Capítulo 1 - El comienzo

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"Mi nombre es Destiny Parker. Dentro de dos semanas (20 de enero) cumpliré la mayoría de edad, 18 años y no se si aún siga con vida para poder festejarlo, por eso quiero dejar esta carta como testigo de mi propia muerte en caso de que así suceda.

Vivo o bueno, vivía quizás, no lo sé, en Portland la ciudad más grande de Oregón, ubicada sobre los ríos Columbia y Willamette. Amo esa ciudad, mi ciudad. Es muy ecologista y es lo que más me gusta de ella. Mi mamá es Donna Parker de 41 años y mi papá William Parker de 43 años. Son los mejores padres que alguien pudiera tener. Soy hija única, pero tengo muchos primos, 6 para ser exacta y gracias a ellos nunca sentí la necesidad de tener un hermano, porque ellos son mis hermanos.

La noche que desaparecí fue el 3 de noviembre, no se la hora exacta en que me trajeron aquí porque me quitaron todas mis pertenencias, ni si quiera pude conservar mi reloj de mano, no tengo noción del tiempo en este mismo momento, pero puedo recordar aún la hora en que salí de mi casa. Eran exactamente las 22:15, debía de estar en casa de Jane (Janeth Clark) a las 22:30, así que salí 15 minutos antes ya que me quedaba solo a unas cuadras de mi casa, no era muy lejos.

Recuerdo que a las 22:23 recibí la última llamada de Math (Matthew Hoffman) mi novio. Me dijo que tenía algo muy importante para decirme, y presentí que quería terminar conmigo ya que me había llegado un par de rumores sobre una supuesta relación que estaba teniendo él a escondidas de mí. Así que sólo pude sentarme en el cordón de la vereda a reflexionar sobre todos aquellos rumores y comencé a llorar. No recuerdo la calle en la que estaba, es como si me la hubieran borrado de la memoria, pero sé que estaba solo a unas pocas cuadras de la casa de Jane, no lo sé, quizás 3 o 4 pero no estoy segura.

No recuerdo como fue que sucedió, solo se que vi una luz muy grande, que iluminó casi toda la cuadra y no podía ver nada. Luego de ahí desperté justo aquí, en un lugar completamente vacío, solo hay una cama y una mesa que dejan a mi lado cuando me traen de comer. La habitación esta demasiado iluminada, muchas luces blancas, sus paredes parecen ser de metal, con pequeñas formas de hexágonos. No sé dónde estoy. Al principio pensé que se trataba de una especie de secuestro de esos que se escuchan en las noticias, donde un grupo de hombres secuestran a una chica, la violan y luego la matan, pero no. Esto es algo más, hay personas extrañas, algunas son normales como nosotros, otras no tienen boca, otras tienen los ojos demasiado grandes, otras tienen el cuerpo más grande que se puedan imaginar, otras son demasiado blancas, como el papel, sus venas se pueden notar desde lejos. Otras parecen sacadas de una historieta de extraterrestres, son flacas, muy flacas, su piel es casi del mismo color que el nuestro solo que un poco más amarillenta, sus ojos son hermosos, los ojos más hermosos que jamás vi en mi vida, color verde agua, sus orejas son casi igual a las nuestras pero un poco más punteadas arriba, parecidas a las de un duende pero no tanto, su pelo varía según su edad, los niños lo tienen color gris, los adolescentes y adultos color blanco, y los mayores color negro mate. Su cuerpo es igual al nuestro, puedo notar que las mujeres tienen senos, no se que tendrán ahí abajo nunca vi uno sin ropa, pero lo que si puedo ver es que absolutamente todos tienen el pelo largo, hombres y mujeres, niños, adolescentes, adultos, ancianos, todos.

Cada uno tiene un anillo con una letra y un número.

Ellos son los buenos, ellos son los que intentan hablar conmigo. Una de ellas me trata como si fuera una mascota, no se su nombre solo puedo ver que en su anillo dice C8, decidí que así la llamaría entonces.

C8 me trae comida y agua cada 3 horas, estuve una semana entera contando y sumando los segundos entre tiempo y tiempo de su llegada a mi habitación, y pude llegar al resultado final de 3 horas, aunque no estoy segura. Cuando me entrega el plato de comida ella se sienta a un lado de la cama y acaricia mi pelo mientras me observa fijamente, puedo notar en su mirada dolor, aunque no lo sé, quizás sus expresiones son diferentes a las nuestras, pero, así lo siento. Cuando termino con mi plato de comida que por cierto no se que es lo que me dan, pero es muy rico, no es ni salado ni dulce, es decir, puedo sentir ambos sabores, aunque a veces sólo a veces dependiendo de que sea el menú puedo sentir un gusto amargo al tragarlo. Como les decía, cuando termino de comer, enseguida me entrega el agua y hace un movimiento extraño con sus manos. Dibuja un circulo en la palma de su mano y me la pone en la mejilla, es como si me marcara, pero no, porque creo que no tengo nada en mi piel, o al menos no siento nada al tocarla, no puedo verme quizás tenga una especie de moretón, pero no creo que así sea, supongo que me dolería al tocarme. De todos modos, cada vez que C8 hace ese gesto, me genera una especie de seguridad, es extraño, pero qué más da, aquí todo es extraño..."

Viaje en una cartaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora