—Deberías simplemente decirle que si. Si tanto te derrites por él... —escuché decir a Eunwoo a través del teléfono. Eunwoo estaba en lo cierto, debía decirle a Renjun que si quería ser su novia. Aunque lo consideraba un poco temprano aún.
—¿Estás segura? Es decir... —solté un suspiro y me tiré en la cama mirando hacia el techo. —siento que es demasiado pronto.
—¿Pronto? ¡Eso que importa! Se conocen hace más de 6 meses, ¿No crees que ya sea hora de decirle la verdad? “Oh~ Renjun, te he amado todo este tiempo” —dijo Eunwoo imitando mi voz. La cual fue una mala imitación de mí.
—No digas tonterías... —dije mordiéndome las uñas. Que mal hábito he tomado.
—Simplemente dile que sí. Es el mejor consejo que te puedo dar. —dijo. Asumí que ella encogió los hombros apenas dijo esto. Rara amistad que asume este tipo de cosas.
—Espera... ¿Tantos meses han pasado? —pregunté sentándome en la cama. El teléfono vibró en mi oreja diciéndome que tenía nuevos mensajes que responder.
—¿Que es ese sonido? ¿Así suena el amor? Heol, ¿Te está hablando? —dijo en un tono pícaro. Yo simplemente resoplé.
—¿Qué dices...? Tal vez no sea él. —dije. Separé mi oreja del teléfono y observé si era Renjun. Definitivamente era él.
—Es mejor que hables con tu Romeo. Hablamos en otra ocasión. ¡Adiós! —dijo colgando. Observé el teléfono y otra vez volvió a vibrar.
Hola~
¿Con quién hablas?
Estoy fuera de tu casa.
¿No vas a salir?
Me vas a ver forzado a abrir esa ventana. 😡
Tú te lo buscaste.Me levanté rápidamente en el momento que la ventana se abrió. Aún no estaba en pijama, pero Renjun me sorprendió al ver su sonrisa. Me saludó con una mano y se paró justo en frente de dónde estaba para darme un beso en la mejilla.
—Te lo dije. —dijo. La bolsa que tenía en sus manos la dejó a los pies de la cama y luego se tiró encima de esta con ambos brazos atrás. —Traje helado, por si querías.
—¡¿Qué haces aquí?! —medio grité luego de ver su acto. Me aseguré de cerrar la puerta apenas lo vi acostado en mi cama. —Vete.
—Te extrañé. Y te traje un poco de helado. ¿No te gusta el helado? —preguntó. Él se sentó en la cama y sin dejar de sonreír tomó la bolsa en sus manos y comenzó a abrir el tarro de helado. Tomó un poco con su dedos y se lo echó a la boca. —¿Quieres?
—¡No! ¡Vete! —le dije apuntando por donde salió. Él observó la ventana y luego me observó para luego seguir comiendo helado con su dedos. —¡Renjun, vete!
—Nop. —dijo él. Tomó el tarro de helado y se acostó en la cama comiendo helado. Tomé una almohada y lo golpeé para que se moviera y saliera de esta habitación luego. —¿Estas son maneras de tratar a tu futuro novio?
—Futuro nov- Renjun, vete. No quiero que me golpeen con la bota de papá. —dije. Iba a volver a golpearlo con la almohada, pero él me detuvo las muñecas apenas me acerqué.
—No seas grosera. Luego me iré. —dijo luego de ver que me tranquilicé. Asentí soltando la almohada, no sin antes amenazarlo.
—Pero te vas. —dije apuntandolo con el dedo. Él asintió restándole importancia al asunto. Decidí sentarme a su lado y comer helado con el dedo.
—¿No puedes traer una cuchara? —preguntó de repente. Lo observé unos segundos y asentí levantándome de la cama. Al volver, Renjun aún comía helado con su dedo.
—Ten. —le dije no sin antes haber cerrado la puerta. Ambos nos acostamos en la cama y comimos helado durante un rato.
—¿Por qué tú habitación es tan pequeña? —preguntó de repente. Yo me encogí de hombros con la boca llena de helado. —No seas glotona, te lo vas a comer todo.
—Tu lo trajiste para mí, ¿No? —dije quitándole el tarro. Me lo comí todo yo sola dejándole lo último a Renjun.
—Mañana hay escuela. —dijo acomodándose. Yo sentí, lo observé mientras aún estaba sentada. Noté como en la comisura de sus labios aún había helado y tuve la tentación de querer limpiarlo. —¿Qué haces?
—¡Quédate quieto! No te haré nada. —dije. Limpié con mi dedo pulgar su comisura derecha y luego la izquierda. —Listo.
Le sonreí unos segundos en los cuales no me había percatado de la cercanía en la que estábamos. Me limité a observar sus ojos, los cuales estaban fijos en los míos. Esto hizo que el deseo de querer decirle que si a su propuesta se hiciera aún más grande. Era el momento perfecto para hacerlo.
—¿Cómo es posible... —dijo susurrando con su vista aún fija en mí. —que alguien como tú haga latir tan rápido mi corazón?
Resoplé. —Que cursi. —dije riendome por el nerviosismo. Él no rió. Simplemente me observó. —Lo siento.
—¿Qué me has hecho? —preguntó de repente. Esta vez fui la única persona la cual no entendía de que hablaba.
Fruncí el ceño. —¿Qué?
—Me gustas demasiado. —dijo. Renjun me acercó hacia él quedando casi encima de él. Sabía lo que venía ahora y apenas sentí su mano en mi mejilla decidí cerrar mis ojos esperando aquello. Él hizo todo lo contrario, no me besó. Apenas sentí su lengua en mi nariz me alejé de inmediato.
—¡Sucio! —dije limpiando mi nariz. Él me observó mientras reía, yo no pude evitar tomar una almohada y golpearlo hasta que mi energía se acabara.
—Tenias un poco de helado. —dijo antes de que quisiera matarlo con la almohada.
—¡Maldito! —grité. Él aún reía y apenas me cansé de golpearlo, él observó su reloj levantándose de la cama.
—Me tengo que ir. —dijo. Se acercó hacia la ventana por donde entró. ¿Tan pronto se iría?
—Está bien. —dije. Me acerqué hasta él y lo ayudé para que la ventana se mantuviera abierta.
—Adiós. —dijo cuando estuve cerca de él. Renjun me tomó de la cintura acercándome hacia él. Me tomó de las mejillas y me besó en los labios. Un pequeño y corto beso de despedida. Para luego apretar mis mejillas con una sonrisa en la cara.
—Adiós. —le dije cuando ya estuvo fuera. Me despedí agitando la mano y me lanzó un beso con su mano. Lo cual se quedaría en mi memoria.
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Entre dos Bandos |Renjun, Jaehyun (NCT) & Tú|
FanficLa vida de ______ cambió rotundamente en el momento que conoció a Renjun. El hijo de un CEO muy conocido. Renjun es conocido por ser la persona más popular de la escuela y esto hace que en el momento en el que se conocen todo se vuelva patas arriba...