Cap. 10

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Un rubio de lentes yacia dormido en el sofa de la sala, habian pasado dos horas y estar en aquella posicion comenzaba a cansarlo asi que poco a poco fue estirando sus extremidades mientras abria sus ojos lentamente acostumbrandose a la luz.

Tendria que preparar la cena antes de que Kuro regresara, asi que se levanto para dirigirse al baño y lavar su cara para despertar completamente, una vez llego al baño se miro en el espejo y acaricio su cabello, estaba un poco largo tendria que ir a cortarselo despues y de paso llevar tambien al pelinegro, aunque sabia que aunque se cortara el cabello seguiria siendo un desastre.

Se hecho agua en la cara y seco su rostro con una toalla para despues dejarla de lado y salir del baño. Camino hasta la cocina colocandose un delantal con estampado de gatos que Kuro le habia regalado, menos mal que no se encontraba o le molestaria; comenzo a buscar los ingredientes que necesitaba para cocinar el bento que le habia prometido al pelinegro y comenzo a cocinar una vez que tenia lo necesario.

Mientras tanto en el hospital, un pelinegro se veia bastante agetreado. Hiba de un lugar a otro revisando historiales medicos y dando ordenes para estabilizar a algunos pacientes antes de verlos a todos y cada uno de los que estaban bajo su cuidado.
Sin duda era un trabajo que le estresaba en ocasiones, suspiraba pesadamente cada que podia y masajeaba su cuello cada que podia para liberar algo de estres. Ahora que lo pensaba tal vez Bokuto tenia razon y dejar de lado un poco el trabajo para pasar mas tiempo con su esposo.
Fue sacado de sus pensamientos cuando entraban mas pacientes a la sala de emergencias, por suerte cuando terminara su esposo estaria esperandole.

El rubio despues de varios incidentes en la cocina, que incluian el tirar varios ingredientes al suelo, el cortarse un dedo y quemar un poco del bento por fin despues de varias horas logro terminar la cena, se veia muy bien aunque lo pensara el mismo para darse animos. Aunque a decir verdad le habia quedado mejor que en anteriores ocasiones, miro el reloj y la tarde terminaba, si que habia tardado bastante en cocinar, debia seguir practicando.
Se quito el delantal y dejo el bento en la mesa para dirigirse al baño, tomaria una ducha antes de que el pelinegro regresara.

Una hora, una larga hora habia transcurrido desde que habia salido de ducharse; el cielo estaba oscuro iluminado por las estrellas, Tsukishima estaba sentado en una de las sillas que estaban al lado de la mesa, recargaba su rostro en una de sus manos mientras que con la otra tomaba pequeños bocados y constantemente miraba el reloj, esperaba ansioso, estaba atento a cualquier sonido por si el mayor llegaba.
Otra hora, dos, tres horas mas y asi la media noche llego. Era claro que estaria de nuevo solo esa madrugada, se levanto y miro el bento, todo su esfuerzo, los accidentes que paso, su entusiasmo por poder estar con su esposo todo ello se fue a la mierda por otra promesa sin cumplir y el como estupido creyendola.
Desilucionado camino a la habitacion arrastrando los pies, no encendio la luz simplemente camino hasta llegar a la cama, se sento para poder quitarse los lentes dejandolos en el pequeño mueble al lado de su cama. Suspiro y se recosto cubriendose con las sabanas para tratar e dormir, aunque siendo sinceros no lograria hasta que pudiera desahogarse llorando, pero no lo haria, no queria que el mayor le viera si regresaba.
Pasada media hora cayo profundamente dormido sujetando las sabanas con fuerza.

Eran las 4:30 am, un pelinegro abria la puerta y entraba dejando los zapatos, suspira dejando la bata en el perchero mientras encendia la luz, miro la sala en busca del rubio, en algunas ocasiones le espraba ahi y terminaba dormido; el solo recordar eso hizo queble doliera el corazon, bueno tampoco era su culpa que no hubiera suficientes doctores.
Camina hasta llegar a la cocina mirando sobre la mesa el bento que el rubio habia mencionado, se acerco y probo un trozo, estaba delicioso si que era una sorpresa. Comenzo a preguntarse cuanto habia tardado en cocinarlo, poco despues cayo en cuenta que habia dejado mucho tiempo solo a Tsukishima como para que aprendiera a cocinar.

Comio una buena parte del bento preparado para despues ir a tomar una ducha, agradecia que el rubio no despertara con cualquier ruido asi podia terminar de ducharse tranquilamente. Pasados unos minutos salio del baño secando su cabello mientras caminaba hasta llegar al closet para abrir uno de los cajones dentro de este y sacar un boxer negro, una vez se lo coloco dejo la toalla de lado y se recosto en la cama provocando que el rubio se moviera.

-Kei? estas despierto?- lo mueve un poco

-mmm...Ahora lo estoy- dice adormilado.

-perdona yo...- abraza al rubio apegandolo a su cuerpo.

-como te fue?- trataba de no llorar

-bien pero no es de eso de lo que quiero hablar-

-esta bien, no te preocupes, me alegra que regresaras con bien- suspira

-perdoname- besa su cuello

-esta bien, no tienes porque disculparte, deberia disculparme yo por no espetarte- siente un escalofrio -solo debo acostumbrarme un poco mas-

-no digas eso Kei- se coloca encima del rubio.

-Kuroo tengo sueño y quiero descansar, tambien deberias hacerlo- cierra los ojos

El pelinegro suspira y vuelve a recotarse a su lado -mañana podriamos ir de compras, necesitamos algunas cosas-

-si, esta bien- bosteza -descansa-

-buenas noches- besa su mejilla y cierra los ojos.

En otro lugar, para ser precisos en la casa del matrimonio Bokuto, un pelinegro dormia placidamente cuando de pronto suena su celular, con pereza levanta su brazo buscandolo al lado de la cama, sin mirar quien era contesta soltando un bostezo.

-moshi moshi?- decia abriendo levemente sus ojos.

-Akasheeeeeeeeeeee- se escucha la escandalosa voz del bicolor

-Kotaro, no grites, es algo tarde no lo crees?- mira el reloj faltaban 10 minutos para las 5:00 de la mañana.

-si, pero el entrenamiento termino tarde y me quede dormido antes de poder llamarte-

-ya veo, muchas gracias- sonrie levemente

-perdona por hacer que te levantaras- suspira, tras un largo silencio el pelinegro habla

-Kotaro? sigues ahi?-

-ah si perdona- algo en su voz era diferente.

-pasa algo? quieres decirme algo? ahora que lo pienso podrias haber esperado a llamarme a las seis, debe ser importante dime que pasa?-

-ah...Yo...Bueno desperte con un problema entre las piernas por un sueño...-

-oh...Debe ser doloroso, aunque lamento no estar ahi para ayudarte, podriamos hacer algo-

-enserio? Akasheeeeeee eres el mejor-

-estas solo?-

-si, dime que debo hacer?-

-bueno primero...-

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Perdon, si ya se que tardo mucho y he leido varios comentarios, se que es dificil complacer a todas los shippeos pero en lo que aparecen mas personajes tomare en cuenta sus consejos.
Gracias por esperar y apoyar la historia, perdonen los errores de ortografia.

Nos vemos luego nwn/

¿Juntos y revueltos?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora