"No se te ocurra volverme a dejar"

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Saúl:
Me desperté de repente sintiendo el otro lado de cama frío y vacío: se había ido.
Me levanté pensando en todo lo que sucedió anoche, aún no sé si es sueño o realidad, lo que sí sé es que fue maravilloso, lo repetiría una y mil veces. Me acerqué al escritorio que está en mi cuarto y encontré una nota. La leí e inevitablemente en mi rostro se dibujó una sonrisa amarga.
~A que juego estás jugando Altagracia?~
No entiendo esa mujer, quisiera meterme en su mente y poder descifrar sus pensamientos y hacerle espacio para que ella también pueda leer los míos. Si sólo supiera lo mucho que la amo, lo mucho que la extrañé, lo bien que la pasé anoche...Además, ella siempre tiene razón: ya me estoy muriendo de ganas, y esto que ni siquiera pasaron 24 horas.

Altagracia:
Me levanté con un gran dolor de cabeza. Miré el reloj y eran las 10 de la mañana.
~Caray, dormí demasiado!~
Bajé en la cocina por el desayuno y me encontré con Laura.

"Se puede saber que hiciste ayer todo el día y porque no llegaste a dormir en la casa?"- preguntó un poco furiosa

"Por lo que yo sepa ya soy una mujer adulta, no necesito niñera"- dije molesta

"Y tu hija que? Ayer no te vió todo el día, me preguntó en continuación por ti y tú no contestabas mis llamadas. Esta mañana cuando se levantó tú seguías dormida. Tuve que acompañarla yo a la escuela, hoy es su primer día de clases, está empezando la primaria, en un nuevo País y sin su mamá. Toda la mañana lloró..."

Mi hija...cómo se me pudo olvidar que hoy es el primer día de escuela? Que clase de madre soy?
Desde que llegué a México soy muy despistada.
Tendré que hacerme perdonar.
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Salí de la casa y me fui a la constructora.

En la tarde llegó una visita muy inesperada.

Isabela y Regina entraron en mi oficina.
Me asusté cuando las ví, mis piernas empezaron a temblar, de inmediato una fina rete de lágrimas cubrió mis ojos. Sabía que tarde o temprano este momento iba a llegar, que tendría que enfrentarlas, explicarles todo pero aún no me sentí lista.

"Altagracia...entonces es cierto, estás viva, regresaste!"- dijo Regina con un hilo de voz.

entonces es cierto, estás viva, regresaste!"- dijo Regina con un hilo de voz

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"Tía...Como es posible que estés viva, que no te hayas ahogado en el mar? Por qué fingiste todos estos años? No nos llamaste, no nos dijiste que estabas viva, siempre tienes que mentir! Nosotros somos tu familia, nos hiciste sufrir demasiado. Tienes idea de lo mal que la pasó mi madre estos años creyendo que te habías suicidado y pensando que ella era en parte culpable de esto? Seguro lo supiste por que tú siempre te enteras de todo pero no te importó porque siempre piensas solamente en ti! "- soltó con mucha rabia e impotencia

"Isabela...Yo..."- mi voz estaba quebrada. No sabía que decirles. Por más que trataba de encontrar las palabras adecuadas, no lo lograba.
Esto me dolió demasiado, lo que Isabela me dijo me hirió profundamente en el corazón y lo peor es que tenía razón.

Las tres nos mirábamos en silencio llorando.
Dí unos pasos inciertos hacia ellas y me detuve.
Las miré de nuevo a los ojos y de repente ambas se lanzaron sobre mí y nos fundimos en un fuerte abrazo.
Hace años que lo necesitábamos.
~~~~~~~~~~~~~~~~~
Llegamos a la casa de Mónica.
Ella también se había enterado de que estoy viva y regresé pero no quiso acompañar a Regina e Isabela a la constructora.

Ella me esperó allí, en su casa.
Cuando entré estaba caminando nerviosamente de un lado a otro del salón.
Me vió.
Nos miramos.

Después de tantos años estoy aquí, con la que una vez fue mi familia...una familia a la que necesito recuperar.

Finalmente habló: "Por qué Altagracia? Por qué? Te fingiste muerta, te fuiste, ma abandonaste otra vez! Yo te necesitaba, siempre te necesité..."

Empezamos a llorar fuertemente hasta que yo decidí romper el hielo, me acerqué a ella y la abracé más fuerte que nunca

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Empezamos a llorar fuertemente hasta que yo decidí romper el hielo, me acerqué a ella y la abracé más fuerte que nunca. Ella correspondió mi abrazo, me apretó fuerte a ella y escondió su cara en mí hombro continuando a llorar.
Fue un abrazo lleno de dolor, nostalgia, cariño contenido por años y amor...sí,amor!

"No se te ocurra volverme a dejar Altagracia Sandoval!"

"Jamás mi niña, jamás..."

Subimos al cuarto de Regina y les conté todo: sobre como logré sobrevivir y sobre mi embarazo, sobre los problemas de salud de Luz y sobre mi vida en París.

Después nos quedamos dormidas allá las cuatro.

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Sé que no se esperaban que actualice tan pronto, para que vean que los quiero 🙈😅
También sé que no se esperaban que esto pase, pero pasó 🙊
Ojalá que este capítulo también les guste, no olviden dejar sus ⭐️

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