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-no...no es por el...eres un niño, eres hermanito de mi mejor amigo, aprecio a tu madre...tu a padre, todos son tan buenos conmigo, si hubiera sabido que eras hermano de Mingyu no habría venido-

-porque? ...porque...-

-porque es raro, que me paguen por esto, lo haría gratis, por el cariño que le tengo a Mingyu... a tu mamá, esto es desde antes de que hicieras, no lo entiendes, pero eran mi segundo hogar...-

-estas rechazándome ahora? -

-siempre lo hice-

-pero estas diciéndolo finalmente-

-entiende por favor...no cambiemos esta relación que tenemos, no quiero que esto afecte tu rendimiento escolar-

-es por Mingyu? Es Mingyu verdad, yo los vi, como se miraron desde que llego, como se abrazaron, tu nunca eres así hyung, tu cara, la forma en que lloraste, ese no eres tú, o más bien si eres tu pero no conozco eso de ti, ¿no merezco nada asi de ti? -

-por favor Sam-

-porque Mingyu? Es un presumido-

-es tu hermano-

-medio...-

-lo querías tanto hasta que llego... siempre hablas de el-

-ahora no-

-deja de comportarte así Sam, soy independiente de esto, soy tu hyung no debes hablarme así, te dije desde que iniciaste esto que eras un niño para mí, no te rechacé debidamente porque no tenía el corazón para hacerlo, mañana crecerás y veras que esto era una locura pasajera de un niño-

-Mingyu  se ira pronto, espero que cuando eso pase todo regrese a la normalidad-

-Sam!!- en realidad eso me dolió, me ofendió, sentí que era la cruda verdad, era cierto, si Mingyu se iba todo regresaría a la normalidad, todo estos días en los que salía con él, ir al cine, a caminar, a mi departamento con Hoshi, la hermosa costumbre de la cual me tomo solo días adueñarme ahora se termina. - basta! No quiero oírte mas así, porque no puedes entender...- aunque faltaba una hora para terminar la clase de hoy, tome mis cosas dentro de mi mochila y le fui, lo hice pro mi bien, estaba a punto de llorar, en mi mente imaginaba la partida de Mingyu, porque...porque tenía que irse.

-Wonu!!!- era Mingyu, había corrido detrás de mi. - oyee...wohh, que paso?? Vi que saliste volando de mi casa, estas bien, estas...estas temblando, tus ojos, es como si fueras a llorar- dijo levantando mi rostro entre sus manos para verme a los ojos, vete Mingyu, no me haces bien ahora.

-nada...no tengo nada-

-te dijo algo Samuel? Luces enojado-

-es...es...es solo que es u niño, no sabe lo que habla...estoy bien...estoy bien- dije sin darme cuenta que mi voz temblaba demasiado, Mingyu me abrazo como ahora era costumbre, como todo se había hecho costumbre, sus abrazos, sus sonrisas tímidas, su voz diciéndome "Wonu" su mano tomando la mía desprevenidamente, esas costumbres se veían tan vivías dentro de mí, y ahora con la terrible idea de que lo vería partir en solo unos días, todo eso caía sobre mi. - tengo que irme...será mejor que me vaya-

-no...Wonu...espera- mantenía fuertemente sujetada mi mano para detenerme. - yo, pensé que podíamos salir hoy...ya casi me iré...no quiero des-desaprovechar este tiempo...vayamos a donde quieras-

-mírate- dije haciéndole ver que andaba en short y sandalias. - a donde quieres ir así-

-maldición, espera, espérame aquí, no creo que quieras volver a mi casa, iré corriendo, no te vayas, si no al diablo me compro ropa-

-que? No, no hagas eso-

-no quiero que me esperes, no quiero que te vayas-

-no me iré...no lo hare, solo ve...cámbiate, estaré aquí, te esperare aquí...- me sonrió y salió corriendo a su casa- siempre te esperare aquí...- dije mientras lo vi desaparecer. Como era que en una semana los sentimientos ocultos de hace muchos años se hayan hecho mucho más profundos, odio todo esto. - a dónde iremos? - lo bueno de que de fuera repentinamente a cambiarse era que pude calmar mis extrañas emociones.

-mmmm...-miro la hora en su teléfono. - tengo una idea, es algo lejos, pero valdrá la pena, vamos-

No tenía ni idea de adonde iríamos, solo que compramos muchos pasajes de metro, el me dirigía, íbamos del centro de Seúl hacia las afueras, aunque bueno, el viaje fue de casi una hora llegamos a la inmensa biblioteca central, la biblioteca más grande de todas, quería impresionarme, si, si lo estaba logrando.

-que...que hacemos-

-aún es temprano para ir al otro lugar, quería traerte aquí, pero no sabía llegar, tuve que hablar con mamá, incluso me hizo un mapa, ven-

Todo era lindo, estábamos ahí, viendo libros, caminando entre los pasillos, le contaba de los que he leído, me miraba con mucha atención y luego buscaba ese libro para decir "¿es este? Debería leerlo" me contaba de los libros de su escuela, que, aunque vivía ahí desde los 5 le era difícil el idioma, pero que le iba bien de todas formas, eso me sorprendió, que al llegar su coreano no estuviera oxidado, luego me dijo que su padre habla con él en este idioma y todo tenía sentido ahora.

-hay algo que desees comprar? -

-mmm...esa pregunta es muy ambigua en este momento, desearía llevarme todo aquí! -

-elige los que quieras-

-no tengo suficiente dinero-

-es un regalo, anda-

-que?! No, no, ¡cómo crees! Claro que no aceptare eso, no, estoy bien solo viendo, además estoy divirtiéndome contigo-

-pero yo quiero darte un regalo, anda toma algo, o quieres que regrese y tome todos los que me has dicho que se ven interesantes-

-no los recordaras...- dije muy seguro de mí mismo, pero Mingyu me miro como si lo hubiera retado y comenzó a regresar por los pasillos, fácilmente encontró 6 libros de los miles que le dije que se veían interesantes. - ya, ya, entendí, diablos que buena memoria tienes-

-lo sé, anda, solo elige, puedo cómpratelos todos, pero no querrás, mínimo uno acepta de mí, está bien? -

-pero yo pago la comida, por favor-

-ese será tu regalo hacia mí? -

-quieres un regalo? Necesitaría tiempo de pensar que darte-

-no lo pienses mucho, debes saber que quiero...pero bueno, acepto la comida como un adelanto, así que elige un libro, vayamos a comer que aún tenemos que ir a otro lugar-

-está bien...-

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