« 7 Years Of Love »

In My Dream

"Ojala pudiera dormir por siempre así 

porque cuando me despierto puedo sentir tu presencia" -Super Junior

—¡Lina!

Percibí la voz de KyuHyun mientras intentaba tomar un taxi en la avenida fuera de la agencia. Me volteé con las manos aún hechas puños y lo miré a los ojos. Por su respiración agitada parecía que corrió desde la sala de prácticas.

—¿Por qué te saliste así como si nada?

—Es sólo que estoy cansada. Lo siento, me hubiese gustado quedarme más tiempo pero tengo trabajo que hacer —me excusé lo más rápido posible con la primer tontería que se me vino a la mente.

—Al menos déjame llevarte —ofreció tomando mi mano.

Aquel roce de alguna manera me erizó y me hizo querer separarme pero no lo logré.

—No, tú debes terminar el ensayo. Estaré bien —insistí segura de mí.

Con todo y todo, respetaba su trabajo y no lo quería meter en problemas.

—Llévate mi coche, tú sabes dónde lo estacionaste ¿no? —me ofreció tendiéndome las llaves. Me sorprendí ante el gesto y asentí ante tal ofrecimiento—. Estaré más tranquilo así.

—Gracias KyuHyun —me despedí de él con un gesto de manos y me fui huyendo de él.

Decidí ir al supermercado, pues desde que llegué a Corea sólo había ido uno durante los primeros días. Fui al más cercano de casa para que no tardar demasiado tiempo. Pero aun así me entretuve intentando recordar las carencias.

Coincidentemente volví a encontrarme por segunda vez a mi supuesto novio.

—Vaya, esta sí es una sorpresa —dijo a mis espaldas de la fila donde estábamos formados para pagar.

—Creo que nos hemos leído la mente —mencioné con una sonrisa a la par que comenzaba a pasar mi despensa por la cinta de la caja registradora.

—Te dije que estábamos conectados.

Ante ese comentario me ruboricé no obstante permanecí callada y continúe con mi pago.

Tras que ambos pagáramos, nos fuimos hacia el estacionamiento del establecimiento y sorprendentemente también estábamos relativamente cerca estacionados.

—No sabía que tenías coche —masculló mientras me ayudaba a subir las múltiples bolsas a la cajuela.

—Ah, es prestado.

Su cara de duda me hizo saber lo confuso que eso pudo sonar. Y aunque no quisiera admitir lo que era, decidí que era mejor hablar con la verdad.

—A decir verdad KyuHyun me lo prestó —confesé en voz baja a punto de morderme el labio y la lengua por miedo a su expresión.

No estaba segura si estaba bien conversar tan libremente sobre KyuHyun, pues él sabía que yo le gustaba y JaeHyun ya era mi novio.

Con mucha razón, JaeHyun intentó aparentar estar confundido en vez de sorprendido ante mi comentario.

—Soy una pésima persona, no debería platicar sobre él contigo —dije de inmediato al ver que él no respondió.

Tan pronto me escuchó negó con una sonrisa y me tomó de los brazos.

—Está bien Lina, es tu mejor amigo y lo entiendo. Así como entiendo que él te quiera.

Era extraño escuchar eso pero lo acepté.