Solo Tuya

Capitulo 15

15 

Fui al baño y me bañe para luego, ponerme ropa limpia y puse el resto a lavar. Luego, coloque la demás ropa que había en las habitaciones. Limpie el living y en especial la pieza de mi mamá ventilándola, barriendo, pasándole un trapo húmedo y limpio al piso de blancas baldosas, cambiando y lavando las sabanas y por ultimo perfumándolas.

La semana ya pasó y las horas en el colegio se me hacían cortas quedando con mis amigos pero al llegar a casa las horas se me hacían eternas y no era al no salir, al contrario, me llamaban invitándome pero rechazaba esperando algo de Harry, una llamada, un mensaje…

Pero nada sucedía y era otra salida desperdiciada. Todas las tardes sentada en el sillón con mí celular a mi lado y en las noches mirando a la pantalla esperando, solo esperando: una visita, una llamada o un insignificante mensaje de él pero nada de lo que esperaba llegaba.

Nada de lo que espere llego y varias noches dormí esperando, quedándome dormida con el teléfono y celular en mano con alguna que otra lagrima derramada por Harry.

Lloraba por la obsesión que me estaba logrando sacar por é. Lloraba por inseguridad. Lloraba por muchos motivos y hasta a veces, no entendía porqué lloraba  pero aun así, lo hacía.

 Me dolía esperarlo y no quería llamarlo ni mensajearlo no quiero que piense que estoy loca por él aunque a decir la verdad él me estaba consumiendo poco a poco. Mi madre y mis amigos me lo hacen ver hasta e inclusive Zayn quien, me ha estado llamando e insistiendo para que le cuente que me sucedía. Él y mi madre son los únicos que saben más de la cuenta. Mis amigos no me han sumado mucha importancia.

"¿Quieres que hable con él?"

"No Zayn, gracias"  -le respondí en el mensaje-

Lo envié y al segundo, entra una llamada de un número desconocido amenazando con el humanito anónimo y salto de alegría en el sillón pensando en que,  tal vez, es él.

¿A quién engaño? ¡Debe de ser Harry!

-¡Hola! -no logro ocultar mi emoción al contestar la llamada-

Mis manos tiemblan y mis rodillas de las cuales me sostienen sentada. También lo hacen.

-¿Porque la emoción? –la voz seria y secante casi burlona pregunta en tono tan familiar-

Me quedo en un profundo silencio en shock por un segundo y ahora son mis labios quien tiembla. Mis manos sudan, los nervios y pánico me apuñalan y el nudo ata mi garganta.

Otra vez no, no él. 

Una vez más, él, Niall se hizo presente en mi vida en el momento menos esperado.

¿Por qué no solo me deja? Ya me ha conseguido, me ha hecho atormentar noche y día. Eh estado en tratamientos y de hecho, mi madre me ha sacado de allí pensando que solo me estaba empeorando pero no, en realidad era un progreso, era parte de la terapia y… nunca fui capaz de decirlo porque, yo en el fondo no quería seguir lleno.

-Responde -mascuja

-Niall-susurré apenas, mi barbilla no mantiene un lugar fijo-

-El mismo, princesa

Me llamo así recordando los viejos tiempo: Cuando estábamos juntos, y yo lo apodaba Nialler. Mi Nialler.

Ahora no es más que una mierda que desprecio y deseo con todo mí ser, que muera.

-¿Cómo encontraste mi numero nuevo? -pregunté aterrada, devorando de pánico y temor-