Drabbles {3} | ShiIta.

No seas estúpido.

{AU ; Narutoverse}

No seas estúpido.

Shisui era un excelente ninja, un excelente amigo y un excelente ser humano. Sin embargo, todo parecía haberse ido al caño cuando vio a su novio hablando tan cariñoso con Sakura, amiga y compañera de Sasuke. Shisui sabía que Itachi jamás de los jamases se involucraría con alguien tan cercano a su pequeño hermanito; pero también sabía que Sakura era bonita, inteligente y bastante espontánea. 

Casi tan espontánea como su propia estupidez; sin saberlo, Shisui ya tenía el ceño fruncido y los brazos rígidos a los costados. Los ojos jade de la mujer chocaron con la tormenta oscura de los suyos, pero lejos de infundir miedo en la fémina logró obtener la atención de su pareja. Santa mierda, ¿por qué tenía que ser tan estúpido? Ahora debía de caminar un par de pasos con las manos ocupadas en las bolsas de plástico del mercado, saludarlos con una suave sonrisa y besar a Itachi. Besar a Itachi no era un problema, pero cuando estuvieron cerca él pareció ignorar la silenciosa tradición implantada.

— Shisui-san, es un gusto verle —saludó cordialmente Sakura—. Tengo que irme, Itachi-kun, ¡no lo olvides!

Bueno, todo parecía en orden y nada fuera de lo común... obviando las palabras ocultas, el ligero sonrojo en las mejillas de Itachi y los nudillos pálidos de Shisui haciendo presión sobre las indefensas bolsas. 

Era un día agradable. 

— ¿De qué hablaban? —preguntó Shisui intentando sonar desinteresado—. Se los veía muy animados. 

— Nada en particular—¡Mientes! Gritó la mente de Shisui, ¡tus lindos ojos te delatan!—. ¿Compras? 

— Nada en particular—repitió mecánicamente el más grande. Itachi lo miró con una ceja alzada antes de asentir, no muy seguro de la estabilidad mental de su novio—. ¿Paseo? 

Oh, así que por ahí venían los tiros. Itachi resopló antes de formar una tenue sonrisa, ahora entendía un poco de lo que sucedía. Tomó una bolsa de las manos apretadas de Shisui, que cedieron ante la tranquila caricia de los de dos de Itachi como si de un hechizo poderoso se tratara. Ojos negros se vieron, unos más apenados y otros burlones. 

— Creo que debo recordarte mis gustos, Shisui —dijo Itachi—; pareces haberte olvidado que Sakura-san es amiga de Sasuke. 

— No sé de qué hablas—mintió descaradamente. Viendo que la inspección de Itachi continuaría, entrelazó sus dedos con los de él y tiró gentilmente de su brazo—. Mejor vamos a casa, compré dangos para una comadreja glotona. 

— Buena estrategia, celópata. 

— ¡Oye! 

Entre berrinches y ligeros empujones acompañados de risas, la extraña y peculiar pareja Uchiha caminó hasta la casa del mayor donde ambos vivían hace ya un par de años. Shisui miró de reojo a Itachi en una parte del camino, enamorándose un poco más a cada segundo, no debía ser un estúpido. Si Itachi lo amaba, era genial; si Itachi amaba a otro y era feliz así, también sería genial. 

— Sólo por curiosidad—recalcó—. ¿De qué hablabas con Sakura?

 Nuevamente, el pudor atacó las mejillas de la comadreja, pero aún así contestó: 

— Ella quería saber quién... —No terminó la oración, Shisui lo dedujo entre carcajadas—. No encuentro motivo para reírte, Shisui; es nuestra intimidad. 

— Mientras estaba en el mercado, me topé con Yamanaka y me hizo la misma pregunta—Itachi quería golpearlo, ¿¡cómo podía lucir tan fresco con una pregunta así!?—. Deduzco que se trataba de una apuesta. 

Silencio. Itachi volvió a hablar después de unos minutos. 

— ¿Qué le respondiste? 

Shisui rió. 

— Nada en particular.

— ¡Shisui!

Definitivamente no debía ser un estúpido, Itachi era suyo; Ino Yamanaka y Sakura Haruno se encargaron de confirmarlo.