Woman.

Capitulo 14

Mis ojos no daban crédito a lo que veía, estaba entre sorprendido y shockeado. ¿Lucy acaba de partir una mesa a la mitad?

Sentí mis piernas flaquear y muchas cosas tomaron sentido. En la pelea Lucy pudo detener mi ataque y lanzarme con facilidad fuera por su fruerza, Lucy pudo detener mi puño y el de Gray con ambas manos sin mucho esfuerzo. ¿Que clase de mujer era ella?

Wendy me jalo dentro de la habitación y cerró la puerta tras de ella. Miro nervioso y veo a Lucy sentada en su silla mirando con molestia la mesa.

- ¿Cuánto has visto? - Inquiere Wendy cruzada de brazos.

- A-ah... Lucy, mesa...-Mis manos empezaron a sudar. Y empecé a balbucear.

- Siéntate Natsu. - ordenó Lucy, sin dudarlo y temblando me sente. - Te voy a contar algo que jamás le he contado a Nadie. Únicamente Wendy sabe el porqué de todo esto y de lo que acabas de ver.

Sus ojos destellaron con frialdad, se cruzo de piernas y sentí mi cuerpo helarse ¿Tan malo era lo que me iba a decir?.

- Pero primero, necesitamos un lugar seguro. Wendy, duermelo. - El dolor se centro en mi cuello cuando Wendy me inyectó algo en el cuello que he hizo caer en un profundo sueño.

Acaricio con delicadeza su vientre, acariciando sus cicatrices con suma delicadeza, besando cada una de ellas.

- Natsu... - Murmuró mi nombre en un largo y placentero suspiro.

Subo a sus labios y los saboreo con delicadeza, sin dejar de mimar su cuerpo que reaccionaba a mi toque.

- Ya no lo soporto más - Hablo con voz ronca recostando mi frente en su cuello, besando su clavícula y mordisqueando ahí.

- Natsu.... - Sus manos acariciaron mis cabellos y los revolvió. Con sus piernas se enrosca en mi cadera sacándome un gruñido - Hazme tuya... ¿Si? - Su forma tan sutil, tan normal de pedirlo, fue la gota que rebalsó el vaso.

Arranco mi bóxer a la fuerza y quemo sus bragas sin quemarla a ella. Me adentro en ella con delicadeza y ella suelta un estruendoso gemido.

Sujeto su mano que aún tenía pequeñas cicatrices de quemaduras y entre lazo nuestros dedos besando su mano empezando un vaivén suave pero profundo.

- Ah, N-natsu! -

Una cachetada me despierta. Miro a todos lados despavorido sin saber donde estaba, mis manos estaban atadas gentilmente contra un mástil y yo estaba sentado en el suelo con algunas mantas.

Logró enfocar a Wendy y esta me sonríe algo apenada - Lamento esto... Pero tenemos que ver si eres de confianza o no... -

El taconear característico de Lucy me alertó, mi cuerpo se congela al verla con un vestido ajustado color rosa con apertura entre los senos y las piernas, ella se sienta frente con mi cruzando sus piernas.

- Lamento que me tengas que ver así, pero a no de llegar de una subasta - Avisa. - Bien.. Empezamos el interrogatorio.