|| 05 || Don't say anything

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-Pov Yun-

Después de decir esas palabras y que me quedase congelada, se marchó sin decir nada. Empecé a llorar sin motivo, por el estrés que tenía acumulado y en parte la ira. Me dejaron allí toda la noche, sentada en la silla, sin manta, sin nada, todo oscuro y con las cuerdas haciéndome pequeñas rozaduras que yo notaba sin vérmelas. No podía parar de pensar en qué estarían pensando Hye y estos, supongo que estarían preocupados, a lo que hacía que yo estuviera mucho más preocupada.

No sabía que hora era, pero seguía pensando, tenía pánico de volver a dormirme y que despertase en algún otro sitio de estos. De repente pensé en el móvil, miré mi bolsillo pero no lo tenía. Empecé a revisar la sala con la mirada, ya que no podía moverme, y vi algo que parecía un móvil, supuse que sería el mio, pero al intentar moverme me dí cuenta de que la silla estaba clavada al suelo y que no podía moverme de sitio.

∞∞∞∞∞

Al final me acabé durmiendo mientras pensaba, me desperté y pude ver un poco de luz a través de una ventana rara que estaba situada en el techo. Noté que mis manos ya no estaban amarradas, y estaba en lo cierto, y delante tenía un mísero trozo de pan con un vaso de agua que parecía que lo hubiesen sacado de el pantano de mi pueblo.

Noté que la puerta se volvía a abrir, con el chirrido que hacía, y por lo que escuché era más de una persona.

- ¿Y ahora qué quieres hacer con ella? -

- No se, podríamos pedir dinero por ella o algo por el estilo. -

En ese momento se volvió a abrir la puerta, alguien susurró algo y noté que varias personas se acercaban a mi rápidamente. De repente noté un pinchazo en mi brazo izquierdo y me empecé a dormir, hasta que caí rendida.

-Narrador omnisciente-

-¿¡Pero qu-?¡ - Gritó un chico que acababa de entrar. - ¿¡Que coño hacéis secuestrando a est-.. una chica?¡ -

-Tío, ¿No te acuerdas? Es la novia del tipo ese. - Contestó otro riendo victoriosamente. - Que se joda, era un pardillo. Con nosotros no se mete. -

- Ella no es. - Dijo mirando fijamente al que le había contestado. - Y ni que fuera ella, estáis putamente locos. Yo no quiero saber nada de esto, os las arregláis vosotros. -

-Pero jefe... tu nos digistes que la secuestrásemos... - Dijo uno confuso. -

-¡¿Q-Qué?¡ ¿Yo? -

-S-si... A lo mejor ibas borracho pero nos amenazaste con mat- -

Sin decir nada se fue, pensando que era imposible que el hubiera pedido algo así, era surrealista.

-Pov Yun-

Desperté y el sol ya se había ido, había estado sedada unas cuantas horas, y volvía a tener un trozo de pan con la asquerosa agua. Me dolía el brazo, recordé con la fuerza que me habían clavado la aguja con el supuesto sedante, que fue lo que hizo que me durmiera.

Empecé a llorar, otra vez, estar amarrada todo el día hacía que me volviera loca.

∞∞∞∞∞

Pasó una semana y solo me sedaban, me dormía, comía pan y los últimos días me desmayaba por la falta de alimentos. Hasta que alguien entró en la sala sin clavarme un sedante para que no escuchase nada. En ese momento lloraba, lloraba por la simple razón que no sabía por qué estaba allí encerrada, no tenía novio, ni historias de esas, y no me dejaban hablar tampoco, ya que ya me había caído algún que otro golpe por contestar mal o simplemente por hablar. Nunca les vi la cara, cuando se ponían frente a mi, se tapaban con un buff raro y con gorro, solo podía ver los ojos de algunos, porque otros llevaban siempre gafas.

-Te sacaré de aquí. - Susurró mientras me quitaba las cuerdas con las que estaba atada lentamente. Iba todo tapado, no se le veía ni el cuello. - Solo te pido que no grites ni digas nada. - Asentí, noté que estaba ya desatada y me levanté. Casi no podía sostenerme de lo débil que estaba, pero tenía que salir de ese infierno. -

Me cogió de la mano y me iba llevando por pasillos extraños, parecía una casa bastante grande. Descubrí que el sitio donde me habían dejado había sido en el sótano. De repente, ya casi fuera, me metió en una extraña habitación y se sentó. Me esperaba lo peor, abrí los ojos lagrimosos que tenía mientras me tiraba para atrás, pero no se movió.

Empezó a quitarse el gorro, el buff y las gafas, y descubrí quién era.

-¿N-Nam- -Dije sorprendida, no me creía que él estuviera en todo este desmadre. -

-Calla, no digas nada. - Me dijo tajante. - P-Por favor... - Dijo un poco más tranquilo al ver que mi mirada era de terror. - Te sacaré de aquí, pero me tienes que prometer algo. -

-¿E-El qué? - Pregunté secándome las lagrimas. -

-No vas a llamar a la policía, no le vas a decir a nadie lo que te ha pasado, ni vas a decir que este momento ha pasado. - Dijo mirándome fijamente a los ojos. No igual que la otra vez, la primera vez que lo vi, sino mucho más serio. -

-¿Estás de coña, verdad? - Dije con una risa sarcástica - Te crees que voy a callarme lo que me habéis puto hecho? ¿Te parece bien tener a una tipa indefensa atada a una silla una semana, solo comiendo trozos de pan minúsculos y agua de estanco?! - Dije medio chillando. -

-No chilles. - Contestó - Si no haces eso, no podré sacarte de aquí. -

-¿Y qué quieres que haga, me callo? -

- S-si... -

- ... - Opté por no decir nada. -

Después de eso suspiró, me cogió con fuerza de la muñeca y me guió hasta la puerta. Se giró hacia mi, puso sus manos en mis hombros y me dijo.

-Siento lo que pasó, por favor, no digas nada, te lo compensaré en cuanto pueda... - Dijo medio suplicando. -

Lo único que hacía era llorar. No sabía cómo reaccionar; si bien porque me había sacado de ese sitio, o mal porque el estaba en todo ese pollo, aunque no lo conociese. Si lo pienso, casi no nos conocíamos y no se por qué se atrevió a sacarme de allí.

No tenía el móvil, estaba en esa casa, y pasaba mucho de regresar, a si que vi que tenía unos cuantos wons a lo que pude coger un taxi hasta la casa de Jin. Había pasado una semana, no sabía si la policía me estaría buscando o algo parecido, pero eso ahora no me importaba.

Al llegar a casa de Jin, vi que la puerta estaba abierta y que se escuchaban bastantes voces hablar y reír. No piqué, solo abrí, pasé al salón, vi que estaban todos. Al verme se quedaron todos callados y caí rendida al suelo.

-¿¡Yun?!! - Gritó Mi. -

ᴀʟᴡᴀʏs » ᴋɪᴍ ɴᴀᴍᴊᴏᴏɴ [PAUSADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora