¡Es Mio, Perra!

6.

Wade

Pasaron días desde la ultima vez que vi a Ambar por los pasillos del instituto, algunos decían que la expulsaron pero sus amigos tampoco venían, ¿Por que? No tengo idea. Los hermanos Stone volvieron, han estado persiguiéndome cada día, hasta hoy.

Hoy es viernes, así que cuando suena la campana que significa que la salida ha llegado, recojo mis cosas y salgo corriendo de la clase, apuro mis pasos cuando me doy cuenta que Katherine y Maximiliano estaban Justo atrás mío, ambos son muy hábiles pero supongo que, Luke y Spencer pueden llegar a superarlos.

- ¡Wade, detente!

De lejos, pude ver un par de autos estacionados en la otra calle, mire sobre mi hombro, ambos seguían persiguiéndome, uno de los autos bajo su ventanilla dejándome ver la cara de Summer sonriéndome como el gato de Alicia en el país de las maravillas. Summer abrió la puerta trasera, mientras seguía sonriéndome de una manera espeluznante, mire de nuevo sobre mi hombro, comprobando que ambos hermanos seguían pisando mis talones.

Así que corrí, corrí hasta llegar a aquel auto donde se encontraba Summer, entre al auto. Mire hacia atrás, Los mellizos estaban discutiendo, parecía que se estaban gritando, alce una ceja con desconcierto.

Me fijé en tres cosas.

Primero: Summer y yo no éramos los únicos en el auto.

Segundo: Nathaniel, Luke, Summer e Ambar estaban en el auto.

Tercero: Ambar estaba justo a mi lado.

Mi respiración se aceleró al darme cuenta de lo que estaba pasando, aunque en su totalidad, aún no tenía idea de por qué estaba aquí. Ambar estaba recostada por el asiento, sus manos estaban juntas, y sus ojos estaban cerrados pero no estaba dormida, todo lo contrario, ella estaba despierta, ella podía escuchar mi respiración acelerada en este momento, ¿Como sé aquello? Su respiración no era normal, al quedarse dormido o dormida la respiración se vuelve más lenta o calmada, en algunos casos se vuelve extremadamente rápida, ese caso sería que estén teniendo un sueño húmedo.

- Vaya, que silencio. Oh, Hola Wade, ¿Que tal, viejo?

Y ahí estaba Luke, él estaba conduciendo, en el asiento de copiloto estaba Summer y a un lado de Ambar estaba Nathaniel. Quise reír, pero no lo hice, a veces quiero soltar alguna risa en los momentos incómodos o serios pero no sabia que momento era este.

- Hola Luke.

- Oye, no es por nada pero, ¿De quien estabas huyendo?

Y ahí estaba Nathaniel, Summer giró su cabeza, mirándome sobre su hombro con una ceja alzada, o eso creí, hasta que me di cuenta de que no me miraba a mi si no a Ambar quien despertó al oír aquella ultima palabra que había dicho Nathaniel.

- No estaba huyendo de nadie.

- No nos mientas Wade. -Ambar habló- ¿Somos amigos, no?

Amistad. Eso era lo de menos para mi en estos momentos, solo tenia un verdadero amigo en estos momentos y ese amigo era Alex. Así que, no creo que Ambar y yo seamos amigos, tal ve conocidos o simplemente dos personas que quieren empezar una amistad lejana. O algo más.

- En algunos momentos.

- ¿Disculpa? - Ambar frunció el ceño, se sentó adecuadamente en su asiento y se cruzó de brazos, bien, creo que de debo ser totalmente sincero.

Me gusta la sinceridad.

- Creo que no somos amigos, creo que solamente somos conocidos o tal vez solamente seamos dos personas que quieren conocerse para así tener una buena amistad, pero Ambar, tu y yo no somos amigos. -Suspire- No espero que te lo tomes personal, me caes bien, en algunos momentos y respondiendo a tu pregunta: Si, estaba huyendo de Katherine y Maximiliano.

- Tienes razón. - Habló Luke, luego miro a Ambar quien estaba con la mirada hacia el suelo del auto - El tiene razón Ambar, solamente hay que darle un poco de espacio y nos conoceremos mejor en algún momento.

- Es estupido e insignificante. - Fueron las palabras que salieron de la boca de Ambar, quien ahora, cambió de lugar con Nathaniel, poniéndome en una situación incómoda.

- ¿De que estás hablando?

- Estoy hablando de que, nos conocemos hace casi un mes, conociste muchas partes de mi que solamente conocen mis amigos, básicamente te deje entrar a nuestro lugar. ¿Y después de todo este tiempo, no somos amigos? Mira, no sé por qué estabas huyendo de los Mellizos, pero estuve apunto de ayudarte a solucionar aquello.

- Ambar, no lo tomes de esa manera, te prometo que en algún momento tendremos mucha confianza y podremos ser dos mejores amigos como..

- Para el auto Luke. -ordenó Ambar, Luke obedeció sin decir una sola palabra- Tu solo tenías que decir unas simples palabras y todo iba a estar perfecto. Pero Luke tenía razón, supongo que algunas cosas que salieron de tu patética boca eran coherente.

- ¿Lo ves? Un simple hecho te pone de esa manera, no quiero ver cuando ocurran cosas peores.

- ¿La muerte de mi hermano mayor, no cuenta? Jodido idiota eres. Baja de mi maldito auto.

Y así fue, como supe que estaba mal con ella en ese momento.

Perder a alguien duele mucho mas si es demasiado cercano a ti, supongo que ella amaba a su hermano más de lo que cualquier persona podría haberlo hecho, eso la cambio de esta manera, aquello hizo que tuviera esa enfermedad y destrozará su vida.

- No. No dejare que hagas esto. Lo siento, quiero ser tu amigo.

Ella se mostró confundida durante minutos, mientras tanto, Summer, Luke e Nathaniel estaban callados hablando por miradas silenciosas, poniéndome nervioso. Ambar seguía igual de confusa que hace un par de minutos, le sonreí.

- Esta bien, supongo que esto tendrá que valer la pena.

Así que cuando los chicos me dejaron en mi casa, me prometí a mi mismo hacer que Ambar sea feliz, que pueda sonreír por que las cosas están bien y no por qué ella se esté vengando de alguien, solo espero que todo salga bien.

Ella se merece ser feliz, puede que la conozca solamente hace un mes, pero muchos dicen que me gusta corregir errores, no digo que ella sea uno, solamente quiero corregir sus errores, quiero corregir su negatividad pero no la voy a cambiar. Me gustaría ver a todo el mundo feliz todo el día, tengo una vida casi perfecta así que en el momento que escuche las palabras de Ambar sobre su hermano, pensé:

¿Por que no hacer su vida, igual de casi perfecta que la mía?

Se lo merece.

Se merece ser un poco feliz.