Cap.9.

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Durante todo el fin de semana el lindo Omega intentó llamar al Alfa pero éste simplemente ignoraba sus mensajes o llamadas.

El Omega se puso aun más triste cuando el lunes en la mañana no recibió ningún mensaje del Alfa, ni para decirle si pasaría por él o no.

"Tal vez esta enfermó"... se auto dijo mientras lanzaba un largo y pesado suspiro, así que como acostumbraba todos los días, antes de conocer a Jeon, salió de su departamento y camino hasta la parada del bus.

Al tomar asiento en el bus, saco su móvil con la esperanza de leer un lo siento, no pude pasar a recogerte, estoy enfermó. Te extraño.

Pero nuevamente se llevó una decepción al no ver nada.

(...)

Durante toda la clase NamJoon simplemente no podía centrar su atención, estaba perdido, su lobo extrañaba a Jeon quería sentír el aroma del Alfa y estar cerca de él.

El timbre de salida tocó obligándolo al Omega a levantarse de su asiento.
Observo con tristeza la hoja de su cuaderno antes de cerrarlo, estaba completamente rayoneado por doquier con apuntes incompletos y desordenados, subió su mirada y observo con detenimiento por la ventana que daba hacia el estacionamiento, siempre veía el automóvil de Jeon a la hora de salida, pero hoy no, el Alfa no estaba, cerró sus ojos con pesadez ¿Dónde estaba el Alfa? ¿A caso pasó algo grave... Como un accidente...?

No, no podía pensar en ello, no vio nada en las noticias, así que tal vez Jeon solo estaba enfermó, si... Tenía que ser eso. Nuevamente reviso su celular y no encontró mensaje alguno, ingreso al chat y observo la pantalla, Jeon había cambiado su foto de perfil, y se encontraba conectado, su mirada se cristalizó por las lágrimas que exigían salir, a Jeon no le había pasado nada, ni siquiera estaba enfermo, simplemente lo estaba ignorando, pequeñas lagrimitas recorrieron sus mejillas.

El Alfa estaba molestó con él y él no sabía cómo solucionarlo... Si tan solo Jeon respondería sus mensajes..

—NamNam... —llamo y NamJoon giró su mirada al Alfa pálido.

—YoonGi-Hyung... —menciono mientras bajaba su cabeza y dirigía su mano para limpiar el rastro de las lágrimas en su mejilla.

—¿Estás bien...?—pregunto observando como el Omega guardaba sus cuadernos.

—Si... —Sonrió con pesadez.

—No te creo... —musitó cruzando sus brazos, había visto con claridad las lágrimas del Omega y como si fuera poco sintió como el aroma de Nam se amargo lentamente, eso no era estar bien —... Haz estado en Jeonlandia toda la clase... Y me dices que todo está bien... nunca antes te había visto tan perdido...

—Y-yo... —bajo su cabeza, no sabía si era conveniente contar a YoonGi lo que estaba pasando con JungKook o era mejor que él solucione sus problemas pero en ese mismo momento el Omega no sabía qué hacer, solo quería sentir los cálidos abrazos de Jeon, el aroma tan sutil y potente que tranquilizaba a su lobo interno.

—Vamos cuéntame, te conozco desde hace cuatro largo... años... NamNam se casi todo de ti... —Sonrió suavemente al recordar los pequeños saltitos que da el Omega, cuando está emocionado, se le era tan tierno ver aquellos pequeños momentos que se resistía enormemente a saltar y abrazar al Omega —¿Qué te parece si vamos por un café?

—Hyung... —murmuro.

—Como... Veo que Jeon no vino por ti...no puedes negarte ¿sí?

— Hyung... Pero yo... No...

—Nada de Hyung... Vamos... Camina...—dijo y empezó a halar a NamJoon por el brazo, mientras se dirigía a la salida.

(...)

Todo Por Una Apuesta "KookNam"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora