12
Me acosté temprano esa noche, aunque dormí tarde, no podía dejar de pensar en Harry.
¿Porque es tan raro a veces?
¿Por qué estoy pensando en él?
¿Por qué sus imágenes, sus recuerdos no dejan de atormentarme? Aún más su rostro, sus expresiones y a su… amiga, arriba de él. El recuerdo me provoca escalofríos e intriga por motivos aun desconocidos.
-¡Despierta Britanny! –alarmada, me siento agitada como si me hubiera asustado. Mi madre desde la puerta, me gritaba que me levante - Ya son las 6:45, apúrate, llegaras tarde a la escuela
-Sí, lo sé-respondí somnolienta-
-Te voy a dejar el desayuno en la mesa Britanny, me iré al trabajo
-Si mamá... Hasta luego –levanto mi mano perezosamente mientras la agito en el aire saludándola sin siquiera verla-
-Hasta luego hija, cuídate, te quiero
-Uhm –estoy de acuerdo, mientras me estiro mis músculos acostada, con mi rostro hundido en la almohada-
Sentí sus pasos disminuyendo en su eco en el pasillo.
Estiré mi mano con la intención de agarrar mi celular para poder mandar un mensaje a Luci con la intención de que me acompañe pero no lo encuentro. Maldición, no lo encuentro. Tal vez, se ha caído de la cama entonces, me hago de valor para ponerme de cabeza en el borde de la cama fijando debajo de ella intentando encontrarlo pero no estaba en el piso. ¿Dónde lo deje?
Entonces lo recordé. Que idiota. Cierro mis ojos levemente y golpeo mi frente con la palma de mi mano al recordar que lo eh olvidado en la casa de Brandon.
Me senté sobre mi cama y reinicié con mi rutina de la semana antes de ir al colegio: Cepillarme los dientes y el pelo, desordenarlo un poco, cambiarme (esta vez, vistiendo mi mejor jeans, mi musculosa de color gris con pequeños botones por la zona del escote y mis zapatillas favoritas deportivas) Me delinee de negro en la zona del parpado y ya estaba lista.
Bajé las escaleras, tomé mi té con tres galletitas y luego subí por última vez para tomar mi mochila. La cuelgo en solo un hombro y me marcho de casa rumbo a la escuela.
Las horas pasaban lento, muy lento para mi gusto sin mi celular. No podía fijar la hora, no podía jugar a algún juego o inclusive, no podía escuchar música que era para mí, lo más preciado.
Tocó el timbre marcando, según el celular de Liza, las 9:30.
Pasamos el recreo sentadas riéndonos de puras estupideces que compartíamos juntas. Pero yo estaba perdida, mis risas en realidad, parecían falsas. No me sentí yo misma. No me sentía tan activa como siempre, me sentía… diferente, como si estuviera dormida pero a la misma vez, no. No sentía mi cabeza en orden, no me sentí centrada.
Una vez más toca el timbre avisando la hora de Prácticas de Lenguajes con mi querido profesor Louis.
El entró tan fresco como siempre, su pelo un poco, apenas desordenado. Su sonrisa serena al igual que siempre. Tomlinson, vestía unos pantalones de jean sueltos, color oscuro y una camisa encima. Sus zapatos nunca llamaban la atención.
El colocó sus cosas en la mesa delante de la mía
-Buenos días Britanny- saluda con su tono de voz bajo por encima del ruido de los demás alumnos.

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Solo Tuya
RomantikaMe atrapaste, aún sin saber cómo, lo has hecho y lo conseguiste de una manera tan rápida que apenas puedo creer que estoy en tus brazos. Ahora, no me sueltes y sostenlos de todo esto para que podamos prevalecer juntos. Si deseas ayudarme en los pre...