Tentacion Infernal

Capitulo 4: Caracoles Inofensivos

Las olas se veían grandiosas, aveces pienso en surfear, me gustaría ser muy bueno.

Estaba algo aburrido debido a que estábamos con una manta sentados en la arena en una especie de picnic, me sorprende los sencillos que pueden ser estos chicos aveces.

Abby coqueteaba conmigo y me sentía algo incomodo, Kendall estaba jugando al voleibol con Amber y Marco; pero faltaban Franco y Luna, no los había visto desde la noche anterior.

Aparecieron al fin de 20 Minutos, ella estaba hermosa como de costumbre, llevaba la parte de arriba de la malla,un pareo hasta las rodillas en la cintura, anteojos de sol los cuales odie y ame porque no me dejaban ver sus ojos azules, el cabello suelto y a un lado y unas sandalias colgando de sus dedos, por lo cual estaba descalza.

Estábamos en una parte de la playa donde solo nos encontrábamos nosotros, no había mas gente para disfrutar el hermoso paisaje.

Después de comer y hablar Luna se fue a juntar caracoles y yo la seguí, quería tener una conversación con ella para conocerla un poco mas.

-Te gustan los caracoles?

- Se nota?- respondió con una mirada sarcástica

- Hace mucho que salen Franco y tu?- pregunte.

Me miro como si supiera lo que pasaba por mi mente - No lo se, aproximadamente unos 5 o 6 años- respondió.

Al principio pensé que bromeaba pero después me di cuenta por su mirada que no.

- Y lo amas?

- Claro que si, no entiendo porque me estas preguntando estas cosas que no son de tu incumbencia ya que prácticamente ni nos conocemos, es decir si, pero solo un poco, apenas nos vimos tres veces.

No pude evitar sonreír en forma de burla lo que pareció enfadarla, me gustaba su vocabulario tan correcto.

- Si es verdad lo que me dices, no tienes porque ponerte nerviosa-.

Entre abrió la boca como para decir algo pero no supo que, finalmente dijo - Tienes razón, no se porque fui tan grosera, tu solo preguntaste  algo coherente y no me faltaste el respeto, así que no tengo porque hacerlo yo lo siento. Es que hoy me he despertado con pésimo humor y me desquite contigo.

Me miro como si estuviese arrepentida de lo que había dicho, diablos ella era perfecta.

- Saldrias conmigo?- pregunte, que idiota soy, ella tenia novio claro que no saldría conmigo.

- No- sonrió.

- Me refería como amigos-

- Eso estamos haciendo ahora y lo haremos seguido EN GRUPO- me remarco.

- No veo que tiene de malo que dos personas normales salgan como dos amigos normales- ella se agacho y recogió un caracol que se parecía a una almeja.

- No creo que sea bueno, si quiero que seamos amigos encerio pero...- y fue bajando el tono de la voz

- Entiendo, a Franco no le gustaría- dije mirándolo y notando que el estaba parado cruzado de brazos adelantado a los demás con cara de enojo.

- Claro que no es eso- se encongio de hombros sin saber que decir también giro la cabeza mirándolo.

- No tienes de que avergonzarte, hay muchas chicas como tu-

- Como yo?- Parecía algo confundida.

- Si, como tu, que no hacen ciertas cosas porque sus novios no las dejan o a ellos no les gusta- lo dije a propósito, de alguna razón quería que se enojara.

- Yo no soy una de ellas, a mi no me manipula nadie, ni siquiera Franco, decido por mi misma, y no quería ser descortés pero ahora te digo que no quiero salir contigo.- dijo

Debo admitir que me dolió un poco saber que no quería salir conmigo ni siquiera como amigos o ir mas alla de las salidas en grupo, pero al mismo tiempo no pude evitar sonreír porque parecía que era difícil de conseguir. Sonreí burlonamente.

Se quedo por unos segundos observandome con ojos de enojada directamente a los mios, pero yo solo veia unos hermosos ojos azules.

Se dio media vuelta, se fue caminando en dirección a su novio, le dio un beso de puntillas, el no cambiaba su postura firme y enojada e incluso seguía observándome.

Decidí no bajarle la mirada hasta que la corte riendome desafiandolo, camine en dirección de los chicos y cuando estoy por llegar, Franco choca su hombro fuertemente con el mio.

- Cual es tu problema? - dije.

- Mi problema? Es que no dejas de mirarla- Señalándola con la cabeza.

- Franco basta sientate- Dijo Luna

- Basta chicos no es momento de problemas chicos- Dijo Marco poniéndose entre los dos.

Nos sentamos, pero Franco me miraba aun mas de lo anterior, y eso era mucho.

Fue incomodo volver a entablar una charla, pero cuando lo hicimos Franco rodeaba a Luna con sus brazos y aprovechaba todo momento para besarla.