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Ashton se deshizo de la ropa de Calum, provocando escalofríos en aquella piel morena perfecta y suave, estaba teniendo el placer de hacerlo con la suficiente lentitud como para desesperar a Michael quien se encontraba tan sólo observando la escena. Porque Ashton había tomado el control de la situación, Michael no puso objeción y mucho menos Calum, cayeron tan sumisos así como lo esperaba Ashton.

—Hoy es mi cumpleaños, Calum..., ¿me harás feliz?— susurró Ashton al oído del moreno sin dejar de ver a Michael, Calum aún conservaba sus boxer, estaba deseoso de que Ashton Los retirara por fin.

— Haré lo que sea— contestó. Ashton sonrió y dejó un beso en el pequeño hueco entre el cuello y el hombro de Calum.

Ashton caminó hasta donde se encontraba el teñido, necesitaba tocar a Michael, sentir más de él, más de lo que había sentido aquella vez.

—¿Y tú?— preguntó, no había ningún rastro de diversión en su rostro, sólo deseo.

—Me has convencido, Ash..., lo haré— sonrió de lado. Tenía los pantalones desabrochados debido a la mamada que había recibido de Calum anteriormente.

Ashton no dudó más, se acercó a él, pero antes tomó de un cajón cercano una cinta roja de terciopelo, la extendió sobre sus manos y en cuanto estuvo frente a Michael la comenzó a colocar al rededor de sus ojos, haciendo que sus labios quedarán tan cercanos, pero sin contacto alguno. Percibió el aroma de Michael, fresco y dulce a la vez, los labios del teñido eran gruesos y Ashton los deseaba. Pero no los besó, tan solo pasó su lengua por el labio inferior, obligándolo a abrirlos, Ashton quería toda la experiencia completa; probar de cualquier forma a los dos. Terminó besando y mordiendo aquel labio con un poco de fuerza, no pudo resistir la tentación y fue excitante.

Ashton podía sentir su miembro pulsar contra su boxer, tan duro y necesitado de atención, pero sabía que debía hacer disfrutar a Calum y a Michael al máximo antes de darse placer a él mismo. De eso se encargaría más tarde, así que después de disfrutar los dulces labios de Michel, comenzó a quitarle la ropa, sin dejar de pasar la oportunidad de tocar la piel suavemente. Era evidente que el teñido necesitaba relajarse, Ashton lo había estado observando durante la cena, sus hombros lucían tensos y las ojeras decían que no dormía lo suficiente.

Se colocó detrás de Michael, puso sus manos sobre los hombros desnudos y bajó por toda la espalda sin llegar más lejos, se detuvo en las caderas y con firmeza las llevó hasta rozar a su entrepierna, haciéndole saber lo duro que se encontraba y no necesitaba de palabras para darlo a entender, tan sólo roces satisfactorios.

Ashton besó cada parte de la espalda de Michael, desde los omóplatos hasta la espalda baja, acariciaba el trasero pálido del teñido con fervor, sacándole suspiros muy bajos. Mordió ambos glúteos, marcándolos como suyos, tenía tantas ganas de abrirlos y ver la entrada de Michael, pero se contuvo, ya llegaría a ese momento, quizá otro día, pero por ese instante debía resolver el asunto que Calum y él tenían.

Porque era probable que no volvería a ver a Calum, al menos no después del contrato, y quizá a Michael sí, porque Ashton estaba amando el trabajo de aquella compañía, ofrecer placer a las personas y recibir dinero, era lo mejor y no lo desaprovecharía.

Así que se incorporó, tomó la mano de Michael y lo guío hasta estar frente a Calum, le quitó la venda de los ojos.

—Michael sabe mucho mejor de esto que yo— Ashton miró un momento hacia el techo, fingiendo pensar en algo, se inclinó hasta estar cerca del oído de Michael y le susurró algo que Calum no pudo entender, entonces vio como el ojiverde sonreía, el brillo en sus ojos fue más intenso.

—¿El qué?— preguntó Calum ansioso, se sentía algo adormilado, pero la adrenalina aún corría por su cuerpo, dejándolo alerta a cualquier nueva cosa que Ashton hiciera o le indicara.

C.A.L.M. PORN «5SOS» [SMUT]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora