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Un día antes de la fiesta y Aki estaba de los nervios. Hoy conocería a unos de sus actores favoritos y encima primo de su mejor amigo.

Se miraba en el espejo como hacía siempre subiendo su camiseta gigante dejando ver el prominente vientre de 3 mese y medio. En unas semanas había crecido bastante y se hizo una foto como recuerdo. Desde que empezó a notarsele se hacía fotos para hacer un álbum exclusivo para los bebés. Se anotaba todos los datos en una libreta y ya se compraría un álbum adrede para ello.

Ahora estaba en la tesitura de qué ponerse. No quería ir demasiado elegante ni muy informal pero quería que se notara que era él. La ropa hace mucho.

Al final se decidió por unos shorts de tela con goma de color negro, una camiseta coral con una goma bajo su pecho dejando ver el prominente hogar de sus pequeños. En el centro tenía el dibujo de un lindo osito panda y por detrás tenía escote en v, desde la punta del final de su hombro hasta el otro. Sandalias blancas con una tobillera de plata con el símbolo del infinito. Un anillo de acero muy simple y sus pendientes de plumas de plata con un cristal en el segundo agujero. Se dejo el cabello suelto, aunque siempre se llevaba una goma para el pelo. Su perfume favorito, Amor Amor y bajó las escaleras. Hacía tiempo que ya no necesitaba la silla de ruedas aunque todavía le costaba caminar y ahora con el embarazo era peor. Se sentía como un pato.

- Que bueno que ya estés listo! Tomarás algo? O lo harás fuera?- Su madre estaba muy contenta de saber que su hijo había hecho por fin un amigo, que a pesar de saber la verdad, no lo juzgó ni lo abandonó, tampoco fue pregonando el tema aunque los vecinos ya se dieron cuenta de su estado, la versión de que el padre los abandonó los convenció rápido. Querían hacerle hasta una babyshower conjunta a la de Laura.

- Tomaré fuera pero me apetece una manzana.- Su madre se quedó boquiabierta. Aki odiaba las manzanas y ahí estaba, mordiendo y degustándola como un dulce manjar.

- No me mires así!! Lo sé, las odiaba pero tengo ganas de manzana y podrías hacer tarta de manzana? Como las haces tú me encanta.- Sus ojos se le iluminaron y Hana no pudo decir que no.

- Bien, pues iré a comprar los ingredientes y para la noche tendrás tarta.- Sonrió feliz.- Venga vete que llegarás tarde!

- Lo bueno se deja esperar. A que sí pequeños?- Aki se dirigió a su vientre sobándolo con delicadeza. Aquella imagen era tan tierna que Hana no lo pudo evitar y le sacó una foto.

- Mamá!! Ya me voy, sí?

- Tranquilo, cualquier cosa avisas. Adiós mi niño.- Le dio un beso en la mejilla sonrojada y lo echó fuera de casa.

Respiró hondo, muy profundo y lentamente se fue a la mansión de Liam.

Mientras tanto en casa de Liam...

- Vamos Key! Estará a punto de llegar! Eres un tardón. Aki no está para esperar!- Gritaba como un poseso.

Key no era de ponerse nervioso y estar como loco buscando un atuendo adecuado, simplemente se dejaba llevar por como era pero en serio..., no sabía qué demonios ponerse.

Al final, Liam entró al cuarto que habían habilitado en la casa de la piscina para cuando Keynan fuera de visita. Del susto, Key pegó un brinco que hizo que a Liam le cambiara la cara de cabreo por una risa burlona.

- Desde cuando entras a mi cuarto sin llamar?- Espetó Key.

- Desde que te estoy gritando que le vamos hacer esperar, genio? En serio solo es un día normal conociendo a mi mejor amigo, no es del otro mundo! Vamos que te ayudo a estar presentable.

Key rodó los ojos y se quedó sentado en la gran cama viendo como su primo trasteaba entre sus prendas.

- Listo! Ahora ponte esto, colonia, te arreglas el pelo y la barba, te pones tus gafas de sol y romperás corazones.

- Liam...!- Le advirtió.

- Deja de poner esa cara y a la faena.

Sonó el timbre.

- Ahí está. Te espero con Aki en el salón. Ciao!- Cerró la puerta y lo dejó viendo las prendas que había elegido.

Unos jeans rotos ajustados con un cinto negro de hebilla sencilla en plata, una camiseta gris cuello en v de manga corta ajustada y unas vans negras. Se puso su reloj de pulsera de cuero negro, agarró su cartera que la puso en el bolsillo trasero, las llaves y el móvil, sin olvidar las gafas de sol estilo aviador. Se miró al espejo y se retocó el cabello, lo tenía corto pero en la parte superior y el flequillo estaba más largo así que se lo dejó hacia arriba. Le hacía parecer un chico malo con esa barba de una semana recortada.

Se dirigió al salón de la casa y allí escucho varias voces. Pudo identificar a la de su primo que parecía una cotorra pero luego oyó la risa más hermosa que pudo a ver escuchado en su vida.

- No es para tanto! Siempre estás elogiándolo y ahora que tarda un poco te pones a despotricar como una anciana.

No pudo más, esa risa, esa voz..., tenía que ponerle rostro ya. Entró como quien no quiere la cosa y...

- Hola chicos! Siento la tardanza.

- Ya era hora impuntual!- Volvió a recriminar Liam. Ambos chicos se levantaron y entonces le vio.

Cabello blanco, ojos de un azul grisáceo, piel clara con sus mejillas sonrosadas, bajito pero con buenas curvas y... Un bombo. Key tuvo que disimular su sorpresa y tratar el tema con diplomacia. Primero las presentaciones.

- Aki, este es mi primo Keynan pero lo llamamos Key, aunque yo lo llamo amargado. Jajaja. Key él es el amigo que te mencioné, Aki Aoki.

- Encantado de conocerte al fin. Mi primo no ha parado de alardear de ti.- Le extendió la mano y Aki correspondió al saludo.

- Lo mismo digo. Tiene un carácter voluble pero se hace de querer.

- Oye!! Que estoy presente! Sois tal para cual. Nos vamos antes de que me empecéis a poner verde?

- Exagerado. Cojemos mi coche?- Se ofreció Key.

- Es lo menos que puedes hacer.- Respondió Liam. La actitud de Liam le hacía gracia a Aki y le relajaba. Al menos no hizo ningún comentario sobre su vientre, pero no cantaba victoria todavía.

Key le abrió la puerta del copiloto para que entrara Aki y Liam se puso detrás, puso las llaves y lo enchufó.

- A donde nos dirijimos, muñeco?- Preguntó Key.

- Al centro comercial, chalado!

- Eres un maleducado, lo sabías?- Le reprendió con una sonrisa Aki.

- Siempre somos así!- Puso su puchero habitual.

- Lo sé, solo quería decírtelo espiga.

- Y tú enano!- Le contestó Liam.

Aquello iba a ser un día para no olvidar. La sonrisa de Aki calentó el corazón roto de Key y estando con su primo, se divertiría. La cuestión era, quién era el padre de la criatura que esparba Aki. Porque tendría pareja, no?

Future ~PAUSADA TEMPORALMENTE~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora