Change 31. Dones y Hechizos

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Con veloces saltos, Jun había llegado frente a la jaula que había donado para los padres de Mingyu, ahora no había nada, no había ni un solo árbol en ese lugar, era como si hubiera sucedido una explosión, alterado miro a su alrededor buscando aquella presencia molesta para él, pero no había absolutamente nada, Mingyu andaba suelto, alguien lo había liberado, o el mismo lo había hecho, sitio un gran hueco en su estómago al pensar que Mingyu ahora había desarrollado sus dones, rápidamente pensó en Wonwoo, en cómo había salido disparado con aquella mordida que le hizo, era por eso que lo había liberado? ¿Había encendido la furia de un alfa supremo? Pensó mientras comenzaba a correr devuelta con los padres de Mingyu.

-que?!!! ¿¡Que estás diciendo!?!!-

-no está, no hay nada! No sé qué paso-

-no lo sabes? ¿Tú no lo sabes? Podrás tener los siglos que tengas, ¡pero sigues siendo un niño! Eres un maldito mocoso que no sabe nada de esto, como pensé que un simple alfa como tu podría hacerse cargo del alfa supremo, ¡me equivoqué! - regañaba el padre de Mingyu.

-me merezco que me hablen así, pero no merezco esas groserías, no soy yo quien vendió al hijito prodigo, no fui yo quien acudió de rodillas al consejo para que lo matemos, pero sobre todo no soy yo la persona que ruega por un puesto dentro de consejo a cambio de la vida de su hijo-

-cállate! - la madre de Mingyu le dejo una cachetada a Jun al comenzar a notar que la culpa era de ellos mismos, de su propia ambición.

-Mingyu se escapó porque no tiene a nadie! ¡Porque está vacío! ¡Es una simple bestia con ganas de matar! ¡Si sus padres no fueran la clase de patraña que son todo estaría bien!, salgan a buscarlo, pero déjenme decir, que, si lo encuentro, le diré primero que sus padres no son más que engendradores, porque ¿padres? ¿Alguna vez cuidaron de él? ¡Jamás! ...y otra cosa, si lo encuentro y se atreve a destruir todo por lo que me he esforzado este tiempo, seré yo quien lo despedace a él! ¡Y a ustedes también! -

Una vez que Jun se fue de la casa de los padres de Mingyu estos salieron corriendo hacia la casa de Seungcheol, para ellos habían dos respuestas, si Mingyu había escapado había corrido hacia ellos sin dudarlo, y la otra opción era, ellos lo habían liberado. Decidieron tranquilizarse para ir simplemente a visitarlos sin levantar sospechas.

-crees que este aquí? - dijo el padre.

-no siento nada...no sé, no estoy segura...y si lo tienen aquí no lo van a decir-

-podremos ser los padres sufridos otra vez...-

-eso siempre funciona- dejándole un beso en los labios a la mujer ambos tocaron al timbre de la entrada del gran residencial. La voz nerviosa de Seungkwan atendió.

-si? -

-somos los padres de Mingyu, podemos pasar? -

-oh...ahhh...ahora voy- los padres esperaron pacientes, la casa era ridículamente grande que llegar a la entrada les tomaría algo de tiempo, no esperaban a más de una persona, pero junto a Seungkwan iba su inseparable Hansol con un rostro de pocos amigos, y con ellos Jeonghan. A la madre de Mingyu no le agradaba Jeonghan, sabía que era un engañador, sus dones eran de juego, podría desaparecer personas con solo pensarlo, podía hacer cambiar de opinión a la gente, borrar rastros, eso no era justo. Y sobre todos sabía que, si habían hecho algo malo, Jeonghan se encargaría de encubrirlo.

-que sorpresa! - saludo entusiasmado.

-hola-

-a que debemos su visita-

-no es un buen momento? - dijo el hombre insinuando algo, pero Jeonghan lo miro confuso.

-no claro que no, siempre es un buen momento, pasen, pasen-

-y Jihoon? Seungcheol? - preguntaba la madre mirado a su alrededor en busca de alguna señal.

-han salido hace un rato, bajaron a la cuidad para hacer compras, ya saben cosas de betas-

-ohh ya...la casa está muy sola no? Siempre están todos los muchachos- al llegar a la sala Seungkwan y Hansol recogían los juguetes de Dino.

-si? pues considerando que el único bebe es Dino, no me parce raro que no haya nadie, todos tienen cosas que hacer, tomen asiento, Kwanie cariño, trae algo de beber para los invitados. Tomando la mano de Hansol salieron de la sala para la cocina.

-algo no me agrada, pensé que vendrían imponiendo, y exigiendo a Mingyu-

-yo también pensé eso Vernonie...algo anda mal-

-crees que hayan notado que están todos abajo luchan por ocultarlo?-

-no lo sé...espero que Jeonghan sepa que hace...-

-nos sentimos muy solos, la verdad, extraño mucho a Mingyu, no sé si ya podamos sacarlo de ese lugar, me pone muy mal saber que no puedo hacer hada para ayudar a mi hijo-

-entiendo...-

-saben algo de Wonwoo? -

-no, nada, cada día es el mismo, los chicos andan tristes por ahí pensando en que día volveremos a verlo, el tiempo ha pasado muy bien, sin problemas, probablemente el enlace ya se haya desvanecido-

-tú crees? -

-sí, ellos si tenían una relación cercana, pero, no estuvieron mucho tiempo juntos, eso ayudo también...- Joshua desde el sótano pudo sentir algo hostil dentro de los padres de Mingyu, percató a todos junto a él, y a Jeonghan.

-algo anda mal...- escucho Jeonghan dentro de su cabeza. - sus padres están pensando muchas cosas, intentan rastrear a Mingyu...no tienen buenas intenciones-

-que hago...- respondía Jeonghan sin decir palabra alguna de los labios.

-haz que digan la verdad. - Joshua rompió la conexión mental con Jeonghan para concentrar sus fuerzas en contener a Mingyu.

-Wonwoo...- susurro este encontrándose en un campo de fuerza proyectado por Seungcheol, Joshua, Seokmin, Hoshi y Jihoon.

-pronto iremos por el...-

-el...-

-coopera por nosotros y te prometo que iremos por el ya mismo, tus padres han venido a buscar...debemos mantenerte aquí, por favor, ayúdanos...si te encuentran no sé qué es lo que te hagan- en el segundo piso, Jeonghan pensaba que hacer para distraer a los padres de Mingyu sin perderlos de vista, en cuando Seungkwan volvió con un par de tazas de té y Hansol con bocadillos, Jeonghan miro a Hansol, son sus ojos apunto a las tazas y a los padres de Mingyu. Lento, confundido, pero logro captar el mensaje. Debían volver a hacer esas bebidas, sabía que Seungkwan era descuidado, pero justo ahora estaban frente a todos, discretamente bajo su mano hacia el prominente trasero del otro y lo apretó divertidamente, Seungkwan salto del susto dejando caer as bebidas y gritando.

-qué pasa? - dijo la mujer.

-na-nada, vi, un insecto en el suelo, un insecto, lo siento iré a traer más-

-lo siento, mi Seungkwanie es un poquito torpe-

-él es tu hijo? - dijo el hombre.

-sí, es un poco confuso, pero si-

-tiene los mismos dones que tú? -

-casi, aun no los desarrolla del todo pero será poderoso algún día- los padres de Mingyu se miraron entre ellos, el ambiente se ponía tenso, era la hora de la verdad; dentro de la cocina, Seungkwan preparaba más te regañando a Hansol quien solo reía de él y lo besaba en las mejillas en ocasiones para disculparse, le explico porque lo hizo y el mismo Seungkwan coloco un hechizo en las bebidas, rogo por que funcionara, sus dones eran muy leves, pero se sentía confiado, solo quería ayudar.

-alguien pidió dos hechizos de la verdad- susurró Hansol antes de salir de la cocina.

-no sé si funcione-

-lo hará, lo has hecho tú, eres el mejor- besando sus labios de forma corta regresaron a la sala.

CHANGETHINGSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora