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Todos sabemos que levantarnos temprano es una tarea difícil, pero para Min YoonGi lo es más.

Se podría decir que Min YoonGi estaba ansioso por ver al chiquillo de mejillas regordetas y labios abultados de no ser así ¿por qué se había despertado temprano y sin rechistar?

Su madre pensó que estaba delirando o algo más grave le pasaba pero le sirvió la comida al momento y el pensamiento de que su hijo estaba enamorado cruzó por su cabeza, pero él no hablaba con nadie, así que eliminó esa extraña posibilidad.

—Gracias mamá, adiós —Se despidió de su mamá con un beso rápido y por su comportamiento ella volvió a considerar que su hijo estaba enamorado.

(...)

—¡Mierda! ¿Cómo se me ocurre olvidarlo? —se preguntó a sí mismo cuando llegó al colegio e iba subiendo las escaleras.

Depósito monedas, presionó los números, incluyendo el de aceptar y esperó. Terminó su café y siguió esperando. ¿Demasiado temprano, tal vez?

Al ver que las clases estaban por comenzar no hizo más que resignarse, el lindo chico faltó a clases. Estaba triste y aliviado ya que había olvidado el anillo.

—Y yo que me había levantado temprano por nada —susurró, dejando escapar un suspiro.

—¿Sabías que cuando suspiras por tristeza dejas escapar un poquito de tu felicidad, YoonGi-hyung? —Un alegre TaeHyung se presentó frente a él.

—No me interesa —Sus pasos estaban cargados de decepción.

—¿De quién estás enamorado, hyung? —YoonGi lo miró horrorizado—. Te levantaste temprano y estuviste 10 minutos esperando a alguien. ¿Por qué no me lo has presentado?

YoonGi iba a decir: —¿Por qué tendría que hacerlo? Pero alguien se tropezó y lo hizo caer a YoonGi haciendo que su cara chocara contra el frío piso.

Y no, no fue el lindo chico adorable el que lo empujó y causó que su rostro sufriera un rasguño.

♥Coffee♥ YoonMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora