Ocurrió hace muchos años, tantos que prácticamente nadie, salvo las criaturas fantásticas que habitaban aquellos siete reinos, queda para contarlo. Por aquel entonces, seis de esos reinos estaban en una inferioridad muy notable respecto al que se hallaba al norte de todos ellos, razón por la cual terminaron anexionándose unos con otros. Ávalon, el más poderoso de todos, se hallaba en una época de gloria, tanto a nivel de riquezas como de prestigio, y no fue tanto por méritos propios, sino por el declive más absoluto que había sufrido el reino de Arendelle, en aquel momento conocida como Årendal.
Ya hacía tiempo que habían ocurrido aquellos terribles acontecimientos relacionados con la misteriosa mujer que portaba unos extraños poderes de hielo con los que logró imponer un reino de horror, penumbra y no menos muertes. Muchos fueron los años que aquella misteriosa bruja estuvo reinando en Årendal hasta que, un día, un grupo de doce hombres asaltaron su gélida fortaleza.
Se había corrido la voz de un posible punto débil de aquella Reina de las Nieves que parecía imparable debido al don de la vida eterna; no era un don muy común, de hecho era considerado así por el resto de las personas dado que la reina no era mas que una entidad nevada con apariencia humana, o al menos eso se creía, y por tanto era imposible que pudiera morir de manera natural. La tirana cometió el fatídico error de resguardar sus poderes en un artefacto que ella misma creó; se trataba de un orbe cristalino capaz de albergar su propia magia, el núcleo que daba pie a su existencia, haciendo de él una fuente de poder. Tal era la ambición de la reina que tomó esta decisión.
Aquel día, la vida de la Reina de las Nieves fue apagada entre los doce hombres que arremetieron contra ella, destruyendo su fuente de poder y, posteriormente, su existencia; desgraciadamente solo cinco de ellos lograron sobrevivir al asedio.
Tras los acontecimientos, Årendal se vio sumido en una profunda crisis de la que tardaría mucho en volver a vislumbrar una época próspera. Pasaron muchos años sin tener un reinado claro, únicamente los responsables del momento decidieron mantener al reino en pie y entre todos ellos le cambiaron el nombre a Arendelle, en referencia a una nueva era de paz y armonía que pretendía alejarse de aquel desastroso recuerdo que duró demasiado tiempo, a la vez que formaron a Weselton como un ducado del mismo.
Por su parte, Ávalon cogió mucho impulso gracias al gran descenso de Arendelle, podría decirse que se encontraba en la mejor posición en la que ningún otro reino se hubiera encontrado jamás; sin embargo, el día menos esperado surgió una terrible guerra civil en el reino del Alto Norte. El caos se apoderó de su totalidad como una chispa que incendia el más frondoso de los bosques en el menor tiempo posible. Nadie supo por qué sucedió esto, simplemente ocurrió.
Ávalon se desplomó bajo una tormenta nevada que acompañó a toda aquella fatídica guerra, tal fue el fenómeno que a día de hoy es imposible acceder a su interior debido a la poca temperatura que allí reina. Aquello provocó que gran parte de la población se desplazara a otros reinos, incluyendo a los reyes de la monarquía presente, que acabaron desplazándose hastaa Arendelle e intentaron formar allí una nueva vida tanto para el reino como para sí mismos. El nuevo rey de Arendelle era gran conocedor de su pasado y decidió ordenar la reconstrucción del artefacto esférico de la leyenda en honor simbólico e histórico.
Lo sucedido con Ávalon fue, cuanto menos, alarmante. Hasta la fecha ningún reino había sufrido semejante atrocidad hasta acabar consumiéndolo por completo, ni siquiera Arendelle en los tiempos de Årendal. Desde aquel momento, el reino permaneció deshabitado, desolado, y en un silencio que le hizo quedar en el olvido. Toda guerra comienza con una chispa, y en el caso de Ávalon, solo quien provocó aquella chispa pudo conocer la verdad.
-Nuevamente, no hay nada que no haya leído antes... -comentó Elsa con cierto derrotismo junto a Rapunzel y Shira, en una parte de la biblioteca a primera hora de la mañana.
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Frozen Souls.
FanfictionLa reina Elsa creyó haber abandonado todo el miedo y la maldad que albergaban sus poderes, pero... ¿y si lo único que consiguió fue un problema mayor? ¿Logrará acabar con su propia oscuridad? [Continuación de "El príncipe de fuego."]