El rey de los Idiotas©

Lección 8

Hoy era el dia, tenía todo planeado la torre Eiffel, las flores rayos debia tranquilizarme un momento, me dirigui a casa de Kim con el enorme rank de flores, mientras pensaba como tocar la puerta y que decirle comencé a dar vueltas por todo el pasillo o vamos Tobias, ayer tenías el valor para besarla y hoy no puedes siquiera tocar su puerta, respire hondo y toque el timbre. Me puse algo nervioso cuando oi como se acercaba para abrir la puerta pero estaba aun mas nervioso cuando ella abrio la puerta, no sabia como una mujer podria estar tan bella siempre.

-Wou, ¿que es esto?.

-Un pequeño regalo, para mi princesa kim.

Por fin podia decirlo con libertad, se sentia bien.

-¿Pequeño?... Estas bromeando creo que apenas y puedes cargar con el.

-Tal vez.

-Tendre que comprar un jarron, para poner eso.

-Bueno entonces vamos.

-Claro, pero podrias meter las flores primero, no quiero tener que estar cargando con ellas por todos lados.

-Por supuesto, mi señorita-conteste mientras entraba a su departamento y dejaba las flores en el comedor- wou tu casa, no parece de una chica de 17 años.

-Lose... Pero no se ve mal.

-Eso creo... Te vez muy bonita hoy- comente mientras la me veia de pies a cabeza.

-Osea que otros dias no me veo bonita.

-Bueno todos los dias te vez bonita y ayer te veias hermosa pero hoy estas preciosa.

-Lose.

-Me encanta tu modestia...Bueno nos vamos.

-Claro.

-Y a donde vamos.

-Se que vives en Paris y puede que sea una pregunta tonta, pero ¿Alguna vez has ido a la torre eiffel?.

-Se que vivo en Paris y puede que la respuesta parezca tonta pero, no nunca he ido.

Lo sabia, todo marchaba bien.

-No te gustaria ir.

-Me encantaria.

Cuando llegamos a la torre Eiffel, habia mucha gente en parejas paseando, el ambiente era perfecto.

-¿Te gustaria entrar en la torre eiffel?

-Se puede hacer eso.

-Claro.

Mientras entrabamos a la torre eiffel, Kim disfrutaba de la vista, no podia evitar observarla todo el tiempo.

-Le gustaria tomar algo a esta señorita en el restaurante.

-Hay un restaurante aquí.

Creo que tendria demasiadas cosas que contarle y enseñarle de Paris.

-Es Paris, que esperabas.

-Tienes razon, no es como si fuese Mexico, que apenas y hay restaurantes en una ciudad.

-Tan horrible es Mexico.

-No es horrible, es un buen pais dentro de lo que cabe... Ademas fue el pais que invento los tacos.

-Claro, Tacos... Creo que deberia probarlos algun dia.

-Puedo hacerte unos, si quieres.

-Me encantaria probar tu comida.

-Ya veraz que sera grandiosa.

Todo que provenga de ti Kim es grandioso.

-Lose- dije mientras tomaba la mano de Kim-supongo que ya sabremos que haremos en nuestra proxima cita.

-¿Cita?-pregunto mientras me soltaba la mano.

-Si ya sabes una cita, ahora que somos novios.

-¿Somos novios?

Creo que algo salio mal,¿que paso? Lo sabia todo habia sido un sueño, un loco, loco sueño.

-Bueno con lo que paso ayer... Pense que tu y yo.

-No recuerdo, que me hallas preguntado ser tu novia.

Claro idiota, eso se pregunta. Idiota. No pude evitar reír ante tal descuido.

-Claro...habia olvidado que ese tipo de cosas se preguntaban, como pense que con lo que paso ayer ya eramos novios.

-Bueno hay personas que se besan a las dos horas de conocerse y despues actuan como si nada pasaran... Solo queria que me preguntes para estar segura.

-Tienes razon- tome sus manos mientras me arrodillaba, la miro fijamente mientras sonreia- Señorita Carlier Kimberly, me harias el gran honor de estar con usted para poder ser feliz... Kim, ¿serias mi novia?.

-No.

Eso no me la esperaba.

-¿Que?-pregunte al no saber que decir.

-Solo estaba bromeando... Por supuesto que si saldria contigo-me conteste mientras le daba un pequeño beso en la mejilla.

Esa chica sabia como darme buenos sustos, despues del pequeño beso la cargue entre mis brazos para darle vueltas mientras todos nos aplaudian.

-Kim, realmente sabes como hacerme sentir tan nervioso, confundido y feliz.

-Opino lo mismo.

Hacer que ella sintiera tantas cosas por mi, realmente me ponia feliz a morir.

Volvía a casa totalmente feliz, tenia la mejor novia del mundo, incluso entre bailando pero todo termino cuando vi a mi padre quien me miraba con seriedad mientras cargaba un sobre, demonios hoy me llegaba la repuesta de la escuela de la F.A.U.

-¿Que significa esto Tobías? -pregunto mi padre mientras me daba el sobre, habia sido aceptado, no podia gritar ahora mismo de felicidad.

-Me aceptaron en la F.A.U, tal como querias.

-Hace dos años, si no mal recuerdo dijiste que jamas asistirás a tal escuela.

-Pero no es eso grandioso- dijo mi madre en mi defensa- la F.A.U, es bueno saber que pudo lograrlo por su cuenta.

Si habia algo a lo que mi padre no podia enfrentar era a mi madre, aunque no lo parezca ella era mucho mas aterradora, ahora embarazada. Dios lo amparé.

-No me decepciónes- dijo antes de irse.

-Espera padre- observe como el me miro de reojo- solo queria decirte que ya estoy saliendo con Kimberly.

El no dijo nada solo siguió su camino pero mi madre salto de felicidad y me felicito realmente le agradaba Kim.

Asistir a la misma escuela que mi novia, era lo mejor.