*Capítulo 6*

22 2 0
                                    

Nota:
Esto que escribí aquí es totalmente mi imaginación, no es verdad, si hubo un presidente llamamo Williams o parecido. Yo no lo sabía. Sólo lo aclaro, por las dudas.

---------------------------------------------------

*Narrador omnisciente*

Valentina se tranquiliza un poco mientras prepara unas cosas.

-- ¿Te sientes mejor?-- pregunta el moreno.

-- Un poco. Ya no estoy tan psicópata.

-- Que alivio.

Ambos ríen, se dan una mirada rápida a los ojos del otro, y sonríen.

-- Oye,-- se sienta en la cama.-- Ven. Quiero decirte algo.

El moreno no dudo y se sentó a su lado.

Ella con un poco de miedo, toma su mano y encima le pone a suya.

-- Perdón, por como me comporte la semana entera.

-- No fue tan grave.

-- Estaba desquiciada, te amenazaba, te hablé de la peor manera, casi te mate, lo que hice no tiene remedio alguno.-- lo mira a los ojos.-- Pero quiero que me disculpes.

Él con su otra mano, la pone encima de las de ella.

-- Te perdono y discupo.-- sonríe.

Se mantuvieron callados unos segundos.

《No me resistire más. No dejo de pensar en ti. Quiero besarte.》Richard.

《Deja de mirarlo, es extraño, nunca había admirado esa linda sonrisa y esos ojos hermosos. Si me sigue mirando me le aventare. Pero no sería adecuado. 》 Valentina.

Él se acerca poco a poco, ella se aleja un poco. Él se detiene y muerde su labio. Pero lo vuelve a intentar y llega a besar esos labios, que lo tenían intrigado.

Ella se separa al notar que era más que un simple beso de prueba.

-- Bien, hay que irnos, Joel no espera a nadie.-- se excusó.

Toma su mochila y lo mira desde la puerta.

-- ¿No vienes?-- dijo con una gran sonrisa.

Él suspira, toma su mochila, (Aunque no tenía tantas cosas, pero lleva cosas que les puede servir) y sale de ahí.

Para la suerte de ambos, aun caía nieve, así que era fácil ocultarse.

Todo el camino al límite de la ciudad fue silenciosa.

Subieron luego de media hora esperando a que llegará Joel con el auto.

-- Al fin. Nos estábamos volviendo estatuas.-- dice Valentina.

-- Lo siento, es que un viaje así, no es que se te presenta la idea y ya te estás llendo.-- dice sarcástico.

-- Las llaves.-- le pide Richard cortando la charla.

Joel de mala ganas se las da.

-- Nos vemos luego.-- se despide ella.

-- Chau, enana.-- la abraza.-- Ten mucho cuidado. No me agrada este tipo.-- le dice al oido.

-- Ahora estoy casi a su altura.

Joel guarda un teléfono en su abrigo.

-- Solo Úsalo para emergencias, si lo usas te rastreare enseguida. Sino llamas no te puedo localizar.

Escondeme // Richard Camacho Donde viven las historias. Descúbrelo ahora