Cierra tu Corazón

Capitulo 8: Melissa Cuney

-¿Que fue lo que pasó? -Pregunta Aldren cuando ya estamos lo bastante lejos de la casa.

-Creo que dos de los portadores de los brazaletes nos encontraron;Raúl, brazalete del aburrimiento; Celeste, brazalete de la desesperación. -Dice Isaías, viendo hacia atrás, creo que verificando que nadie nos este siguiendo

-¿Quienes otros tienen brazaletes? -Vuelve a preguntar Aldren.

-Veamos.. Hasta dónde yo se, esta Brandon Lúis, brazalete de la amistad; Leonardo Plony, brazalete de la inferioridad; Raquel Dórico; brazalete de la envidia; y del que más deben tener cuidado, Kennedy Paley, brazalete del miedo, valentía y felicidad. -Responde Isaías. Esta vez viendo al frente, sin hacer contacto visual con Aldren

-Espera, ¿ese tal Kennedy posee tres brazaletes? - Sigue preguntando Aldren, sorprendido

-Si, muchos creen que el mató a los poseedores de esos brazaletes, otros creen que el los obtuvo de donde sea que provengan los brazaletes, sea como sea que los obtuvo, sólo podemos estar seguros que él tiene dos de los, que se creen, 10 sentimientos más poderosos que son: ira, felicidad, amor, codicia, tristeza, culpa, envidia, miedo, pereza y esperanza, siendo los que más mueven al mundo. -Le responde Isaías. Me pregunto como sabrá todo eso.

-¿Que pasa si obtienes los 10 brazaletes? - Pregunta Aldren de nuevo, creo que pasaré todo el día escuchando las preguntas de Aldren.

-Nadie sabe exactamente que sucede, se cree que al poseer los 10, puedes hacer que toda la humanidad sea afectada por tus sentimientos. -Responde Isaías. Esta vez está viendo a Aldren a los ojos -Creo que ya fueron suficientes preguntas, seguiremos cuando lleguemos a la casa de una conocida mía que nos puede ayudar.

Luego de eso ya no hubo ninguna palabra, lo cual es un alivio, tengo mucho que analizar antes de seguir obteniendo más información.

Luego de un tiempo creo que hemos caminando por algunas horas, lo sé por que esta anocheciendo y casi llegamos al límite de la ciudad, al cual le sigue un denso bosque que no ha sido muy bien investigado por los muchos peligros que hay dentro, como vegetación venenosa y animales salvajes.

Cuando al fin nos detenemos estamos enfrente de una casa amarillenta de dos niveles, Isaías toca la puerta de madera y en seguida se abre, donde una mujer con piel bronceada, pelo rizado con un color parecido al de mi hermano, y con demasiado maquillaje sale.

-Hola Isaías, sabía que vendrías pronto -dice la mujer, con un tono provocativo

-Rebecca, Aldren, ella es Melissa Cuney, poseedora del brazalete de los celos, Melissa, ellos son Rebecca, poseedora del brazalete de la ira y su hermano Aldren.

-Ya veo, pasa por favor Aldren -viendo a Aldren. Le da una mirada que de mi sólo saca el sentimiento de querer arrancarle los ojos. Debo tranquilizarme, mi piedra está empezando a brillar - Ah, y también ustedes, Isaías y Rebecca -Añade, sin dejar de ver a Aldren. Logré que mi piedra deje de brillar.

Entramos a su casa, realmente no hay nada que resaltar, unos cuadros en las paredes, un sillón viendo a la televisión, dos alcobas y un baño. Es realmente pequeña la casa, no parece muy interesada en llegar a compartir su vida con alguien más, y menos el tener una familia..

-Llamando a Rebecca.. Rebecca, estas ahí? -Isaías ya llevaba un buen tiempo sin interrumpirme.

-Si, perdón, ¿que pasó? - Respondo, tratando de concentrarme en lo que esta pasando. No recuerdo como llegue a estar sentada en el sillón, a la par de Melissa. Aldren e Isaías están sentados en unas sillas plásticas, Isaías está a la par mía y Aldren a la par de Melissa.

-Me preguntaba si puedo ver tu brazalete -pregunta Melissa - Tranquila, puedes confiar en mi -Volteo a ver a Isaías, el asiente.

Trato de mover el brazalete para quitármelo pero no lo hace, en lugar de eso siento un gran jalón en el brazo, observo el brazalete y noto algo que me horroriza, parece que el brazalete se ha unido a mi brazo.

-Oigan, creo que tengo un problema -Digo, observando mi brazo.

-Vaya, creo que tienes un grave problema querida -Dice Melissa, quién se acerca para ver -No te preocupes Bec -¿Bec? Bueno, es el único diminutivo que podría tener mi nombre, creo yo, de igual forma no está tan mal -mañana tendrás las respuestas de todo -Mira a Isaías y le lanza una sonrisa de oreja a oreja.

-Melissa, perdona lo directo que soy, pero, ¿nos permites quedarnos un día aquí? Raúl y Celeste nos están siguiendo -Le dice a Isaías a Melissa, parece ignorar la sonrisa de Melissa, algo no va bien por..

-Oye, ¿que crees que estas haciendo? Acaso sólo quieres dormir con ella, tengo razón, ¿no? - Interrumpe Aldren, alterado -Se que la acabo de conocer, pero nadie va a dormir con ella

Todos miramos a Aldren

-Melissa, no juegues con el joven -Dice Isaías con una mueva de sonrisa -Y tu Aldren, será mejor que cierres tu corazón, no queremos que te manipule cualquiera que pase cerca.

¿Melissa estaba controlándolo? Yo no vi ningún resplandor..

-¿Cómo es posible que lo estuviera controlando? No vi ningún resplandor -Digo

-Bec, mira mi piedra -Me dice Melissa, me costará acostumbrarme al "Bec"

Al ver su piedra noto que es totalmente blanca -Es blanca -Le digo

-Exactamente -Me dice -En el día es prácticamente imperceptible a los ojos humanos, claro, en la noche es imposible pasarla por alto. -continúa mientras se voltea hacia Aldren -Así que nadie más va a dormir conmigo si no es que eres tu, ¿eh? -Le dice a Aldren, de nuevo con su tono provocativo.

-¿Que? ¡No! Me manipulaste cuando tenía mi corazón abierto, eso es todo -le responde Aldren, se le quebró la voz. Esta nervioso.

-Si abriste tu corazón es por algo, ya te estaba llamando la atención -Melissa se acerca a la oreja de Aldren - ¿No es así? - Termina Melissa, susurrándole a Aldren.

Melissa y Aldren siguen hablando al respecto por un buen rato y volteo a ver a Isaías, quien esta viendo el anillo que le dio mi tía, se me había olvidado esa escena antes de salir de la casa de mi tía donde le dio el anillo de bodas.

-Isaías -Le digo

-Si ¿Rebecca? -me dice, volteando a verme.

-¿Que fue lo que pasó ahí? ¿Por que mi tía te dio el anillo de bodas mientras tu brazalete estaba brillando? -Digo, tratando de no sonar tan pesada.

Suspira -Tu tía nunca estuvo enamorada de mi, utilicé mi brazalete para que ella creyera que estaba enamorada de mi, así podía acercarme a tu familia -Me dice, ahora viendo mi brazalete

-¿Por qué querías acercarte a mi familia? -le pregunto. Realmente no me sorprende mucho lo de mi tía.

-Porque.. Quería evitar que Kennedy obtuviera el brazalete que posees -Me dice. Algo no me hace confiar mucho en eso.

-Bueno, creo que ya va siendo hora de irnos a dormir -Dice Melissa entre risas -Tengo un colchón donde te puedes quedar Isaías y Bec y Aldren se pueden quedar en la otra alcoba -Agrega -Al menos que Aldren me quiera acompañar esta noche -Viendo a Aldren con la misma sonrisa con la que lo recibió y Aldren le regresa la sonrisa. Se acabó ya no lo resisto más.

-¡No! Jamás dejaría a mi hermana sola, y menos por alguien como tu, a la cual acabo de conocer -Le responde Aldren. Gritándole

Melissa mira mi brazalete, el cual ahora que lo veo esta brillando ¿Yo hice eso? ¿Manipulé a mi hermano?. Veo a Melissa, quien me da una sonrisa y levanta la ceja.

Melissa se acerca a Aldren -Duerme bien -Le da un beso y se va a su cuarto. Aldren parece algo confundido.

-Bien echo lo de tu hermano, Bec -Me dice Isaías. Perfecto, ahora el también me dirá así..

Nos vamos a nuestro cuarto y cerramos la puerta.