Dulce Reencuentro

Cap. 5 -Aclarando asuntos.

Pov's Ian

Vi como los chicos me miraron sorprendidos, ignorándolos me aclare la garganta y me centre en los chicos, por más que quisiera acercarme a ella no era el momento.

-Por lo que nos contaron -ambos se tensaron -están en una relación -asintieron-

-No se preocupen chicos -ambos se notaban tensos -solo quiero cerciorarme de que Matt va a estar bien -Matt me sonrió-

-Claro que lo estará -hablo rápidamente Antonio -sé que tal vez es muy apresurado -se puso de pie -pero te juro que lo amo como nunca he amado-

-Tranquilo -hice un movimiento con las manos -estoy seguro de que así es -le sonreí-

-Bueno, Matt -lo llamo Elizabeth -sé que su relación es real y que se aman -ambos sonrieron -pero quería hablar contigo sobre los riesgos que hay-

Colocándome recto y mirándolos detenidamente a los dos, tienen que tener mucho cuidado, hay muchas mafias que quieren acabar con nosotros, buscan nuestro punto débil y con eso poder doblegarnos, y si se llegan a enterar de que ellos dos están saliendo buscaran la manera de dañar a uno de ellos para así poder dañar al otro, tampoco es que dude de sus capacidades, pero no podemos arriesgarnos de que algo les pase.

-Nada malo nos pasara -hablo seriamente Matt, al parecer no soy el único que sabe lo que puede ocurrir -sabemos cómo protegernos y de ser necesario lo protegeré con mi vida -lo mire sorprendido, su seriedad y aquella mirada no me lo esperaba-

-Eso es lo que me temo -hablo de nuevo Elizabeth, todos dirigimos nuestra atención a ella -no quiero que ninguno de los dos esté en peligro, no quiero que a ninguno de los dos le pase algo -me miro de reojo, clara señal de que tenía que hablar-

-Chicos -ahora me miraron a mí -no soy nadie para impedir que salgan o que se amen, pero simplemente les pido que tengan mucho cuidado -ellos asintieron -que cualquier cosa que les parezca extraño nos los comuniquen-

-Claro -me contestaron a la unisón-

-Muy bien en ese caso -me puse de pie -bienvenido a esta loca familia Antonio -ambos se rieron y me abrazaron -por favor cuídalo -le susurré al oído, se separan de mí y vi como discretamente me asintió-

-Con todo esto ya aclarado -llamo nuestra atención Elizabeth -hay que salir a festejar que mi bebe ya tiene pareja -vi como Antonio se puso colorado, aguanté una carcajada-

-Eso es una grandiosa idea -opinión Matt-

Vi como dirigieron su mirada en mi dirección, pero por más que quisiese ir no lo hare.

-Adelante -ellos sonrieron -que se diviertan -vi como todos fruncían el ceño-

-¿No iras? -era Matt, tenía la mirada triste-

-Lo siento amigo -aclare mi garganta, mierda una mentira, no se me ocurre ninguna puta mentira -pero llego un amigo y quiero hablar con el sobre unos negocios-

-¿Negocios? -Matt me miraba raro, sabe que es mentira -¿Quieres que llame a los chicos para ir?-

-No -conteste rápido, solté un suspiro -es un amigo y será en un lugar tranquilo -rasque mi codo -así que adelante salgan ustedes y que se diviertan, si me disculpan tengo que ir a arreglarme -los tres sin quitar la vista de mi-

-Espera me iré contigo para arreglarme para salir -vi como Matt le dio un beso a Antonio en forma de despedida y luego otro en la mejilla a Elizabeth, corrí la vista, me dolía el que yo no lo pudiese hacer-

(...)

Una vez dentro del carro y en camino hasta nuestro hogar el silencio reinaba y no sé si eso es bueno o malo, pero pasados los minutos Matt hablo.

-¿Porque no iras? -sé que miraba sentía su mirada-

-Ya te dije que me reuniré con un amigo -sé que no me cree, pero tengo que intentarlo-

-Tanto como tú y como yo sabemos que eso es mentira -lo mire de reojo -ahora dime por qué-

-Esa es la verdad -mascullé entre dientes -y no más preguntas -solté ya en tono brusco-

Después de unos minutos llegamos hasta la casa, se notaba que los chicos no estaban ya que todo estaba tranquilo, mire a los diferentes guardias que había, todos en diferentes lugares y uno que otro escondido.

-Matt -lo llame, este se detuvo a mitad de las escaleras y se giró y me miro -simplemente quiero alejarme de Elizabeth-

-¿Porque? -pregunto a la vez que bajaba los escalones para llegar a donde estoy yo-

-Ya la lastimé mucho amigo -susurre -y con lo ocurrido en el baile esta más que claro que ella tampoco me quiere a su lado -vi cómo me miraba con lastima -así que es mejor poner una pared y solo tratar asuntos con las mafias -le sonreí de lado -por cierto, muchas felicidades te mereces ser feliz -le di un apretón en su hombro y pase por un lado de el para dirigirme a mi habitación-

-Ian -oí como me llamo-

-Solo se feliz amigo -le hable mientras lo miraba por encima de mi hombro -te lo mereces -sin más camine hasta entrar a mi habitación-

Cuando cerré la puerta fue cuando realmente me rompí, fue cuando saque todo este dolor que tenía, deje que todos mis sentimientos salieran, después de unos minutos sentado en aquel frió suelo me levante y me dirigí hasta mi baño. Una vez que termine de alistarme me dirigí y tome un auto, va a pasar un largo rato hasta que pueda usar mi moto, me dirigía a un pequeño café, al parecer lo de "me voy a reunir con un amigo" no termino siendo mentira del todo, al parecer un viejo amigo andaba por la cuidad y quería conocerla, claro por conocerla es ir a los diferentes cafés que se encuentran aquí, es un adicto al café el muy carbón, cuando estaba por llegar vi una camioneta verde oscura estacionada a lo lejos, puedo imaginar de quien es, pase por "casualidad" cerca de ella y tome fotos de sus placas y una vez mandadas a Erick quien al parecer es el único que pudo contestar.

Me adentre al local y ahí estaba mi amigo, con una taza de café entre sus manos, cuando me deje caer frente a él me miro entre molesto y confundido.

-Disculpa, pero ese lugar es para un amigo -he de admitir que es muy amable el carbón este-

-¿En serio? -me miro sorprendido-

-¿Pero qué mierda? -le hice una señal de que guardara silencio-

Estamos en serios problemas, a unas tres mesas unos chicos nos ven, pero no de forma normal, de seguro son trabajadores del niño que ataco en el baile, cuando vi que se iban a poner de pie, tomé la mano de Héctor y la apreté.

-¿Cómo estuvo tu día amor? -me miro sorprendido, para después mover sus labios "0-3", por lo cual yo levante una ceja-

-Muy bien cariño -apretó mi mano igual y con la otra le dio un pequeño sorbo a su café -perdón por no ordenar por ti, pero no sabía si tardarías mucho en llegar de la casa de tu primo -agradezco mucho hablar con el de lo ocurrido-

-Lo siento bebe -hice un puchero, vi como aquellos chicos caminaban directo a nosotros-

Sentí como me tomaron de ambos brazos y a Héctor dos chicos lo sujetaban, cuando me nos me lo espere me propinaron un puñetazo en el estómago y otro en el rostro, levante mi mirada y vi como a Héctor le daban uno en el rostro, a pesar de que hace rato fingíamos me preocupaba.

-¿Que hacen? ¡Déjenlo! -grité, vi como todos nos miraban y no hacían nada, tenía que seguir fingiendo para no llamar la atención y me descubran -¡¿Quiénes son?! ¡¿Que quieren?! -vi cómo se miraron entre ellos, nos soltaron y yo corrí hasta donde estaba Héctor sujetándose el rostro-

-Dile a esos chicos que se rindan si no quieren ver correr sangre -me dijo uno de los chicos mientras me sujetaba del cabello -las personas como ustedes me dan asco, ojalá pudiera exterminarlos a todos-

Sin decir nada más salieron de aquel lugar, levante a Héctor y lo apoye en mí y a paso lento me dirigí hasta la salida, cuando salimos vi que aquella camioneta ya no estaba y como otra salía de aquel lugar derrapando, con apuro camine hasta mi auto e hice que Héctor se acomodara en el asiento del copiloto, una vez que yo estuve dentro del auto lo encendí y salí a toda marcha de aquel lugar a mi casa, tengo que hacer una junta con Elizabeth lo más rápido posible esto no se quedara así.

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