Gravity Falls: El fin nunca estuvo tan cerca

Capítulo 6: Capítulo ¡Sorpresa! Parte 2

-Ya dame eso Mabel...

-Parece que alguien va a tener que lavar su gorra jajajaja

-Quieres callarte 

Narra Dipper

Disculpen, mi hermana limpió con mi gorra una travesura de Pato, pero ya verá esa niña.
Veamos en que me quedé... Oh ya bien, listos comenzamos.

Cuando escuchamos esa voz, nos dirigimos a donde nos llevaba el olor a incienso, y allí estaba una chica con el cabello café claro, parecía más amarillo claro, con un traje formal, y en perfectas condiciones , pesar de que estaba en un lugar con plantas que arañaban todo lo que veía a su paso, con una corbata de color amarilla, también con , sombrero y un bastón, lo que me pareció muy familiar. Al parecer estaba en una meditación profunda, pues vimos cómo levitó del suelo y lo que me preocupó más que nada es que estaba en medio de un pentagrama, pintado con lo que parecía ser sangre pero según Mabel era jugo de mora silvestre. Metros más enfrente de ella estaba una estatua, no sé de que se trataba pero era  triangular. La chica gritaba a todo pulmón palabras en latín pero se detuvo de golpe y volteándose nos miró y dijo

-Hola chicos -al voltear se le vio un gran parche en el rostro, y sólo tenía el ojo izquierdo, pero al parecer nos estaba esperando
-Hola ¿quién eres? ¿Y que estás haciendo aquí?

-Me llamo Amair y yo soy turista, llegué aquí desde hace 2 años, me quedé aquí debido a que algo, que no logro entender ocurrió, creo que los pobladores de éste pueblo le dicen Raromageddon, y no pude escapar pues mis padres escaparon lo más antes posible y me dejaron aquí sola y abandonada en éste sucio y  frío bosque, pero hago esto que ven aquí porque es una tradición que tenemos nuestra familia, ellos siempre me decían que cuando nos separáramos meditara y el universo haría lo demás, por cierto soy de Berlín no soy de aquí.

Siendo sincero no pude aguantar las lágrimas de mis ojos pues venían en lagrimones sólo volteando para evitar que ellas me vieran llorar, pero no resultó como yo esperaba.

-Eso es bueno, que llores, es bueno llorar -dijo la chica 

-Si hermano, no te voy a criticar, sólo que nunca vi ese lado tuyo, pero es bueno saberlo.

-Oye Amair, pero ¿entonces dónde duermes tú?

-En realidad no he dormido durante 3 años, tengo una enfermedad que no me deja dormir, y si cierro mis ojos empiezo a ver cosas lúcidas y sin sentido.

-Bueno ¿y si vienes con nosotros?, tenemos una cabaña donde vivimos, puedes quedarte allí a vivir hasta que quieras o veas a tu familia.

-Eso es muy dulce de tu parte Mabel.

-Un segundo ¿cómo sabes su nombre?

-Después de que se suscitó el Raromageddon, las personas hablaban de la familia Pines por casi un año entero, por eso no me alarme cuando los vi, pues ya sabía quienes son.

-Oh, bueno eso explica muchas cosas sabes -añadí un poco apenado por mi desconfianza hacia esa chica.

-Oigan ¿Stanford Pines regresó del viaje en alta mar con su hermano?

-No, nuestros tíos no han regresado ¿Porqué la pregunta?

-Tengo una situación que arreglar con el científico.

Al decir eso sentí un escalofrío el cual recorrió todo mi cuerpo, pues lo dijo con una voz muy seria y maliciosa, me preocupé por el tío Ford.