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Sus ojos se llenaban de lagrimas, aunque no podía diferenciarlas con la lluvia. Gimió al tratar de moverse, estaba empapado, sucio y peor aun, herido.

_Mi-mierda.._

Respiró con dificultad al lograr sentarse. Con sus manos, gateo hasta el árbol mas cercano y apoyo todo su cuerpo en este. Quedando recargado en el.

¿Cómo había pasado aquello?.

El castaño recordaba haber sido perseguido por uno de los policías, le habían preguntado desprevenido por su identidad y al no tener respuesta corrió lo mas rápido que pudo.

Por un momento, mientras seguía corriendo, miro por arriba de su hombro en dirección en que anteriormente estaba. Ya no veía rastro del tipo. Pero aun así, no contaba con que al mirar nuevamente hacia delante, su cuerpo tropezara contra una gran piedra y cayera por una colina que, para su suerte no era rocosa.

Rodó unos segundos hasta caer en un charco de lodo, ocasionado por la fuerte tormenta. Ahí fue donde permaneció quieto, su cuerpo estaba dolorido, pero no era tan grave, lo único que le dolía mucho era la cabeza, tal vez se la golpeo con una roca al car.

_La mala suerte me persigue_ Sonrió por sus ocurrencias, estaba herido, mojado, con frió, desorientado y aun no encontraba a su pareja. Bien, tal vez si tenia algo de mala suerte.

Observo su entorno, la lluvia seguía, eso no era novedad, lo que le llamaba la atención era el lugar. Jamas había ido a esa parte del bosque, bien quizás no conocía en si el bosque, ya que solo jugaban en la entrada de éste con sus hyungs, pero siempre pensó que era un lugar pequeño, gran error, era inmenso y fácilmente podrías perderte, exactamente como él.

Arboles, lluvia, oscuridad, frió, arbustos, cielo nubloso, hojas moviéndose de aquí por allá gracias al fuerte viento, era todo lo que podía ver y sentir.

Pero no era solo eso. A lo lejos pudo divisar algo, fue solo un segundo pero le sirvió para garantizar algo. No estaba solo.

Trato de ver a través de todos esos arboles a la distancia, creyó haber visto una.....luz.

Tal vez estaba loco o el golpe le afecto mas de lo pensado, pero claramente era una luz.

¡Otra vez!

La luz blanca apareció nuevamente, solo que esta vez se quedo mas tiempo. Jimin solo podía apreciarla desde su lugar, estaba lejos, se escondía entre los arboles y era realmente irresistible de ver.

Momento.

Miro por instinto sus manos, estaban cubiertas de sangre y una pequeña herida en su mano izquierda revelaba su ardor.

Herido, solo, con frió, en un bosque, empapado y la luz misteriosa apareció de la nada.

_Mi sueño..._ Susurro aun sin creérselo.

¿Realmente era eso posible? ¿Cómo podía soñar con algo que no había experimentado antes? ¿Era una especie de Déjà vu? Esas preguntas rondaron por su cabeza.

Observo nuevamente la luz, esta estaba un poco mas alejada que antes. En dirección contraria a la suya.

Se asustó ante la idea de perdérla, como en su sueño. Rápidamente logro ponerse de pie, debía corre hacia ella, por alguna extraña razón no quería que lo dejase.

Chillo de dolor al dar el primer paso, estaba débil. Poco a poco el dolor no le importo, solo se concentraba en caminar lo mas rápido que podía entre los altos arboles.

_Por favor.._ Susurro mirando a la luz, estaba lejos, era veloz, mas que él.

Siguió caminando, abrazándose a si mismo por el frió. Escucho ramas quebrándose a su espalda pero no le tomo importancia, quería llegar.

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