Estaba esperando el autobús que me llevaría a casa. Me senté en aquella banca, al parecer tardaría. Sentí como mi teléfono vibraba. Lo saqué, era una llamada. Número desconocido.
—¿Bueno? —contesté.
—¿Hablo con la señorita (tn)? —preguntó aquella voz femenina.
—Eh, sí... ¿Quién habla? —pregunté extrañada. Aclaró su garganta.
—Hablo del hospital Los Ángeles, el joven Harold Styles acaba de sufrir un accidente... —mi mente se fue. ¿Un accidente? Pero hace unas horas estaba conmigo...
Harry Styles.
—Así es joven, ya le he avisado a la señorita (tn). En cuanto llegue, yo le aviso. —me dijo con una amplia sonrisa.
—Muchas gracias. Por cierto, ¿Cómo te llamas? —pregunté.
—Esperanza.
(tn)
Abrí la puerta de la habitación. Se encontraba una enfermera con Harry. Él estaba dormido, tenía un brazo enyesado.
—Shh... está descansando. Los golpes fueron leves, bueno, a excepción del brazo. Soy Esperanza. —dijo estirando su mano. Mi seño se arrugó y la miré. Sonreí a medias.
—Gracias. —dije en voz baja. —Soy (tn) Hurt, un placer. —estiré mi mano para entrelazarla con la suya.
—Te dejo con él. Cuídalo y apapachalo mucho, tu novio te necesita. —dijo soltando una pequeña risita y salió de la habitación.
—Pero no soy su... novia—dije alzando la voz.
—Porqué aún no te lo pido. —dijo aquella voz ronca, se echó a reír.
Giré a verlo. Esa sonrisa con hoyuelos me daba tanta ternura. Palmeó el lado derecho de la cama donde había un espacio libre, me indicaba que me sentara. Caminé hasta la cama y me senté delicadamente.
—¿Cómo te sientes? —pregunté pasando mi mano por su mejilla. Sonreí.
—Contigo, mejor. ¿Cómo te fue con tu empleo? —preguntó tomando mi mano y dio un pequeño beso en ella.
—Creo que el accidente te afectó un poquito. ¿Verdad? Me ha ido de maravilla, conseguí que me trasladaran a Lon...
—¡Fuera de aquí, zorra! —gritó aquella voz chillona. No me digan, Taylor. —Es mi novio y no tienes derecho de estar aquí, salte. —ordenó.
Miré a Harry. Él puso resistencia para que no me fuera.
—Nos vemos después, Harry. Recúperate pronto. —dije besando su frente. —Espero, tú también te recuperes. —dije saliendo de ahí.
Taylor.
—¿Me puedes explicar que hacía ella aquí? —pregunté enojada, avancé con la silla de ruedas hasta él.
—No tengo que darte explicaciones, ahora vete de aquí. —ordenó. ¿Qué se creía?
—Claro que me las tienes que dar, soy tu novia. —exigí. —Mira Styles, sólo te advierto una cosa. —dije avanzando hasta la puerta. —No la volverás a ver.
Salí de aquella habitación. Me dirigí hasta seguridad.
—Exigo que no dejen pasar a la chica que salió hace unos instantes. A una tal (tn) Hurt. —indiqué.
—No la volverá a ver por estos pasillos, señorita. —dijo aquel guardia.
