¡Hola! Sé que deben de querer matarme por tremenda demora pero tenía un ciclo universitario muy pesado que hacía que no tuviera nada de inspiración, ahora sigo en clases pero es más tranquilo por lo que tengo mucho más tiempo para escribir así que estaré escribiendo mientras tenga tiempo libre =)
¡Disfruten!
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-Matias’s POV-
Abrí los parpados lentamente y trate de enfocar mi mirada en cualquier punto, me sentía extraño y al lograr comprender por qué, me incorporé rápidamente logrando que sintiera una punzada algo leve en mi parte baja.
-Maldición-Mascullé entre dientes y con el ceño fruncido.
Maldito dolor.
Y sin quererlo, todas las imágenes de lo que sucedió el día anterior me vinieron como si fuera una especie de cascada.
Me sonroje de golpe, intime con Damián, nuevamente.
Me giré para observarlo y sentí pánico al no encontrarlo.
“No de nuevo…”-Pensé
Tragué con demasiada fuerza el nudo que empezaba a formarse en mi garganta, otra vez me había dejado pero esta vez sin nota y con ganas de colgarme de cualquier árbol que encuentre por ser tan imbécil.
Me desplome sobre la cama teniendo cuidado de no maltratar mi adolorido trasero y me coloque de costado logrando contener las lagrimas, ya tengo bastante edad para no llorar por cualquier cosa, lo que me consuela es que tuve un buen polvo.
De repente, siento el peso de alguien en la cama y me pongo a la defensiva, quizás me estén sacando de la habitación.
Me giro rápidamente y me encuentro con ese par de ojos azulados haciendo que mi corazón comience a latir tan rápido que siento que se me sale del pecho.
-Buenos días, dormilón-Susurra Damián antes de besarme en los labios con suavidad.
Siento que estoy volando.
-Bu… buenos días-Logró tartamudear un poco.
Damián se aleja y me mira bastante extrañado.
-¿Qué sucede, Mati?-Pregunta con extrañez y luego su rostro se torna algo triste: -¿Te arrepientes de lo que sucedió?-
Abro los parpados a más no poder.
¿Yo arrepentirme? ¡Pero si tenía miedo que me dejará de nuevo!
-No seas idiota, no me arrepiento sabes que no lo haría, lo que me preocupaba es que tú me hubieras dejado de nuevo-Musito como respuesta.
Él al instante frunce el ceño: -No te dejaría de nuevo, no soy idiota, Mati, no podría dejarte ni aunque tu quisieras que te deje- Y se acercó a mi hasta volverme a besar en los labios pero esta vez transmitiéndome sus sentimientos, ese beso significaba las promesas que él no podía hacerme a la ligera ya que sabía que no le iba a creer, las promesas de amor que tanto había ansiado antes.
Le pasó los brazos por su cuello y él volvió a acomodarse entre mis piernas sin presionar todo su cuerpo sobre el mío, nos besamos por unos instantes y luego él se separo.
-¿Y bien? ¿Qué haremos con nosotros?-Se incorporó un poco hasta sentarse junto a mí y con delicadeza tomo mi cabeza y la coloco sobre sus piernas.
Al terminar de analizar la pregunta lo primero que hice fue cerrar los parpados, ese era un tema bastante jodido porque estaba Liz y quiera o no ella es mi esposa.
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Te amo en silencio 2 [Homosexual]
Romance"Está en mi casa. Tu sabes quién." Me quede helado y mis manos comenzaron a sudar. ¡Por un demonio! Sí, el idiota que se ha quedado helado soy yo, Matías y esta es la continuación de mi vida. ¿Interesados en leerla? ¡No esperen más y entren! Continu...