La carta de Jaehyun no me ayudó a recordar. Mi cerebro aún quería mantener en secreto todo, lo cual comencé a odiar. Maldito cerebro. Estaba desesperada por recordar que diantres sucedió hace unos meses y porque no podía recordar. Mi amnesia no era común, lo peor de todo es que nadie me ayudaba a recordar. Solo habían pedazos que no ordenaban el lugar para nada. Y eso sucedió en la escuela, habían recuerdos los cuales no ayudaban en nada y era inútiles totalmente.
Volví mi mirada hacia Renjun que no paraba de observarme. Decidí levantarme y acercarme hacia él. —Hola.
—¿Qué quieres? —preguntó dándole una mordida a unos de los chocolates que me había robado.
—¿Siempre eres así? —pregunté. Me senté a su lado y revisé a mi alrededor. ¿Cómo podía haber un lugar tan tranquilo?
—Si. —dijo sonriendo de lado dejando ver sus dientes cafés por el chocolate.
—Por eso no te puedo recordar. —dije. Le quité el chocolate de las manos y me acomodé poniendo mis pies en su regazo.
—Esto usualmente debería ser al revés. —dijo quitando mis pies de su regazo. —Ten un poco de respeto con tu oppa.
—¿Oppa? —pregunté confundida. —¡No me digas que...!
—Me llamabas oppa todo el tiempo. Qué bueno que dejaras de hacerlo. —dijo mirando sus uñas egocéntricamente.
—¿Yo hacía eso? —pregunté incrédula. Tal vez sea cierto, aunque no podía recordarlo.
—Todos los días, hasta que te fuiste. —confesó. Él hizo un puchero hacia mi dirección y yo tiré de su labio inferior con mis dedos. —¡Auch!
—Mentiroso... —dije luego de soltarlo. Él sonrió y puso su mano detrás de mí en el respaldo. Esto hizo que por instinto mi postura se volviese recta debido a los nervios.
—¿Sucede algo? —preguntó. Yo rápidamente negué con la cabeza y me levanté.
—Olvidé que tengo una tarea pendiente. ¡Nos vemos! —dije huyendo de él, corriendo por el patio. Él no me siguió, lo cual agradecí. Me di la vuelta luego de haber corrido y choqué con una chica.
—______. —dijo ella quejándose.
—Lo siento. —dije rápidamente. Ella negó con la cabeza y sonrió amablemente... Algo anda mal.
—No te preocupes, _______. —dijo ella. Miró hacia su alrededor, tal vez buscando a alguien. —¿Has visto a Renjun?
—Ahm... Si, está en el patio cerca de los cerezos. —dije apuntado a mi espalda. Ella sonrió e hizo una reverencia.
—Nos vemos. —dijo sonriendo amablemente otra vez, lo cual hizo que un recuerdo viniera a mi otra vez. Su sonrisa me era conocida... Shuhua.
—La hipócrita. —dije mirando hacia su dirección. Ella iba corriendo por el patio para ver a Renjun. ¿Cómo es que no la recordé cuando la vi en el hospital? El recuerdo no era más que la vez que me amenazó diciendo que me aleje de Renjun. Hipócrita como siempre.
Me fui al salón de inmediato, pero de pronto le tuve rencor a Renjun. No quería hablarle, aunque ahora no lo vea con Shuhua al igual que antes, ese recuerdo armó un poco del rompecabezas. —Oye, ¿Podemos hablar?
—¿Sobre qué? —preguntó Renjun. Él me observó confuso, debe ser por mí expresión.
—Ven. —le dije tomándolo de la muñeca. Nos llevé hasta un lugar donde Shuhua no nos encontrara, pero mi pensamiento fue opacado por el hecho de que llevaba a Renjun de la mano. ¡Dios! Debo estar roja como tomate.
—¿Sucedió algo? —preguntó cuando me detuve. Lo miré unos segundos y pude sentir como él rencor seguía creciendo. —Tuviste un recuerdo...
—Si. —dije. Estaba más enfadada de lo normal, y lo único que hacía era caminar de un lado a otro esperando a que mi rencor disminuyera, pero aún seguimos viviente. —¿Qué éramos antes de que tuviera amnesia?
—Amigos. —dijo encogiéndose de hombros. Yo me detuve al caminar y lo miré fulminante.
—¿Me puedes explicar el porqué siento tanto rencor hacia ti ahora? —pregunté desesperada. ¿Serán celos lo que siento?
—No lo sé... Dejamos de hablar por un tiempo. —dijo y otra pieza del rompecabezas encajó. Luego de recordar cómo Shuhua le daba la comida a Renjun en la boca, no entendía el porque tenía un recuerdo de una pareja cuando no me importaba, ¡Pero ahora me estoy volviendo loca!
—¿Fue por Shuhua? —pregunté repentinamente. Definitivamente era por Shuhua, y si no lo era, entonces no sé porque sería.
—Tal vez... —dijo sonriendo de lado. De pronto comenzó a reír lo cual me hartó un poco, pero me pareció tierno escuchar su risa.
—¿Qué? —pregunté mirándolo esperando a que dijera algo.
—Estás celosa. —dijo él riendo para luego apretar mis mejillas. —Daebak... ¡Que tierno! Este oppa no te abandonará.
—Déjame. —dije quitando sus manos de mis mejillas. Que hartante.
—No pensé que te gustaba. —dijo Renjun poniéndose serio repentinamente. —¿Recuerdas mi confesión?
—¿Qué confesión? Yo no recuerdo tantas cosas. —dije obvia. De pronto Renjun se acercó a mí y yo retrocedí. —¿Que haces?
—Por favor... Recuerda. —dijo tomando mi cabeza y acercándome a él. Yo miré hacia sus ojos y pude escuchar mi corazón revolotear por su tacto y cercanía.
—Renjun... —dije algo incrédula. Tal vez sabía lo que se venía, pero no quería parecer estúpida.
—No sabes cuánto te extrañé luego de que te fuiste. —dijo Renjun. Sentí su vista repentina en mis labios lo cual hizo que mi nerviosismo creciera rápidamente. Sus manos fueron hasta mis mejillas y lo único que hice fue dejarme llevar por el momento. Me encantaba está sensación, pero me frustraba no recordar los momentos que estuve que Renjun. —Debes recordarme.
Renjun se lamió los labios y se acercó aún más a mí, y esta vez no retrocedí. Quería que me besara para sentir el tacto de sus labios, por eso cerré mis ojos esperando un beso que no fue directo a mis labios, si no en mi frente. —Por más que quiera recordar, es muy díficil.
—Solo tienes que ser paciente. —dijo Renjun separándose de mi dejándome unas ganas intensas de querer besarlo.
—Renjun. —dije llamando su atención luego de que diera unos pasos alejarse. Él se volteó para verme y yo corrí un poco hasta él. —Tu me gustas...
—No debo gustarte. —dijo él poniendo sus manos en mis hombros. —No hasta que recuerdes.
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Entre dos Bandos |Renjun, Jaehyun (NCT) & Tú|
Hayran KurguLa vida de ______ cambió rotundamente en el momento que conoció a Renjun. El hijo de un CEO muy conocido. Renjun es conocido por ser la persona más popular de la escuela y esto hace que en el momento en el que se conocen todo se vuelva patas arriba...