Capitulo 1: La casa Morgan

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- Es encerio Noah! tienes que comportarte- escuche decir a mama una y otra vez.

- Mama seguramente son todos unos bebes consentidos de papis, ya sabes que yo no soy así, y no podría acostumbrarme a ellos.

- No te pido que seas su amigo, solo que en lo que los veas seas amable, muestres  respeto y la educación que alguna vez te di.

- De acuerdo, pero juro que si alguna vez uno de esos bobos me falta el respeto les pateare el trasero- dije decidido a que en verdad lo haría.

- Solo recuerda que esto es muy importante para tu padre y para mi.

Mama dio media vuelta y escuche sus tacones bajando por la escalera.

No puedo creer que el año anterior papa vendía boletos de autobús y mama era vendedora de vienes raíces;  luego ganaron la lotería y ahora estoy usando un traje para ir a una cena de negocios.

Bueno algo así, se supone que mientras ellos hablan de sus asuntos yo, sociabilice con alguno de los hijos de los demás pero no soy muy bueno en eso, además ni siquiera los conozco, pero ya tengo una idea.

  Baje por las escaleras y vi a papa y mama esperándome, se veían realmente nerviosos, supongo que porque no sabían como enfrentarse a personas que habían sido millonarios toda su vida, y ellos eran personas corrientes.

  Subimos a la camioneta en completo silencio y no hablamos durante todo el viaje.

  Me di cuenta que habíamos llegado porque tenia frente ami un country con mansiones tan espectaculares que no había visto jamas.

Paramos en una mansión de dos pisos, blanca, con una fuente de agua y un jardín delantero asombroso, además note un balcón blanco de columnas encima en el segundo piso; mientas seguía observando, no note que los dueños de la casa estaban hablando con papa y mama.

  La mujer era alta, delgada, rubia y con ojos azules; y el hombre era algo morocho con ojos negros y también alto y delgado.

- Soy Noah, encantado de conocerlos dejenme decirles que tienen una residencia extraordinariamente bella.

- Ellos estrecharon mi mano y acentuaron de manera que me agrado.

Ingresamos a la mansión y el interior superaba mis expectativas, mi casa no era nada a comparación de esto, considerando que nos mudamos a una mas grande y lujosa después de haber tenido un poco mas de dinero.

  Nos llevaron hacia el patio trasero donde había una mesa de vidrio larga y se encontraban sentadas unas 15 personas, ademas tenian una piscina agradable, miles de flores y arbustos, dos fuentes mas y otro balcón en el segundo piso igual que el de adelante pero mas grande.

- Una casa demasiado grande para dos personas- dije en voz alta.

por suerte nadie me escucho, hubiera sido descortés.

- tres- soltó un chico atrás mio parado solo y caminaba hacia mi.

-Disculpa?- le dije de mala gana.

Me miro decidido y dijo -tres personas viven aquí-

Yo no había visto a nadie mas, y estaban todos en la mesa, todos con sus padres, lo cual creo que no hay nadie mas aquí.

Volvi a hablarle - Disculpa pero yo no veo a nadie mas aqu...- y entonces la vi, estaba caminando sola hacia en final del balcón con la mirada algo caída, vestía un vestido rojo  igual que sus labios, era corto y se ataba en el cuello, unos zapatos negros aguja y era rubia.

Parecía aburrida y y triste allí sola mirando el cielo.

- y tu?- me dijo el chico parado junto ami, había olvidado que estaba allí y no lo escuche en ningún momento.

- Perdon que?-

Rió -soy Marco y tu?

-Ah si eso, me llamo Noah, y ella quien es?- pregunte señalándola.

- Como mi hermana menor- respondió algo serio.

- Tiene algún nombre?

- No quiero ser descortés- dijo - pero no tiene que importarte nada de ella, no pareces un mal tipo encerio, pero esta prohibida-

- Lo siento, no sabia que te gustaba.

Comenzó a reír - que???? no, ella es mi prima pero tiene novio-

Rayos -Uhh, y quien es? - Pregunte con un tono desinteresado

-El-  señaló a el tipo que ahora estaba a su lado haciéndola reír, era más alto que ella, se notaba su fisico, bastante rubio y ojos claros.

- Hey tortolos! bajen a saludar, tenemos visitas- Dijo el señor Morgan.

Ellos miraron en nuestra dirección y bajaron.

Una vez abajo me acerque a saludar, el chico me miro con cara desagradable y ella con una amplia y perfecta sonrisa en su rostro.

  Me tilde por unos segundos al notar que no conocía su nombre, se lo pregunte, comenzó a reír tímidamente levantando su mirada y dirijiendose hacia mi, tenia unos ojos perfectamente azules, los mas hermosos que halla visto en toda mi vida probablemente, esos que podían lograr que yo hiciera cualquier cosa, esta chica tenia que ser mía y no la compartiría y finalmente respondió.

-Luna.

 



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