Compañeros.

2.5K 98 20
                                    

-Mi lady, yo nunca cuestiono las decisiones que toma el Hokage, pero creo que Shizune es la más adecuada para impartir este tipo de clases-

Vaya, jamás creí que la Quinta me pidiera algo así. Estoy consciente de que es muy importante dar este tipo de educación a los jóvenes, yo misma las recibí en su momento, pero jamás me imaginé que sería yo quien las impartiera en el futuro. Es vergonzoso, no porque sea un tema tabú, si no porque los jóvenes jamás se toman esto en serio, incluso yo, me reí de mi sensei cuando las dió. Que ironía, ahora seré yo la que salga corriendo pidiendo ayuda, roja como un tomate.

-Shizune está muy ocupada con una misión, así que ella no puede-
-Tal vez Anko o Kurenai...-
-Mi decisión está tomada, tú, a mi parecer, eres la más indicada, los chicos te tienen afecto y confianza, eso es básico para esto-
La ojimiel me miraba inescrutable, no había forma de hacerla recapacitar.

-Esta bien, mi lady, ¿Cuándo empezaré?-
-El día lunes, tienes el fin de semana para prepararlo todo, ah... Antes de que lo olvide, tendrás un compañero, cómo sabes, estás clases las imparten un hombre y una mujer.-

Si, lo sabía.

-Bien, buscaré a Iruka para ir preparando...-
-Te equivocas, Iruka está ocupado con Anko en los exámenes, tu compañero está esperándote en el campo de entrenamiento 3, o conociéndolo, aún no a llegado-

El corazón se me cayó hasta los pies y mi estómago se enrredó en mi garganta, esa última frase me dijo, directo como una bala, quien será mi compañero. ¿Tenía que ser él?

-B...bien mi lady, voy con... Él para preparar... Con permiso.-

Temblaba de la cabeza a los pies, siempre he estado enamorada de él, por lo tanto, me matan los nervios cuando está cerca, sus ojos, su cabello, su aroma, todo, me enloquece. Y dar éste tipo de pláticas, con él, seguro me daría un infarto en medio de la clase.
Traté de relajarme camino a si encuentro, pero saber que iba a toparme con su fornida y fuerte figura, con su cabello de plata soltando su olor, si, en esos momentos odiaba pertenecer al Inuzuka y tener el mejor olfato de todo el clan. Mis nervios no ayudaban, pero traté de disimular cuando lo vi caminando, con Icha Icha en las manos para variar, ¿Podía existir alguien más... sexy que él? Imposible.

-Hola-
Agradecí que esa estúpida máscara que nunca se quita siguiera ahí, así su aliento no me embriagaba por completo, tardé en responder, así que alzó la mirada de su libro, lo cerró y me vió fijamente, casi me echo a correr en dirección opuesta.

-Hola, Kakashi-
-Supongo que la Hokage ya te habló de nuestra misión-
-Si, por eso estoy aquí-

Amo su voz.

-Bien, ¿Tienes una idea de por dónde empezar?-
-No-
-¿Te parece que vallamos a mi apartamento y, ya más cómodos, pensemos y preparemos lo que vamos a decir? Aquí, como que no me inspiro-

Casi se me olvidó mi nombre cuando habló, ¿Ir a su apartamento, para inspirarse, sobre que decir en una plática de educación sexual, conmigo, a solas, cómodos, inspirarse... ¡Mierda! ¡Deja de pensar estas cosas Okami!

-Heemm, si está bien-
-No hace tanto calor, ¿Por qué estás tan roja?
-¡Ah! No es nada, corrí hasta aquí!
-Humm- Había empezado a leer otra vez.
-Creo que tienes suficiente inspiración en ese libro ¿no Kakashi?-

Su sonrojo era divino.

-Aaaa, pues... No es..-
-Ya-

Caminamos en silencio todo el trayecto hasta que llegamos a la puerta de su casa. Tenerlo a mi lado, me tenía muy nerviosa, y el lo percibía, pues no dejaba de mirarme por el rabillo del ojo, eso no ayuda en lo más mínimo.

El insertó la llave en la perilla y puso su mano en mi hombro, acercándose mucho, casi rozando su nariz en mi oreja, dijo:

-Vamos a inspirarnos-

¿Cómo es la vida sexual de un Shinobi?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora