Akira se convirtió en el chico más popular de la academia muy rápidamente, era atractivo, fuerte, hábil y varonil. Las chicas menores y mayores se rendían ante los encantos del chico nuevo y fuerte; Kazuma por su parte, no lo hacía nada de mal, aunque menos popular que su hermano mayor tenía también su propio grupo de seguidoras, y es que sus profundos ojos azul mar no dejaban indiferente a las chicas. Aika por su parte, no se llevaba muy bien con las chicas, nunca se le daba bien relacionarse con otras mujeres y prefería la compañía de chicos con los cuales ser ella misma; pero los hombres de la clase avanzada habían caído rendidos a sus encantos desde el primer día, su largo y sedoso cabello rojo, sus ojos color ámbar, sus prominentes pechos que destacaban bajo su escote y la bonita figura que había heredado de su madre. Era una mujer atractiva a los ojos, todo un espectáculo a la vista y por ello comenzó a recibir declaraciones desde el primer día, aunque ella los rechazaba con cordialidad a todos, sabía que lo que veían en ella era solo su cuerpo, un bonito par de pechos y un lindo trasero, nada más. Nunca le gustó destacar, odiaba ser el centro de atención de nada. Pero más aún odiaba a los hombres que la miraban con deseo y la trataban como un objeto pensando que sería fácil conquistarla, lo veía en sus ojos cuando la miraban y ella solo quería que la vieran por quien era, más allá de lo que su cuerpo pudiese demostrar. Por ello pasaba todo su tiempo con su hermano mayor y Kazuma, esto hizo que las chicas "enamoradas" de su hermano la odiasen y la viesen como una posible rival; ella no entendía eso, solo eran hermanos, aunque era cierto que Akira solo le hablaba y le prestaba atención a ella, además de hablar con algunos chicos de la academia. Más aún la odiaron cuando los otros hombres de la clase comenzaron a declarársele, se había ganado el odio de su propio género sin merecerlo. Eso no le importaba, contaba con Akira y con Kazuma, aunque fuera molesto con ella era su hermano y lo quería, siempre podría contar con él.
Como siempre Akira era el mejor en todo, rápidamente fue el mejor de la clase, su nivel estaba muy por sobre los otros alumnos. Fue elogiado y promovido rápidamente, el propio kazekage había ido a observar su entrenamiento un par de veces y se reunía con sus maestros para que les informase sus avances. Solo bastaron algunas semanas para que se convirtiera en genin con honores, se le envió al servicio del kazekage en la torre del centro de la aldea, allí donde estaba el centro de mando de la aldea.
Aika y Kazuma se quedaron más tiempo, eran catalogados por sus maestros como impulsivos, derrochadores de chakra, poco dispuestos a seguir las reglas y las instrucciones. Así que su hermano mayor fue el único en ser promovido, mientras ellos deberían quedarse a aprender a ser mejores ninjas en la academia. Desde que Akira había sido promovido el Kazekage ya no iba tan seguido a la academia, de vez en cuando se pasaba por ahí y las chicas se volvían unas histéricas hormonales revoloteando alrededor de él, era el kazekage de la arena, el ninja más fuerte de su país, uno de los más fuertes del mundo, era guapo, con un cuerpo atractivo y confiable; un prospecto ideal para muchas. Pero al igual que los chicos con ella, muchas sentían atracción vacía hacia él, solo les interesaba la cara de chico guapo y él titulo de kazekage. Ese día Gaara apareció en la academia para presenciar combates de entrenamiento, a Aika le tocó luchar con una chica debilucha en la primera ronda, la acabó rápidamente, casi de manera humillante; en la segunda ronda le tocó luchar con un chico de una fuerza nada despreciable, uno de esos que la miraban pero nunca se atrevían a hablarle, esta vez la victoria no fue inmediata, pero terminó por ganarle sin necesidad de ponerse realmente seria.
Cuando hubieron terminado los combates quedaban 4 ganadores, ella, Kazuma y dos chicos más. Así que aún le quedaba un rival más por detener, al igual que ella eran alumnos de clase avanzada, aunque a Aika nunca le parecieron realmente fuertes. El último rival de ese día era un chico de cabello negro y ojos café claro; era bien parecido y usaba un arma muy pesada, un mazo enorme con el que partía la tierra y provocaba temblores en el suelo, su elemento dominante era la tierra y el rayo. Aika dominó la pelea casi en su totalidad, subestimaba a su oponente y no se esforzaba más de lo normal; esto fue un error fatal para ella, pues sin esperárselo, el chico la atrapó entre dos grandes paredes de roca y luego le acertó un ataque de rayo que la hizo caer de rodillas cuando la prision de roca la liberó; antes de ponerse de pie el chico le dio un certero golpe detrás de su nuca y cayó desmayada en brazos de su rival. Gaara miraba atentamente el combate, apretaba sus manos sobre él barandal del balcón desde donde observaba; cuando ella cayó desmayada le hizo una señal a Kankuro para que fuera por ella, este obedeció enseguida y la tomó en sus brazos con destreza para luego dirigirse a donde estaba esperando Gaara.
—Llévala a la enfermería, iré en cuanto termine la última pelea— le dijo a su hermano sin mirarlo, en cambio dirigió una mirada preocupada al cuerpo dormido de Aika.
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Abrió los ojos lentamente, la luz de la enfermería era cegadora y se sentía mareada, trató de incorporarse en la cama pero su equilibrio estaba totalmente alterado y no pudo hacer mucho, casi cayó de la cama si no fuese porque unos brazos fuertes la sujetaron.
—Debes tener cuidado, ese ataque afectó tu oído y gracias a ello a tu equilibrio— Kankuro le sonrió amable mientras le sostenía de los brazos.
—Estoy bien, solo algo desorientada— Aika se apoyó en la camilla y le agradeció con una sonrisa. Entonces Kankuro la soltó lentamente para que se apoyara por su cuenta. —Ese chico es fuerte— finalizó con ironía.
—Ganó los combates— Gaara apareció por la puerta de la enfermería y cerró la puerta tras él.
Aika estaba sorprendida, el kazekage la había ido a visitar a la enfermería, se veía guapísimo como siempre y como cada vez que la miraba o le hablaba ella se sentía avergonzada.
—Ya está mejor?— le preguntó Gaara a su hermano.
—La han revisado y no tiene nada grave, su equilibrio se vio alterado por el golpe pero nada más — le respondió Kankuro con tranquilidad.
—Bien. Si te sientes mejor me gustaría hablar contigo a solas— la miró seriamente a los ojos y pidió a su hermano que se retirara.
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Sand & Fire- Gaara [Naruto]
FanfictionAika es una kunoichi perteneciente a un antiguo clan que se decía descendía de los dioses, junto a su hermano gemelo Akira y su hermano menor Kazuma, buscan las respuestas de sus orígenes y los de sus padres, tratando de encontrar así un lugar donde...