Stockholm syndrome |H.S| DO#2 [TERMINADA]

01

Me mantengo mirando la ventana mientras abrazo mis piernas, miro como los árboles se mueven al son del viento y como las gotas de lluvia cubren el cristal y se deslizan poco a poco, creando imágenes en mi cabeza de pequeñas carreras. Y toda esa mierda cliché desde que me desperté. Confié en Harry, le di una oportunidad aúnque no la merezca y aún no me creo que haya sido capaz de esto. Me parece algo enfermo e inhumano. Lo único que me mantiene las esperanzas arriba, es concienciarme de que mis amigos están bien y de que me buscarán, creeré en ello.
Harry se supone que llegará en una media hora y a pesar de no querer verle la cara en estos momentos, conociéndolo, puedo jurar que por mucho que reze por qué no bajé, él lo hará.

Juego con los cordones de unas "Adidas" que Liam me bajó minutos después de nuestro encuentro. Me encuentro mal. Me agobian los espacios pequeños, y no,no padezco de claustrofobia, ni hablar del tamaño de esta habitación que es dos veces como la mía, solo que no me gusta estar encerrada. Sé que si no salgo de este lugar pronto voy a enloquecer.

He intentado mantenerme entretenida, también he mirado cada milímetro de la habitación pero nada con lo que poder escapar.Las ventanas tienen unas rejas tan pequeñas, que solo un gato con su suave pelo podría deslizarse por ellas. Y ni hablar de la ventana del baño, muy grande, pero con un cristal el cuál no hace ni por abrirse o cerrarse.
La cadena que rodea mi tobillo me hace sentir que soy un animal, y su tintineo suena una y otra vez, que esto es real y no es un sueño.

Voces y pasos se van haciendo cada vez más fuertes, con rapidez me escabullo entre las mantas, dejando mi cabeza fuera. Cierro los ojos e intento hacer pesada mi respiración . Rezo por parecer lo suficientemente dormida, para que quien sabe Dios que fuese, se marche.

Escucho la puerta abrirse y solo me ubico más abajo, tapando parte de mi rostro, concretamente mi boca. No sé por qué, pero cada vez que me hago la dormida, me entra la risa tonta y casi siempre soy descubierta.

Harry entra primero y lo sé por su ronca voz, pero escucho a alguien más junto a él, Liam creo.

—¿Ves, Liam?Te dije que dormía—Harry ríe levemente—

—No, ella no duerme, Harry—¿Qué?—

—No puedes juzgar eso—

—Claro que sí, soy médico, hice prácticas, se cuando una persona duerme o no— Genial, un psicópata número dos—Por ejemplo: mira sus músculos, no están completamente relajados y su respiración no es lo suficientemente lenta, y para acabar desde aquí se puede apreciar el movimiento de sus párpados—Idiota, eso es lo que soy.

—¿Qué mierda,Liam? Me asustas aveces, hombre. Luego me decís a mí—

—Sí Harry. Lo que tú digas.En fin...te dejo con ella, seguro tienen un interesante tema del que hablar—

—Vale, adiós Liam—

—Adiós, Harold—ríe y sale de la habitación—

Escucho los pasos de Harry acercarse y pararse, creo, que delante mío.

—Ya puedes ir abriendo esos hermosos ojos. Sé que no duermes—Sí, ya sé que lo sabes— Hey, ángel—y retira las mantas de mi cuerpo con fuerza al verse ignorado.

Siento el frío golpearme como si fuese las agujas de coser de mi abuela.
Bufo y termino por incorporarme con los brazos cruzados sobre mi pecho.

—Eso es—sonríe y pongo los ojos en blanco—

—¿Qué hago aquí Harry?—Exclamo con rapidez y el se sienta a mi lado—

—Junto a mi, ángel. Dónde debes estar, este es nuestro destino, uno haciendo compañía al otro—

—Párate ahí—frunzo el ceño—mi destino y el tuyo no son, para nada compatibles—El mira hacía abajo y muerde su labio. Oh no, no caigas de nuevo Penny.

—Penny—susurra y siento que es la primera que mi nombre se desliza por sus labios y eso me hace sentir extraño, me asusta—Por favor, siento haber tenido que llegar a esto, pero llevo tanto tiempo, no sabes cuánto, quiriendo tenerte a mi lado. No de manera egoísta. Te amo, más que a nada en este mundo, he dejado y dado tanto por tí. Haría cualquier cosa por hacerte feliz—susurra y...¿Eso es una lágrima?—Por favor, déjate amar por mí, prometo que jamás te haré daño, que te cuidare. Sé que me he portado como un completo gilipollas, violando tu privacidad y abusando de tu espacio—suspiré. Si Harry se lo proponía, podía llegar a ser una persona por la cuál valdría la pena cuestionar un perdón.

—Harry, no puedes llegar y decirme todo eso así, no en estas circunstancias y lo sabes. Esto es incorrecto, puedes llegar a ser una gran persona Harry y lo puedo ver en lo me acabas de decir. La indicada para tí llegará cuando menos lo esperes, está ahí, fuera esperandote. Pero yo no lo soy y te pido,por favor, que lo entiendas—murmuré—

—Por favor—solloza—sé que actúe mal—

—Harry,no. No lo intentes más. Solo déjame volver a casa, si en serio es que me amas, déjame volver. Sí es verdad que me quieres ver feliz—

—No, si no me amas, aquí te quedarás. Hasta que empieces a hacerlo—habla con seguridad y dureza—

—¡NO PUEDES OBLIGARME A QUÉ TE AME!—exclamo—

—He dicho—sentencia—Y haré lo que sea necesario—y salí dando un fuerte portazo, miro la puerta confusa ante su repentino cambio de humor—
Harry Styles es un misterio.

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