Christina Darcy.

11.

– Escuché que hoy va a llover muy fuerte – dijo Maxwell mientras lavaba los platos con sus camisa remangada – ten cuidado, amor –

– Lo tendré – respondió leyendo en su celular un artículo llamado "Comportamiento de una mujer maltratada" – hoy llegaré un poco tarde, por cierto –

– ¿Por qué? – preguntó dejando el plato a un lado para darse la vuelta, sólo para mirar a su novia con su vista fija en su celular.

– Iré a una conferencia – respondió sinceramente – después de clases. Tendrás que cuidar a Ethan mientras vuelvo –

– ¿Puedo saber quién dictará esa conferencia? – preguntó un poco sarcástico – ¿O es bastante obvio que es tu nueva mejor amiga, Christina Darcy? – Sabrina puso sus ojos en blanco guardando su celular – porque últimamente esa mujer parece ser tu único interés – Sabrina se levantó de la mesa tomando su bolso y sus papeles.

– Tengo que ir a trabajar – dijo acercándose a él – que bien que lleves a Ethan a la escuela hoy – sonrió besando su mejilla una vez llegó hasta él – nos vemos esta noche, Max – se despidió dirigiéndose a la puerta para así abrirla y cerrarla tras ella.

Maxwell la miró irse. Iba perdiendo contra alguien que ni siquiera sabía que estaba compitiendo.

–

Sabrina llegó a la escuela donde trabajaba. Sus clases habituales transcurrieron en total calma. La conferencia de Christina sería a las cinco y había desocupado toda su agenda para llegar a tiempo. La tenía sin cuidado si Jacob Darcy estaría allí o no, Sabrina iba por Christina, por nadie más.

Los niños estaban en sus salones y Sabrina estaba lista para irse.

– Está lloviendo muy fuerte afuera – le dijo Jacob una vez la notó detenerse a su lado a un par de escasos metros – no creo que puedas salir – dijo con sus manos en los bolsillos de su pantalón, como era su costumbre, mirando la lluvia caer desde la entrada de la escuela.

– No tengo que darte explicaciones – respondió Sabrina directamente, sin querer verlo, con su vista fija en la fuerte lluvia. Jacob la miró riendo antes de volver su vista al frente.

– Lo sé – dijo encogiéndose de hombros – pero no tienes que estar molesta conmigo, yo no controlo el clima – volvió a reír – es una de las pocas cosas que no puedo controlar – Sabrina rodó sus ojos. Hablar con Jacob Darcy era insoportable. Lidiar con su presencia también lo era. Lo único que le gustaba de ese hombre, era su esposa.

– Ni siquiera estaba pensando en eso – dijo Sabrina abrazándose a sí misma, sintiendo frío – ¿Cómo está Christina? – se atrevió a preguntar. Jacob la miró por un par de segundos antes de volver a apartar su mirada.

– Hoy tiene una conferencia – habló sarcástico – la doctora Darcy dictará una importante conferencia – rió con burla apretando fuertemente sus manos – tiene tanto qué aprender. Esta vez solo tuvo suerte – a Sabrina ya no le sorprendía que ese hombre desmeritara el trabajo de Christina.

– Diez años de estudios y toda su experiencia no me parece cuestión de suerte – respondió Sabrina directamente. Jacob negó con su cabeza sin dejar su desagradable sonrisa – sí a Christina le dieron esa oportunidad es porque se lo merece, y tú deberías estar feliz por ella –

– Estuve feliz el día que se casó conmigo – respondió naturalmente – ¿Sabes cuantos pretendientes tenía? Muchos. Yo fui el ganador – Sabrina no pudo evitar reír.

– Ni siquiera quiero saber cómo se conocieron – dijo llevando su mirada a él. Jacob Darcy estaba internamente furioso – al menos no tu versión –