Pedido por: @paulina_13
Yandere Guren x lectora.
(Nunca antes había escrito algo así, por lo tanto, lamento que sea tan corto, realmente espero en algún futuro poder reescribirlo).
----
Todos estaban en hablando en ronda en la habitación de Guren, era una minifiesta. Hasta que ocurrió...
El cuerpo del pelinegro se sacudía con rabia, y realmente no podías entender del todo por qué. Sabías que él era celoso, pero nunca pensaste que llegaría hasta tal extremo.
"G-guren... ¡Guren! ¡B-basta, por f-favor!" lo detuviste antes de que pudiera golpear a Shinya. Joder, nunca lo habías visto de tal forma, ¡y con su mejor amigo!
Simplemente había sido un roce: Mito sin querer te había empujado, provocando que cayeras sobre el albino, rozándole los labios.
"¡Basta, _____!" te sobresaltaste al escucharlo gritar. "¡Tú siempre defiendes al resto! ¡Casi se besan! ¡Yo soy tú novio, el único con derecho a besarte y tocarte! ¡Nadie más!"
Temblaste ante su tono de voz, era oscuro, casi rozando a lo siniestro; realmente hablaba en serio.
El se acercó a ti. "Eres mía, ¿entiendes? De nadie más. Mía." Su mirada penetró en la tuya, y se rehusaba a dejarte escapar.
"S-soy tuya..." murmuraste, pero aquello no fue suficiente para sacar su mirada de ti. "Sólo tuya, de n-nadie más."
El peliblanco había huido de la habitación al igual que el resto de los chicos al ver que la conversación se tornaba más íntima.
Tu corazón bombardeaba con fuerza en tu pecho, al punto que parecía que explotaría en cualquier momento.
"Eso es, así me gusta. Mía. Sólo mía." murmuró con una sonrisa, mientras se acercaba a ti.
Te tomó de la cintura y escondió su rostro en el hueco que se formaba entre el cuello y hombros. Soltó un pequeño ronroneó mientras inhalaba el aroma en tu pelo y una pequeña sonrisa atravesó su rostro. Alzó la mirada para captar sus ojos con los tuyos.
"Me amas, ¿verdad? Dime que me amas." su voz sonaba mucho más suave, a comparación a instantes atrás; pero aún así no perdía su tono amenazante.
"Y-yo..." te encontrabas asombrada ante sus palabras, nunca lo habías escuchado hablar así.
Se separó bruscamente ante tu silencio, mientras te observaba con el ceño fruncido. "¿Por qué no respondes---?"
"Te amo, Guren." murmuraste, algo sonrojada mientras le mirabas sumisamente.