Agradecimientos

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A mis ángeles del cielo, Domingo, Hilda y Maritza Ojeda, grandes luchadores en la vida.

A mis padres, Carmen Ojeda y Victor Torres y a mi hermana Irene Torres que son mi fuerza y  pilar.

A mi profesora Lidia Carlis Venegas quien me enseñó sobre todo que siempre se debe luchar y nunca rendirse o dejar de soñar.

A mi amiga Cecilia Díaz Ávila, mujer luchadora, una gran amiga que me ha brindado todo su apoyo cuando más lo he necesitado. Una escritora talentosa además. 

A mi otra querida amiga Eugenia Maradona, que también me ha brindado su apoyo siempre y, en especial con esta obra. Brillante escritora. 

A Ginger Vermar, mi mentora cuya ayuda fue invaluable en la edición de esta novela.

Y por último, pero no menos importante, a mi mejor amiga, Victoria Echeverría quien muchas veces fue mi pilar en momentos difíciles. 

Detrás del Telón.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora