Entre dos Bandos |Renjun, Jaehyun (NCT) & Tú|

Cap. 2

Una vez visto y escuchado esa voz me di cuenta del lío en el que estaba. No sabía exactamente qué hacer, él solo me miraba con su ceja alzada. De inmediato lo único que pude hacer fue levantarme y limpiar la suciedad en mi ropa.

—Lo siento. —dije. Era muy incómoda esta situacion, él no hacía nada más que mirarme como si yo fuese un bicho raro. Luego de un rato, su mirada se me hacía un poco insoportable. —¿Qué?

—Nada... —dijo. Sin embargo, me sentía un poco extrañada. ¿Quién es él? ¿Cuál es la razón de la que esté aquí encerrado junto a mi?

Estaba incómoda. El chico fingía no mirarme, pero sabía totalmente que me estaba mirando. En un intento de querer salir, tiré de la puerta y golpeándola. Luego de que nadie respondió, volví a insistir sin rendirme. No me rendiría, debía salir de este lugar. Por un momento fui forzada a dejar de golpear la puerta. El chico con el que estaba encerrada me detuvo, tomó la mano con la que estaba golpeando la puerta y dijo: —¿Puedes detenerte?

—¿Qué no quieres salir? —pregunté algo enfadada. Lo único que quería era salir y no veía la hora de salir. Dios... Tenía unas ganas de ir al baño.

—Es mucho mejor que estar en clases. —dijo encogiéndose de hombros. Aún tenía mi mano sujetada y al darme cuenta de eso obtuve un sonrojo por parte de mis mejillas. Me solté de inmediato de su mano, el solo hecho de saber que su mano me sujeto por un momento me parecía algo extraño.

—¿Cómo es que estás aquí encerrado? —pregunté sentándome en el suelo.

—Eso no te interesa. —dijo. Que pesado... Lo miré con mala cara un momento y evité a toda costa volver hablar con él.

Luego de unas horas abrieron abrieron la puerta. Para mi sorpresa, no fue un profesor lo cual me pareció algo extraño. La chica miró asombrada a mí espaldas al ver al chico con el que estaba encerrada. Yo fruncí el ceño, ni que fuese la gran cosa, es solo un chico, ni que fuese un famoso cantante. El chico salió antes que yo empujando a la chica, y yo me digné a correr a la sala. Era recreo así que me tomé el tiempo de despejarme, de todos modos no tenía donde ir si no tengo un amigo aún.

Luego de un rato el recreo terminó y yo me fui al salón. En el momento que yo entré, todos me quedaron mirando y comenzaron a murmurar. Esto era demasiado extraño, tan extraño que daba miedo. Me recosté en mi mesa y miré hacia afuera por la ventana. Ahora que recuerdo... Hoy debía entrar a trabajar, era mi primer día en el trabajo. Solo quería entrar a trabajar porque perdía el tiempo en la escuela. Mis notas no eran las mejores del mundo, así que no era necesario tomarme el tiempo de estudiar. Era la peor de la clase y siempre lo fui, así que no era la gran cosa. Y como dije antes, un cero a la izquierda.

Luego de un rato unas chicas se me acercaron y lo único que pude notar fueron sus delgados cuerpos. Miré hacia una de ellas, la que según yo, era la líder del grupo. —¿Se les ofrece algo?

La chica inmediatamente golpeó la mesa con sus manos haciéndome saltar y recobrar la postura. —¿Cómo lo hiciste, niña nueva?

—¿Qué cosa? —pregunté. Tal vez quiere la tarea de matemáticas. Lamentablemente soy la peor de la clase, así que no la tengo.

—¿Cuál es tu plan? ¡¿Como es posible?! —medio gritó. Se levantó y tocó el puente de la nariz en modo de frustración. Estaba tomándose muy en serio el tema de la tarea.

—Perdona... Pero soy la peor de la clase, y no tengo la tarea de matemáticas. Así que si me disculpas... —me levanté lentamente para salir y evitarlas un momento. Las otras dos chicas me empujaron e hicieron que me volviera a sentar. -
—¡Ey! Más cuidado.

—Se está burlando de ti, Nayeon. —dijo una de ellas. No entendía de que se trataba esto no es porque estaban en contra mía. Ni mucho menos quién era Nayeon.

—Yo que tú, tengo un poco de cuidado. No sabes cuánto hemos estado esperando una oportunidad como la tuya. —dijo la chica. Yo solo me detuve a pensar. ¿Qué rayos está pasando?

—No entiendo de lo que hablan. —dije y solo fui capaz de volver a levantarme, pero ellas volvieron a sentarme en la silla. ¿Es en serio? Lo único que quiero es que dejen de molestarme. Ahora es cuando extraño cuando nadie me hablaba.

—De Renjun, chica nueva. —dijo la que anteriormente me había sentado. Fruncí mi ceño, ¿Renjun? ¿Quién es él? ¿Será posible...? No lo creo.

—Es el hijo del CEO más famoso. —dijo con una cara de ilusión.

—¿JYP? —dije en broma. Ellas rieron con una risa falsa al igual que yo.

El profesor entró a la sala y ellas miraron hacia mí. —No te acerques a él. —dijeron las tres y luego se fueron.

Haber, haber. No entendí. O sea... ¿Quieren que no me acerque al tipo con el que accidentalmente me encerré en la bodega? Que por cierto es muy grosero y para mí parecer es demasiado arrogante. En ese momento no tuve la oportunidad de apreciar a lo que ellas consideraban lo más hermoso en este planeta. Ahora en este momento pasé de ser la más ignorada a la más conocida.

Que maldita mierda.