Feliz y decidida Dulce Desastre III

Capitulo 2

Tampoco se compara a ti

Correo de Rose

Para: Megan "Perdona doña gruñona".

Asunto: Rose la descuidada

¡Hola desde Tokio! El tiempo es fantástico. Hace sol pero sin dejar de estar fresco. siempre me quedo dando vueltas para hacer enojar a Eliot en la calle central de Tokio, donde están las pantallas con unos edificios gigantes ya sabes. Tengo una amiga nueva, se llama Dorae, pero no se compara a ti, así que no pongas esa cara que estas poniendo. Te veré en dos semanas ya terminan las vacaciones que aburrido. Me rompí la cabezota con Eliot al rodar por una montaña, el me dijo que era demasiado inclinada, pero no le preste atención, además cuando me lo dijo, ya estaba saltando encima de él y al instante rodando. Me llevo al hospital pero no fue nada grave. Me gustaba el doctor era muy guapo, le sonreía solo para hacer enojar a Eliot. Mi amiga Dorae me miraba con cara de espanto. Tú te hubieras reído por dentro de Eliot, al igual que yo.

Rose.

Correo

Para: Rose "Perdón, para señorita rompe cabezotas".

De: Megan

Asunto: extrañare los chocolates gratis

Hola desde Londres. Me gustaría quedarme en un poco más porque sé que extrañaré la hora del té. Además del chocolate todos los días. También extrañare los autobuses rojos y el acento Europeo. Por eso digo lo mismo de que se acaban las vacaciones, aunque ya extraño a Manhattan y a ti y a Alex. También tengo una amiga nueva que se llama Jackie. Vamos juntas a los conciertos y a algún club. Tampoco se compara a ti así que no hagas esos pucheros que seguro se que estás haciendo. Adiós.

Te quiere Megan.

Las ofertas para dirigir distintas fundaciones estaban sobre la mesa, investigo la procedencia y ocupación de cada una, me tienta la de los niños maltratados pero quisiera intentar por largo plazo con los niños aspie y down. Además, está fundación esta en Manhattan, mi adorada Manhattan me siento lista para volver, todas las personas desagradables que se asomaban en mi camino al estar allí por fortuna se fueron, después del fracaso y secuestro de Josh lo último que supe de él, era que se había ido al condado de Texas. Rose me comento que por medio de Eliot supo que desea una vida tranquila alejado de toda la "basura neoyorquina." que tiene su propia emisora de radio y que se siente bien con ello. ¿Quién lo diría?

Sé que Alex dejo la música y se está dedicando de lleno a su fundación y a las donaciones de varias fundaciones. Además de practicar la ingeniería en su casa con diseño de motores de autos y todo lo que autos de carreras se refiere, aunque hemos hablado algunas veces por correo nunca me he atrevido a preguntarle donde vive ahora, y si algún día volverá a Manhattan.

Las entrevistas han sido todo un éxito, esto de que todas las puertas se te abran de una sola vez te deja sin tiempo para pensar, son tantas las opciones que no sabes cual elegir, pues no quieres equivocarte al decidir.

Después de dos semanas recibía mi apartamento remodelado como nuevo, deje las maletas en la sala y salí corriendo a por un café, me muero por un café de Starbucks, así que cogí un taxi que me llevó al centro, Rose insiste en que ya es hora de que me compre un auto con el dinero del oro de shadam, pero en realidad es que adoro que alguien más maneje por mí.

—¿Megan como estas? Se acabaron las dos semanas, ya debes haber regresado, yo llegue anoche te quiero ver ¿Dónde andas?

—Pues voy camino a Starbucks, se me antoja un café con leche de vainilla francesa, canela y chips de chocolate. Pero sabría mucho mejor si lo acompaño con un brownie y mi mejor amiga.

—Esa oferta suena tentadora así que me convenciste voy para allá —Como siempre Rose hace su entrada logrando que todos en el café volteen sonriendo al verla, siempre adorare a esta chica.

—Meg largo tiempo sin vernos — me da un abrazo eterno hasta que nos interrumpen por nuestro café.

—Siéntate, estas hermosa de verdad Tokio te sentó muy bien.

—Woo puedo decir lo mismo de ti, aunque luces muy sofisticada, los europeos son tan sobrios, pero tu estas de maravilla.

—Me gusta ya sabes, siento que ser conservadora es mi estilo.

—Por cierto alguien ha vuelto a New york una semana antes que nosotras.

Siento que el corazón va a paralizarse en cualquier momento — ¿De quién estás hablando?

—Me ha llamado y me ha preguntado si se de ti.

— ¿Qué? —Mi cara se ha puesto blanca como un papel y me he quedado sin habla, lo sé por la sonrisa burlona en la cara de Rose y sus ojos cerrados formando una fina línea curva.

—Alex Fith ha vuelto y discretamente ha preguntado por ti, me hizo jurarle que le guardaría el secreto, pero vamos, yo no tengo secretos con mi mejor amiga.

—Traidora— le digo mientras pienso, mi corazón palpita a mil por horas pero adoro este sentimiento.

—Prométeme algo— Rose me mira esta vez muy seria— Si Alex te busca de nuevo en plan de conquista, no lo echarás a perder otra vez, promételo.

—Pero Rose... yo.

—Promételo Megan, lo amas, se que aun lo amas, has estado sola por año y medio y el no ha podido olvidarte, me lo dijo, no ha podido amar a nadie más que a ti.

— ¡Eso te dijo! —esta vez pongo ambas manos sobre mi pecho y le sonrió tiernamente a Rose.

—No dejaremos que el miedo vuelva a apartarte de Alex—  Rose me abraza emocionada haciendo que mi mundo gire vamos mis pies, como cuando estábamos en la secundaria.