GUESS [CAMREN]

Capítulo 29

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— Buenos días chicas... -dijo Ally levantándose.

— Mhmm... -respondió Dinah acomodando su cabeza sobre el pecho de Normani.

— Quita Dinah, quiero ir al baño. -se quejó Normani, mientras empujaba a la polinesia.

— Anoche no me podías que me quite! -farfulló la rubia teñida.

— Joder... -finalizó la de piel oscura, sacándose de encima a la alta mujer, se levantó y fue corriendo al baño.

— Uy... pero qué humor. -decía Dinah colocando una almohada sobre su rostro.

— Ustedes dos son unas malcriadas, pero son adorables. -comentó la pequeña mujer levantándose también.

— Uhmm... y Mila? -murmuró Dinah, abrazando su almohada.

— No lo sé, al despertar ya no la vi, se habrá ido a trabajar. -respondió Ally.

— Coño!!! -se levantó Dinah de un salto. — Hoy debí hacerme pasar por su novia. -decía mientras se colocaba su pantalón.

— Pero D.J. ese no era el plan. -dijo confusa Ally.

— Era mi plan, así que igual lo haré. -dijo tomando su bolso y saliendo de la habitación, yendo al baño de invitados para alistarse. Cuando estuvo lista, salió de la casa y subió a su coche, camino a Guess.

— Y Dinah? -preguntó Normani al salir del baño.

— Se ha marchado, dijo que debía cumplir su plan, el de ella... a veces pienso que Dinah siente un amor diferente hacia Mila, como que la sobreprotege exageradamente. -comentó la pequeña.

— Sí, a veces yo también pienso eso, creo que el lazo entre ellas es muy fuerte. -concluyó la de piel oscura con un suspiro.

— Ya que nos hemos quedado solas, nos vamos a nuestras respectivas casas o quieres ir a por un desayuno?

— Acepto el desayuno. -respondió Normani sonriente.

— Deja me alisto y salimos. -puntualizó la pequeña mujer y fue corriendo al baño.

Al cabo de unos minutos, ambas mujeres salieron de la casa y fueron a desayunar...

***

— Buenos días! -decía Lauren entrando al estudio.

— Buenos días guapa. -respondió la maquilladora.

— Hey... -dijo el fotógrafo y los demás sólo sonrieron a Lauren.

— Y mi compañera? -preguntó la ojiverde al notar la ausencia de la castaña.

— No lo sabemos, aún no ha llegado, aunque siempre suele ser puntual, de seguro fue el tráfico o algo así, llegará en minutos. -respondió la maquilladora. Lauren sólo hizo una mueca y fue de nuevo hasta su camerino.

— Ok, llamaré a Vero, espero que llegue pronto, sin ella aquí todo es aburrido. -decía la ojiverde en voz alta, mientras sacaba su teléfono y se acostaba en el sofá. — Qué raro, está apagado. -comentó mientras comenzaba a enviarle mensajes. Oyó que alguien golpeó levemente la puerta.

— Adelante. -dijo ella y la puerta se abrió, Lauren miró en dirección a ésta y se sorprendió. — Tú? -dijo ella.

***