidad, solo la estoy siguiendo -se encogió de hombros y yo fruncí el ceño confundida-
-Discúlpenme, quisiera ir a tomar algo –me dirijo a ambos mientras elevaba mi tono de voz para que puedan oírme por encima de ellos-
Zayn me sonrió y ascendió con la cabeza en señal de aceptación.
Me retiro incomoda de aquella conversación rumbo al bar.
Sacó mi celular sentada en unos de los bancos a cinco asientos de la muchacha que señaló Bob y caigo en la cuenta que tengo 10 llamadas perdidas y 1 mensaje de Harry cuando desbloqueo la pantalla. 
"¿Qué mierda te sucede? ¡¿Estas saliendo con mi mejor amigo?!
Reconozco perfectamente que esta no sería la primera vez que intentó llamarme o mensajearme con la intención de que le responda pero, ¿Esto?
"¿Qué tiene de malo que salga con Zayn? Sabes perfectamente que no somos nada
Entonces, ¿Porque te molestas?" 
La furia se inyecta lentamente a mis venas.
El Bartender se acercó a mí secando una copa haciendo un leve asentimiento en busca de mi pedido. 
Me sonrojo evidentemente, era mi primera vez que pediría yo, a diferencia de mis demás salidas, que iba Liza.
-Un trago por favor
-¿Con o sin alcohol?
-Con alcohol
-¿Cómo lo quiere?
-¿Frutal? ¿Puede ser?-no tengo puta idea de lo que estoy diciendo- Lo lamento, no entiendo mucho de estas cosas –aprieto mis labios-
-Claro...-me responde el menudo y moreno chico-
Me resulta extraño que no haya pedido mi identificación. De todos modos, estoy agradecida por ello. Es decir, aún tengo 17 años.
Otro mensaje llega, y mientras el chico apoya el vaso de cristal en la barra, fijo mi vista en el celular
“¿Qué se supone que debo pensar sobre ti? Estas saliendo con mi mejor amigo, luego de estar saliendo conmigo. 
¿O es que no significo nada para ti?" 
Me frustro evidentemente mientras tiro de mi pelo hacía atrás, con mis mejillas infladas al resoplar bajo la estupidez y la incoherencia de sus mensajes.
"Sabes perfectamente que no somos nada.
Yo puedo salir con quien quiera Harry"
"¿Sabes qué? ¡Hazlo! Resultaste ser una más de las tantas perras con las que me revuelco”
El muchacho me deja el trago me lo tomo en seco para luego fijarme otro mensaje.
"¿Por qué no respondes?”
¿Eres tan ingenua para creer que fuiste eras la única que me cojo? 
Disfruta con Zayn lo que yo pude contigo. Igualmente, ese cuerpo ya fue mío”
Mis ojos comenzaron a pinchar. Es un idiota.
-Hijo de puta... -susurro- Si me utilizo.
¿Con quién estoy hablando?
Las lágrimas se desbordaron de mis ojos y una vez más, me encontraba llorando.
-Otra, por favor- 
Nada como ahogar las penas ¿No? Estoy cansada de llorar
Narrado Por Zayn
-Espero que consigas algo hoy también, espero que te puedan pagar y que consigas resolver tus asuntos -le deseo a Bob dando por finalizar nuestra charla-
-Eso espero, quisiera saber si habría alguna otra salida para estos casos pero no encuentro otra forma de conseguir tanto dinero en poco tiempo-me dice apenado mientras tuerce su labio- Y ya no puedo dejar esto.
-Pienso igual que tú, Bob, en serio –trago saliva- pero no se quien pagaría por las cuentas, la renta, los medicamentos y demás problemas de mi madre junto a mi hermana -digo apenado- Una vez más volvieron a amenazar ¿Sabes? Yo verdaderamente quiero que se alejen de mí, no quiero abusar de lo que sé para defenderme. No quiero dañar a nadie. 
-¿Hablas de meterles un tiro en el medio de la frente a esos hijos de putas?
-Eso mismo, no quiero lastimar a nadie por solo tener que pagar el alquiler… ¡Pero yo les pago!
-¿Entonces?
-Vuelven a fastidiar con una historia nueva -el resopla cansado de la misma historia-
-Tu solo aléjate de esos problemas, haz lo que sea necesario, o mejor dicho, correcto
-Eso intento
-No hagas como Styles –advierte-
-Estoy totalmente de acuerdo, Bob, tengo que ir a buscar a Britanny. Se fue hace rato y no la veo en la barra
-Ve por ella, tigre-reí-
-Sabes que no soy así-digo negando con la cabeza-
-Bien-ríe y bebe de su botella-Ve Zayn. Nos veremos... ¡Ah! Y por cierto –me detuvo antes de que me dé la vuelta--Es una chica muy linda -le sonrió-
-Si lo es-concuerdo-
-Mantenla alejada de toda esa mierda... Por lo que me cuentas de ella no merece todo esto... Parece ser una buena chica
-Eso intento pero se metió con Styles -el negó con la cabeza-
- Harry cambio mucho últimamente
-El... él se volvió mas... –no sé cómo terminar la frase-
-Se volvió una perra abusiva que abusa de su poder-me dice serio-
-Algo así
Lo abrasé palmeando su espalda en forma de saludo.
-Nos veremos el lunes por la tarde -me dice, cuando nos separamos-
-Así es -le sonreí por última vez- Hasta entonces
Volteo fijando mi camino hasta llegar a la barra pero ella no estaba allí
¿Se fue?
-Disculpe...-llame la atención del muchacho detrás de la barra y logro que se voltee a verme mientras limpiaba un vaso de cristal-
-¿Que le sirvo? -me pregunta con el ceño fruncido, trataba de parecer amable por su tono-
-Por ahora nada, ¿Vio a una morena de musculosa roja...?
-Creo que se de quien me habla.
-¿La vio? ¿Dónde?
-Si es esa chica es la que me ha escupido en la cara y me tiró los billetes en la cara... 
No puede ser ella
- Esa chica se fue corriendo al baño de la derecha -me señala con su pulgar al dejar el bazo-
Camine derecho y luego doble hacia la derecha en el pasillo rojo. Adelante de todo, había una puerta blanca con un muñequito de vestido con melena. Es decir, una muñequita en negro.
Abrí la puerta y pase encontrándome con varias mujeres drogadas, otras ebrias y algunas maquillándose como también, había las chicas normales que estaban utilizando el baño para lo que se debía. 
Sigo caminando de largo ignorando las miradas que me daban entre ellas directamente para mí.
Observo los pies que se ven asomados por las puertas pero al llegar a la última puerta donde se veían ambas zapatillas volteadas hacía el lado contrario, por lo que parecía, aquella chica estaba de rodillas hacia el inodoro. Acerco mi oído a la puerta y se escuchan arcadas y el líquido caer en cascadas al inodoro. No me da asco eso, estaba acostumbrado a cosas así y hasta peores.

Veo con detenimiento las zapatillas flexionadas y caigo en la cuenta de que son verdaderamente, los de Britanny. Entonces, me aparto y abro la puerta con cuidado probando suerte al arriesgarme de su seguro o no. La puerta no estaba trabada cuando la abro encantándome con ella vomitando inodoro incontroladamente. Acercándome a Britanny, tomo su pelo agachándome un poco mientras coloco una mano en su hombro.
¿Cuánto tomo?
¿O es que ella es bulímica?
Veo que en su cara su delineador corrido, la fuerza de las arcadas lograban que sus ojos lloraran una vez más.
Por fin se detiene y aunque en verdad tendría que tener asco o por lo menos arcadas por demás de ver a ella vomitar, en realidad solo sentía lastima y dolor por verla así. Curiosidad por saber que le pasó desde que la dejé sola y también preocupación por saber cómo se encuentra en este momento.
¿Sera todo este daño provocado por Harry? ¿O es una típica borrachera de adolecente?
La ayudo a levantarse y la acerco al lavamanos. Le lavé la cara y ella se hizo buches escupiendo toda el agua sucia de su boca. Se enderezo como pudo tambaleándose hacia adelante la detengo con mi manos sobre su abdomen atrayéndola hacía atrás evitando que se golpee contra el vidrio
-Vamos-le digo serio-
En verdad, estaba furioso ante su comportamiento. Molesto y preocupado a la misma vez.
Britanny gruñe, con una mano en su cabeza y solloza adolorida.
Coloqué un brazo alrededor de su cintura y el suyo en mi cuello para que se pueda sostener. Comencé a caminar con Emily, quien, tenía su cuerpo medio muerto. Pase por toda la pista y por todas esas personas que estorbaban, hasta por fin llegar a destino: Mi auto.
Cerré la puerta dejándola recostada en el asiento trasero y rodeo el auto. Me subo, presiono el botón de seguro y me coloco el cinturón de seguridad. Encendí el motor y lo saque del estacionamiento para poder comenzar a emprender mi viaje. 
Paré en el semáforo pensando en donde podría dejarla: Ella no puede ir a su casa, su madre no está allí. Britanny ya me lo ha dicho.
Me volteo y la veo. Genial, perdió su bolso o se lo robaron por lo tanto, no tiene llaves y el viaje está a cuarenta y cinco o media hora de aquí a su casa. 
El semáforo se ilumina en verde entonces, emprendo viaje nuevamente.
No puedo llevarla a casa. ¿O puedo?
No. Ella no la conoce y no tengo habitación con ella. No podría dormir en la misma cama y mi sillón es demasiado pequeño para dormir en él y estaba casi seguro que ellos volverán mañana.
Finalmente, sin ninguna otra opción, me decido por llevarla con Harry para que pueda pasar el coche allí sin problemas, sin quedar a más de veinticinco minutos de viaje.
-¿Cómo te encuentras Britanny?- le pregunto en el viaje para apagar el silencio-
Ella comenzó a reír descaradamente y su risa me contagia por algún motivo. 
-Y-yo es...estoy bien -arrastraba sus palabras- ¿Y tú como estas? -me pregunta haciendo una mueca rara mientras se sienta en su asiento-
-Yo estoy bien Britanny, gracias -respondo conteniendo una sonrisa- ¿Porque no mejor te recuestas?-le pido con algo más de seriedad-
-Bueno... si me lo pides a...así, si-me dice con una sonrisa idiota y cae rendida en su asiento trasformando en este, un nuevo silencio incomodo-
Las luces apagadas, solo podía ver una habitación iluminada a través de la cortina que tapaba el enorme ventanal a la derecha.
Golpeo la puerta con fuerza por cuarta vez. Ya mi hombro se estaba cansando y la paciencia me estaba abandonando.
La puerta se abre y veo que Harry una vez más ha vuelto a su viejo vicio que llevo a cabo desde los trece años: Fumar. Lo note demasiado serio casi furioso. Ojos vidriosos y rojos. En ellos podía ver sus venas rojas. ¿Estuvo drogándose?
Notaba el modo en el que aspiraba su cigarrillo profundamente, con sus pómulos hundiéndose cuando lo hacía. Hace tiempo no lo veía así de frustrado.
Muevo mi hombro izquierdo ya que Britanny estaba por caer hacía el piso con su cuerpo muerto y fue ahí cuando mi amigo cae en la cuenta de quién colgaba en mi hombro. 
-¿Que le hiciste?
-Querrás decir qué fue lo que se hizo -lo corrijo- ¿No?
-Maldita sea Britanny -maldice entre dientes- ¿Te pesa? -espeta serio, ladeando su cabeza hacía mi hombro-
-No 
-Déjame llevarla hasta su cuarto, tú ve hacer algo de café para ella.
-…Bien
Acomodo a Britanny para pasársela a Harry como si fuera una niña dormida. El logró acomodarla de alguna u otra forma con pequeños saltos que hacía con su cuerpo para poder acomodarla en su hombro como lo hice yo. Harry se volteó para subir las escaleras y yo fui directamente a la cocina perdiéndolos completamente de vista en la oscuridad. 
Narrado Por Britanny
Mareada. Era la única sensación clara que conseguía tener. 
Sentía que me movía como si estaría dando saltos boca abajo, siento la presión en mi panza fuertemente.
Un salto más fuerte provee de mi cuerpo colgado logrando incorporarme de donde estaba. 
¡Mierda, mi cabeza! Me doy cuenta de ello cuando el salto fuerte provee.
Abro los ojos de mi rostro retorcido por el dolor. Veo todo oscuro pero no lo suficiente, puedo distinguir algo, ¿Una pierna es eso? palmeo lo que está a mi lado
¿Una espalda?
-Veo que te despertaste-me dice una voz ronca masculina-
Yo conozco esa voz.
¿Harry? ¡¿Cómo llegue con él?!
-¿Harry? 
-El mismo –responde, noto su seriedad hasta inclusive furia en su voz seca-
-¿Porque me cargas? -pregunto removiéndome-
-Zayn te trajo
-¿Zayn?
-Si-responde seco-
Pero… ¿Por qué?
Imágenes pasan por mi memoria.
Zayn y yo bailando; El amigo de Zayn; mensajes…. Mensajes de Harry; alcohol; el baño.
Entonces, comprendo y el rencor aparece nuevamente.
Deje de dar saltitos, ahora el caminaba, no sé hacía adonde nos estamos dirigiendo pero el caminaba como si estaría seguro de ello.
Paró de caminar y se oye el ruido de la puerta abrirse. Harry entra a una habitación y por momento me asusto cuando veo el marco rosar mi rostro.
Caigo en una cama. 
Harry se alejó de mí y escucho sus pasos a metros de distancia.
De pronto, la luz se hizo presente.
-Mierda -me quejo y cierro los ojos con fuerza tapándome con mi antebrazo ante la ceguedad de la luz-
-Es increíble que te hayas emborrachado -me regaña como si fuese mi padre-
-¿Que tiene eso de malo?
-Tienes 17, aun no tienes 18, eres pequeña.
¿Es idiota?
-¿Porque no solo cierras tu maldita boca?-
-¿Zayn te dio las copas no?
-¿Qué? ¡Zayn no! ¿Qué mierdas dices? Él se distrajo por un segundo y fui a tomar algo y me emocione con la bebida ¿Okey?
-Sabes que estoy furiosa contigo, ¿No? 
Rio burlona
-¿Crees que yo no? -rio nuevamente como si estuviera nerviosa y me siento- Me dijiste que me aleje, que no te hable después de que estuve contigo esa noche después de todo, después de que me has comenzado a gustarme -le escupo-
El alcohol a veces tendía a tomar coraje de mi parte y yo no me quiebro por decirle eso.
-No sabes de lo que hablas -dice entre dientes-
-Te apostaría a que sí
-¡Entonces, deja de hacerlo maldita sea! - me grita, las venas inflamadas en su cuello-
-No puedo, sabes que no. Trate de alejarme, salgo con Zayn y me sales con esto –grito frustrada, tomándome por mi cabeza- ¿Qué quieres de mí? ¡¿Por qué haces esto?!
El paso sus dedos por dentro de sus rulos exasperado, no sabía que responderme, se lo veía desesperado, parecía que él tenía la respuesta en sus adentros pero por alguna razón, no me la decía.
-¡Maldita sea, Harry dime!
El caminaba de un lado a otro, me miro. Muerde el centro de su labio con fuerza, con nerviosismo y furia comiéndose sus palabras.
Me dolía la cabeza y su silencio e idas y vueltas solo sumaba más dolor en ella. Ya no me importa si le grito, me está exasperando.
-¡Dilo! -le grito desesperada- ¡Quiero una maldita respuesta!
De pronto él se acercó amenazante a mí y me inclino hacía atrás, instantáneamente con temor. ¿Dónde quedó el coraje cuando él me miro con sus ojos oscuros, sus puños apretados al igual que su mandíbula y se acercó a mí de ese modo? ¿Dónde?
Se sentó frente a mí de rodillas y me tiro hacia atrás con fuerza. Se incorpora rápidamente y me sujeta los brazos con una de sus grandes manos y me mira serio.
Me siento indefensa a pesar del hecho que yo puedo defenderme de él, no lo hago. Me quedo petrificada, esperando. Solo espero helada bajo su mirada.
¿Qué le sucede?
-Solo te protejo, Britanny. Porque eres mía -me responde finalmente ceñudo y atrapa mis labios con los suyos invadiéndome con su lengua áspera por el interior. 
Jadeo, completamente atónita y mis ojos están abiertos completamente a diferencias de los suyos. Cerrados con fuerza.
Comenzó a mover su lengua al compás de sus labios despacio, sin apuro, suave y tierno a la vez. No respondí al principio ya que me tomo por sorpresa, pero luego cerré levemente mis ojos enterrando mis dedos en su pelo, me entrego a su beso. Me entrego a él (nuevamente)
No era consciente que ya tenía mis manos sueltas hasta que él paso su mano a mi nuca sosteniéndose con el mismo antebrazo y con el otro me tomo por la cintura presionándome a él. Me beso castañamente sobre los labios, deslizo su labio hacia arriba atrapándolo, dejándome en el un leve mordisco para luego unirse nuevamente encajado perfectamente uno con el otro. Separo solo un poco nuestros labios y sigo sintiendo el tacto de su piel carnosa rosando con la mía al hacerlo y, arrimando su lengua, separé mis labios nuevamente dejando que el la introduzca nuevamente en el sitio en el habitualmente sitúa. Se convierte en un beso lleno y puro a su justa medida, a la medida en la que Harry puede demostrarse puro.
La puerta se abre
Me separo con rapidez, mis ojos bien abiertos al ver a Zayn que entrando con una bandeja. Él apretó su mandíbula y Harry se separó de mí ayudándome a sentarme en la cama extendiéndome su mano ya sentado de rodilla frente a mí.
Zayn se sienta a mi lado, con seriedad reflejada. El ambiente era demasiado tenso y yo estaba más que avergonzada, por algún motivo.
¿Qué estará pensando sobre mí? Me siento sucia. En todo aspecto.
Zayn me da un vaso de agua junto a una pastilla extendida en la palma de su mano.
-Es para tu dolor de cabeza -explica serio, sin sacar de la vista de Harry- Pero parece que se te fue
-Te equivocas -susurro cabizbajo mientras meto la pastilla en mi boca dando un trago del agua para bajarla-
-Toma, te hice café –me da una taza roja y yo la acepto-
Agradezco intimidada bajo las miradas que se clavaban el uno al otro y luego ambos a mí a su mismo tiempo.
Tome rápido mi café, al menos hasta la mitad.
-Zayn... -lo llamo delicadamente. Él se volteó mirándome más relajado que antes- Gracias -le di mi café a medias tomado-
-Te falta la otra mitad, muñeca -me dice y Harry arregla su garganta-
-No gracias -le digo frotando mi ante brazo incomoda-
-Lo mejor sería que te vayas a dar una ducha -me aconseja Zayn pero niego con la cabeza-
Sé lo que querían. Querían estar a solas para pelearse entre sí pero yo no podía hacerlo.
-Ve Britanny-me pide Harry apretando su mandíbula-
-Con permiso, muchas gracias Zayn-no soy capaz de discutir con Harry pero mucho menos con la expresión de su rostro-
Me voltee para ir al baño dejándolos a ambos solos con sus asuntos. No quiero hacerlo. 
Cierro la puerta lentamente algo inseguro. Ambos esperan hasta que la cierre y finalmente se miran uno al otro antes de que la imagen se haga solo una pequeña línea negra.
Me apoyo en la puerta cuando cierro la puerta inmediatamente.
-No me expliques nada Hazza, yo ya sé tus intenciones pero creo que se te está pasando la mano ¿No crees? -oigo que le dice la voz profunda de Zayn-
¿Intenciones?
-¡¿De qué hablas?! -le grita Harry en respuesta, enojado casi imposible de no oírlo-
-¡No finjas ser un idiota, Harry! ¡Por dios! Desde que te dieron esta misión, tú mismo pediste permiso para divertirte con ella y luego completarla pero ya la estas ilusionando y de mas, ¡Ella no merece esto y lo sabes! -mi corazón se medió quiebra al escuchar lo que dice-
¿Misión?
-No me llames así -riñe apretando la mandíbula y supongo que lo dice por el “Idiota”-
-¿No tienes nada más que decir? –Inclusive yo estaba esperando algo más que solo eso-
-No sé si quiero completar esta misión Zayn -se oye la voz de Harry en respuesta, firme-
-¿De qué hablas?-preguntó Zayn su tono sorprendido-
-Ya no me importa que tanto dinero me den pero no quiero, no puedo hacer esto ya, yo no le puedo hacer esto a Britanny –mi corazón late con prisa al oír mi nombre-
Pero no logro comprender nada. ¿Que no puede hacerme? ¿Estoy oyendo bien?
-Harry -Dice Zayn como si no supiese que más decir. Suspira- Yo tampoco podría -no se oye más nada-
-¿A qué te refieres? -sonaba amenazante-
-Creo que estamos enredados en un mismo juego -le dice Zayn en risas-
-¿Te gusta? -suena enojado-
¿Quién? ¿Yo gustarle a Zayn? ¡¿Qué?!
-Uhm... N...no bueno, si-sonaba como si esta situación le causará gracia e incomodidad al mismo tiempo-
-Maldita sea Zayn –nuevamente, Harry y lo oigo resoplar con fuerza- Tantas chicas, tantas misiones, ¡¿Tuviste que meterte en la mía?! 
¿Harry, celoso?
-No te enojes, yo podría decir lo mismo de ti 
-Britanny nos escuchará –la voz de Harry es más baja pero no lo suficiente. Puedo oír bien y tapo mi boca con la mano-
¿Hice algún ruido para que él diga eso?
-Tienes razón -le responde Zayn- ¿Qué piensas hacer?
-No lo sé –un Harry desconcertado- ¿Y tú?
-Creo que podré ser su amigo, pero, escúchame una maldita cosa -dijo levantando su tono de voz a uno amenazador-
-Dime-le responde Harry con calma-
-Le llegas hacer algo, Le fallas o no estas para ella cuando te necesite en verdad, Ten en claro una cosa Harry -suspira- Yo siempre estaré para ella. Así que no le hagas daño
-No tengo eso en mente -responde con toda sinceridad y seriedad del mundo-Así que supongo que, tendrás que olvidarte de ella. Creo que me dejaré llevar, Ya sabes, Hice lo que me aconsejaste, Intente alejarme de ella pero las ansias volvieron
¿Él se lo aconsejo? 
¿De qué ansias habla?
-El cigarrillo -responde como si eso fuese una respuesta a mi pregunta-
Ahora sé que no fue mi imaginación el sabor del tabaco en sus labios.
-Sí, si –refunfuña- Me dejaré llevar a ver hasta dónde llega esto -retoma el tema anterior- Si me arrepiento la entregaré sin rencores a Brandon.
¿Qué?
-El no estará para nada contento con tu decisión dalo por echo Harry-suena frustrado su amigo-
-No, pero aún no se lo diré
-Eres su as bajo la manga, por eso te ascendió y no creo que...-deja las palabras en el aire- Con su hija… queda en puntos suspensivos con intriga a finalizar su frase- Estas enfermo
-Lo se Zayn, Lo sé
-Piénsalo, Harry -Zayn chasquea su lengua- Tengo que llevar a mi mamá al médico mañana, y también visitaremos a Waliyha de la clínica.
-Ve Zayn, les deseo lo mejor, Espero que todo mejore, amigo -escuche como palmeo su hombro-
-Gracias -responde Zayn cálidamente-
Estoy perdida.
Escucho la puerta de mi habitación cerrarse y entro en pánico, sabiendo que Harry volverá y yo aún no estoy en la ducha. Me volteo, con la intención de cambiarme rápido para meterme a la ducha pero la puerta del baño se abre en un intento fallido de poder disimular lo que estaba haciendo anteriormente.
-Creí que te estarías bañando
-Pensé que se pedía permiso antes de entrar a un baño -intento de escapar de esto-
-¿Crees que entre sin darme cuenta de que en realidad estarías desnuda?-arqueó una ceja-
No sabía que responder a eso, Solo me encojo de hombros.
-Ven, te quiero ayudar con ello –ladea su cabeza invitándome con toda frescura-
No respondo, pero él ya se deshacía de mis prendas.
El agua tibia, el jabón y enjuague hace su fusión junto a nuestros cuerpos y cabellos.
Me baño con timidez, el me ayuda a saciarme de mi suciedad y recién caigo en la cuenta de mi vomito. Yo lo bese. 
Qué asco. Mi rostro se retuerce y lo veo a él, frente a mí, con su brazo a un lado de mi rostro, mirando hacia abajo a su esponja lavando mi estómago y luego levanta la vista. Su sonrisa desaparece.
-¿Qué? 
-Me besaste con…uhm… yo vomité 
EL me queda mirando sin ninguna emoción reflejada en sus ojos o gesto. Se encoje de hombros.
-¿Y? –Alzo mis cejas-
Esto es un asco.
-Vomité y tú me besaste sin haberme cepillado los dientes.
-Britanny, eh saboreado la sangre de personas en mis labios y muchas más cosas. ¿Crees que podría asquearme eso?
Palidezco.
-Y podría besarte una y otra vez probando mi punto –sonríe-
Unos de sus risos este colgando en su frente envuelto en agua.
El rizo se mueve y cuando vuelvo a mirar a Harry solo siento sus labios estrechando los míos y su lengua vuelve a su sitio mientras la esponja se desliza de arriba hacia abajo en mi espalda y su cuerpo se acomoda en el mío como si fuera un molde. 
Los escalofríos al sentir toda su piel desnuda de este modo me recorre y me sacudo en él. Ríe en mis labios y termina aprisionándome contra la fría ceramica del muro.