Homófobo 「Eaktrap✿」

True colors ❀

"Es difícil tomar valor
En un mundo lleno de gente
Puedes perder la vista de todo
Y la oscuridad dentro de ti
Puede hacerte sentir tan pequeño."

Habían pasado unos años ya, Towntrap tenía aproximadamente 13 años.
Estaba triste, puesto que después de decirle a su mejor amigo sobre su homosexualidad, Eak simplemente se cambió de escuela y nunca le volvió a hablar.
Los últimos días que estuvo Eak en la escuela, le hacía burlas a Towntrap por ser un "maricón de mierda".
Lo humillaba ante todos, pero los demás... ellos sólo seguían el ejemplo de Eak por estar intimidados ante el mexicano.
Una vez el peli-gris fuera de la escuela, todo volvió a la normalidad.
Nadie mencionó nada sobre ese tema y dejaron de molestar a Towntrap.
Después de casi un año desde que Eak se fue, entró un chico nuevo algo raro, pero simpático.
Y digo raro en todos los sentidos, su forma de ser y su físico también.
No era algo malo en él, al contrario, esa forma rara en la que era, lo hacia ver más lindo.
Se llamaba Owynn.
Su cabello era un poco largo, de color morado con la punta verde. Sus ojos eran de dos distintos colores, azul y verde.
Su manera de socializar no era tan efectiva, era callado, pero todos le hablaban por ser único (tanto en color de cabello como de ojos)
Llamó la atención de Towntrap, así que habló con él.
Descubrió que tenían gusto similares, incluyendo la atracción a personas de su mismo sexo.
En ese momento se volvieron inseparables.
Owynn hizo que Towntrap olvidara por completo al idiota de Eak, y que se concentrara más en su nuevo mejor amigo que era Owynn.
Pasaban todos los recesos juntos, y comúnmente el de cabellos morados asistía a la casa del mayor.
Así, hasta que esperaron un año a que su amistad progresara y diera los resultados que ellos querían.
Owynn se encontraba ansioso en su silla asignada del aula.
Quería decirle a Towntrap todos los sentimientos que había desarrollado por él.
Vio como el peli-anaranjado entraba por la puerta del salón, observó que su cabello estaba amarrado en un chongo y sus labios tenían brillo. A Town le gustaba mucho pintarse los labios, era algo que no podía dejar de hacer para sentirse más seguro y lindo.
Owynn sonrió inconscientemente al verlo, desde lejos, alzó la mano y saludó a su mejor amigo.
Towntrap sonrió también y lo saludó.
Se acercó al lugar de Owynn y se sentó al lado de él.

-Holaaa.-saludó con su voz dulce.

-Hola...

-¿Sucede algo?.-notó el ánimo de Owynn, el menor sonrió al pensar en que Towntrap lo comprendía.

-Supongo que sí...-musitó el de cabellos morados con algo de timidez.

-¿Qué es? Tú sabes muy bien que puedes contarme lo que sea.-trató de tranquilizar un poco al chico.

-¿Lo que sea?

-Sí, Owynn. Cualquier cosa.

-Escucha Towntrap.-quería tartamudear, pero no, no dejaría su orgullo de ser activo.-Tú eres lo mejor que me ha pasado, me comprendes muy bien y sabes hacerme reír. Yo... no tengo esa sensación de amistad, tengo emoción de amarte... y sé que eres un imposible, pero te amo demasiado. Todo el día pienso en ti y quería saber si tú también sientes lo mismo por mí...-Towntrap se quedó callado unos segundos y después sonrió mientras se sonrojaba.
Owynn estaba confundido ¿De qué se reía Towntrap?

-Owynn... yo también te quiero como tú lo haces conmigo...-el mencionado se quedó en silencio y después abrazó a Towntrap.

-Dame una oportunidad...
-¿Quieres que tengamos una cita?

-Sí, exacto. Sólo necesito eso para que no dudes con ser mi novio.

-Bien, tendremos una cita.-Owynn se quedó abrazando a Towntrap por un largo tiempo mientras sonreía.

"Pero yo veo tus colores verdaderos
Brillando a través
Yo veo tus colores verdaderos
Y es por eso que te amo
Así que no temas demostrar
Tus colores verdaderos
Los colores verdaderos son hermosos
Como un arcoíris."