Capítulo 1: Un nuevo mundo [Parte 1]

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No a lo lejos de la ciudad de E-Rantel se encontraba una aldea partícula llamada Aldea de Ozt. Era un pequeño pueblo con menos de 300 habitantes, que en su mayoría eran hombres y mujeres de mayor edad.

El pueblo no tenía ninguna protección especial, una simple barda hecha con tablones irregulares de madera la rodeaba, la mayoría estaba desgastada y carcomida. Existían pequeñas zonas en donde no se lograba cubrir, dando lugar a pequeños huecos lo suficientemente grandes para que un goblin* adulto pudiera pasar sin ningún problema.

[NT: Si se desconoce que es un Goblin pueden lñeer su breve descripción aquí http://monster.wikia.com/wiki/Goblin]

Los edificios en su mayoría eran casas familiares, diversos graneros, dos almacenes y un edificio del ayuntamiento. Todos en un mal estado, con las vigas rotas y los techos desgastados con agujeros. La situación del pueblo era alarmante, pero era una preocupación más del día a día de los habitantes.

El pueblo no tenía los recursos ni la mano de obra suficiente para reparar estos desgastes. Solo existía un pequeño número de jóvenes arriba de los 15 años para cubrir las labores de reconstrucción, pero estos tenían más prioridad en las tareas del cultivo y del arado. ¿Qué era la incomodidad y la inseguridad comparada con el hambre? Nada, absolutamente nada.

Todos en el pueblo se mantenían enfocados en el campo. La aldea sufría año tras años de duros y excesivos impuestos por parte de los nobles, dejando como promedio un 10% de los recursos recolectados a los habitantes.

La vida era muy dura y cansada. Por si fuera poco el Reino tenía conflictos seguidos con el Imperio de Baharuth, por lo que cada año los jóvenes mayores de 15 años eran alistados al ejército. La mayoría no volvía, y los que si llegaban en situaciones desfavorables. Por esto mismo no habían muchos jóvenes activos en el pueblo.

-Un pueblo ganado.

Suspiro un chico, mientras se levantaba lentamente de la cama. La luz filtrada por las ventanas y el techo había llegado a su cara haciéndolo despertar. Solo traía consigo un pantalón con agujeros en las rodillas, con cortes bruscos en las pantorrillas. Era alto, flaco con la piel morena. Tenía los ojos cafés y el cabello negro. Su nombre era Dave Dorcas, el hijo del jefe de la Aldea de Ozt.

-¿Dónde vas? ¿Te marchas temprano hoy?

Una voz resoplo tras los movimientos bruscos que hacia Dave al levantarse, era su recién esposa Amelia.

-Desearía quedarme más tiempo con usted bella dama, pero mi deber en el campo empieza temprano, debo ayudar a mi padre en lo que pueda y seguir con mi investigación.

-Ya veo, si no hay más que hacer déjame que te acompañe.

Aquella voz empezó a levantarse, su débil cuerpo se apoyaba con mucho esfuerzo de la cama, sus manos pálidas tomaban las sabanas alejándolas para descubrir su cuerpo. Amelia de tener una vida diferente seria hermosa, con el cuerpo esbelto pero proporcionado, la piel suave y blanca, con ojos azules como el cielo, y la cabellera dorada. Era la joven más hermosa de la aldea, su sonrisa no tenía igual. Pero estaba enferma, una extraña enfermedad le había afectado de niña dejándole débil por el resto de su vida. Los pocos doctores que le habían atendido siempre decían lo mismo "En cualquier momento podría dejarnos, no es de esperar que hoy sea su ultimo sueño".

-No, no por favor.

Replico inmediato Dave, acostándola con sumo cuidado de nuevo en la cama. Ella no se opuso, ni tenía la energía suficiente para hacerlo, solo vio a Dave con enojo, con un suave enojo.

-Déjame ir, quiero ayudarte como me ayudas a mí. Ya no puedo dejarte todo el trabajo... No es justo...

-Joh~ Pero si es el deber de un caballero es manchar las manos por su princesa.

The Gods Slimes: Elder Black OozeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora