Fue el primer Black en pertenecer a Gryffindor, repudiado por su familia a los 16 años, valiente y leal a sus ideales, se convirtió en leyenda al ser el primer mago en lograr lo imposible escapando de Azkaban. Se sabe de aquello que lo hizo cruelmen...
Chicos antes de que el capítulo inicie me gustaría dejarles el nuevo trailer del fic, es que el anterior estaba ya muy viejito y hace mucho sentía que necesitaba actualizarlo. Espero les guste :D
Ahora sí, los dejo con el cápitulo.
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Conforme los miembros de la orden fueron llegando el salón del castillo comenzó a llenarse de a poco dividiéndose un poco entre grupos para charlar pese a que todos hablaban del mismo tema y la sorpresa de aquella reunión tan sorpresiva tras la del día anterior. A pesar de todo, no parecían haber citado a todos los miembros, sino a los más cercanos al pequeño grupo de amigos, algo que llamo mucho la atención de Sirius.
Lisange abrazó a Dorcas al verla llegar y la morena se dio cuenta que su amiga estaba más feliz que de costumbre, algo que Lily y Remus que la conocían tan bien notaron. Y por su lado, James notó lo mismo de parte de Sirius, aunque ninguno pudo contarles nada pues la aparición de Dumbledore cambio el ambiente de manera instantánea.
El anciano repaso a los presentes rápidamente, parecía estar identificándolos uno a uno corroborando que aquellos que hubiese llamado llegaran, aspiro aire llenando sus pulmones y adenatrandose en la habitación con su presencia imponente.
—Me alegra que estén todos presentes, seguramente están extrañados por lo inesperado de está reunión y si se han preguntado la ausencia de algunos miembros, puedo concluir esa explicación diciendo que únicamente los he llamado a ustedes —explicó en pocas palabras lo que todos ellos ya sentían—. Anoche, me ha sido transferida una información de suma importancia.
—¿Quién ha sido? —Preguntó Sirius de manera ciertamente altanera—. En mi experiencia tras lo ocurrido con Caradoc estamos en un momento que podemos apenas confiar en fuentes externas de información.
—No puedo creer lo que diré —intercedió Alastor con su amargo humor—, el chico Black tiene razón.
Palabras que Sirius agradeció con un tenue cabeceo.
—Señor Black, mi querido amigo Alastor y los demás, infortunadamente, no puedo decir quién es mi fuente de información, tienen que confiar en mí —respondió vehementemente. Lo que era innegable para todos es que la mirada del anciano contenía no otra cosa sino pesar—. Necesito contarles información que lamentablemente no he compartido con ustedes y cuando lo diga espero entiendan mis razones. Hace más de un año recibí la visita de una mujer buscando un empleo de profesora, era sino la tataranieta de Cassandra Trelawney: Sybill Trelawney, su descendiente en mi presencia hizo una profecía, al principio pensé que esta profecía hablaba de Sirius y Lisange, era un pensamiento normal pues ya tienen una profecía sobre sus hombros, ¿Señor Black la recuerda? ─Preguntó mirandole.
